Mi Alma Gemela

Capítulo 39

Narrador

Ya era viernes y habían pasado 3 días desde que Harry mordió a Tom e hizo todo esfuerzo posible para pasar todo el tiempo disponible con el castaño, usó cada periodo libre y casi toda la cena, desayuno o almuerzo. Los gemelos empezaron a preguntar donde estaba el castaño e identificó la preocupación en sus voces le calentó el corazón que ellos se preocuparan por él.

Sabe que tiene que decirles lo que pasó y que no podrá llevarlos a la Cámara de los Secretos el fin de semana, Tom se enfurecería con su persona si hace que lo vean en un estado tan débil. Por lo que pensaba decirles tan pronto llegara el almuerzo que se tomó unos días para preparar la Cámara de los Secretos para su próxima ida al lugar.

Referente a Tom, cuando estaba con él siempre era envuelto por sus alas y su magia. Podía verlo relajado con una leve sonrisa en sus labios bastante adormilado y enfurruñado por estar tan débil e incómodo al no poder acceder a su magia por completo. Él se quedó a su lado un tanto preocupado, Tom estaba empezando a presentar una leve fiebre y mucha resistencia cuando tenía que irse.

Harry no lo sabía, pero desde que despertó el miércoles en la mañana Tom se despertaba poco después de que se iba, se retorcía del frío que estaba experimentando con su mente un tanto difusa con solo su pequeño león en ella murmurando su nombre casi con desesperación. Cuando volvía a su lado hacía todo lo posible para que no se fuera y lo dejara solo con ese maldito frío, pero terminaba por dormirse tan relajado que se escurría de sus dedos sin saberlo.

Volviendo con Harry sus días fueron tranquilos, la clásica hostilidad de Gryffindor, como los Slytherin casi se estaban pavoneando de lo contentos y orgullosos que estaban por tener a su Slytherin Honorario, tener al dulce Harry en su casa viendo lo feliz que estaba por pertenecer a ellos intercambiando varias palabras entre clases con sus compañeros de Slytherin.

El director ajeno a eso pensaba que todo estaba resultando como planeaba aún disgustado con que Ginny no pudiera encontrar el diario, pero pronto lo haría. Después de todo había logrado que Harry fuera aislado, solo faltaba que sus amigos se acercaran a él poco a poco para hacerle saber que estaban asustados, eran solo niños y Harry con las compulsiones renovadas sentirá que hablar pársel es una vergüenza y un rechazo que mereció estar solo.

Harry al contrario de lo que muchos pensaban le estaba empezando a importar cada vez menos que su casa lo despreciara, tenía a Tom, Fred George, Neville y a los Slytherin's, no necesitaba compañía de personas prejuiciosas que lo único que hicieron fue acosarlo y aislarlo sin siquiera escucharlo.

El pelinegro entre sus clases, acompañar a Tom todo el tiempo libre que paso solo una cosa interesante en el desayuno de hoy ganando miradas furiosas de los estudiantes de Gryffindor y curiosas del resto de las casas al recibir un búho claramente de Gringotts. Mientras el director hizo todo lo posible para saber que le enviaron y como es que recibió esa carta cuando siempre logró interferir con el correo de los goblin hacia su arma. Él no debía saber nada de su riqueza, influencia y poder, no permitiría que se informara e hizo todo lo posible para leer esa carta.

Claro que no resultó como esperaba.

Flash Back.

Harry estaba tranquilamente desayunando sin mucha hambre, desde que se despertó el miércoles no había tenido mucho apetito. Fred, George y Neville curiosos de eso decidieron no preguntar por el momento decidiendo esperar a que el propio pelinegro se lo contara. De repente empezaron a llegar las clásicas lechuzas sobre el periódico o carta de sus familiares.

Todos los ojos se posaron en Harry cuando recibió una carta, todos curiosos excepto casi toda la casa de Gryffindor, los demás supieron que era un búho de Gringotts en especial Dumbledore quien peleo por su ceño fruncido, no debería recibir correo del banco cuando estaba interviniendo aquello.