A tu lado | soojun

(XVIII)

Narra Kai: 

Aún no me acostumbro a sentir las emociones de los chicos, porque si bien solo pasa cuando es una emoción muy fuerte, es sorpresivo, a veces me toma desprevenido y es extraño, como ahora, de la nada, alguien pasó de estar nervioso, estresado, triste y un tanto enojado, a estar arrepentido y temeroso. Alguien más está deshaciéndose en llanto por ahí, otro alguien está muy preocupado. Son tres personas, tres personas que no logro identificar hasta que Taehyun sube corriendo, arrastrándome con él, mientras de su boca salen un montón de palabras, de las cuales solo entendí el final. 

― Kai, ve con Yeonjun ―obedecí, corrí muy rápido, sin fijarme en el desastre que había en el pasillo, pero creo que vi sangre, sin embargo, es imposible, los únicos que no he visto son los hermanos, no se dañarían entre sí. 

― Yeonjun, ¿qué pasó? 

― Nada, no te preocupes ―se quitó algunas lágrimas sin levantar la mirada. 

― ¿Es por Soobin? ―sabía cómo se sentía, Soobin se había distanciado y eso le dolía, pero debía entender, Soobin podría perder el control, Yeonjun es como la Luna y Soobin la Tierra, influye mucho en él. 

― Sí, pero, creo que debería disculparme, hace lo que puede, y yo le salgo con esto. 

― Deberías, pero desde ahora, ponle empeño a tu auto-control, sería un peligro para ambos estar juntos si no sabes controlarte. 

― Lo sé, prometo que lo haré bien. 

― Sé que sí, eres muy bueno, vamos, lávate el rostro y descansa, seguiremos practicando luego. 

― ¿Por qué no te afecta? 

― No sé, es decir, se podría decir que Taehyun es el escudo de Beomgyu, pero no sé ―después de que se lavara el rostro, se acostó, lo arropé y se quedó dormido, debía estar muy cansado―. ¿Qué pasó? ―Soobin estaba en una especie de trance, Beomgyu había perdido mucha sangre, claro, estaba bien gracias a Taehyun, pero estaba débil. 

― Parece que Soobin atacó a Beomgyu, pero es una clase de poder que él mismo selló, no quería que eso volviera a pasar, me lo contó una vez, casi mata a Beomgyu cuando eran más pequeños, ahora solo fue su brazo, ésa vez, la herida estaba peligrosamente en su cuello, pudo haber sido mortal si no fuera por tu hermana, Lea noona, pero desde ese día, Soobin selló eso, tenía miedo de hacerle daño, a él o alguien más. 

― No fue su culpa, yo lo provoque, se veía que estaba al borde de un colapso, creo que ni él se había dado cuenta, pero parece que el sello se rompió, debí dejarlo ir. 

― ¿A dónde iba? 

― Ni la menor idea, no quiso decirme, solo dijo que me quedara aquí ―el cuerpo de Soobin hyung empezó a desaparecer, los tres lo miramos en silencio, ninguno sabía qué decir―. Según veo, estaba a nada de un viaje ―no lo sé, eso se veía extraño―. ¿Cuándo podré usar mi brazo? 

― Mañana, te recuperas rápido, por suerte ¿Qué pasó? 

― Como digo, parecía estar al borde de un colapso, yo insistí a pesar de que me dijo que me quedara, sus órdenes eran claras, maldita sea, duele. 

― Ya sé, lo siento, pero es lo más rápido. 

― ¿Cómo pasó? 

― Pues, lo tomé del brazo y de la nada, casi me quedo sin brazo derecho, sentí esa ráfaga otra vez, pero no entiendo, no debería haber pasado eso. 

― Espera, una llamada ―era Hiyyih, contesté y la puse en altavoz―. Hola 

― Se redujo mucho tiempo, tienen tres meses más, no sé qué pasó, una ráfaga con una energía oscura entró. 

― ¿Fue alguno de ustedes? 

― Soobin ―respondí enseguida. 

― ¿Pero cómo? 

― No sé, ya lo veremos, gracias Hiyyih, noona, hasta luego ―colgué―. Ya las oyeron, debemos encontrar a Soobin, pero ya. 

― Sobre Yeonjun, no creo que esté listo. 

― Pues debe estarlo, de cualquier manera, no importa que tengamos que hacer. 

― Yo hablaré con él. 

― No, déjale eso a Soobin. 

― Intentaré seguir su rastro, pero no prometo nada. 

― Taehyun, busca maneras de acelerar el aprendizaje de Yeonjun, todo, sea seguro o no, lo quiero todo. 

― Bien. 

― Iré con mis hermanas, debo investigar si puedo darnos más tiempo. 

¿Cómo todo podía estar saliendo tan mal?