Mi Alma Gemela

Capítulo 25

⚠️ADVERTENCIA: CAPITULO EXTREMADAMENTE LARGO⚠️

Narrador

Habían pasado dos semanas desde que fue Navidad, hoy estaban de regreso el resto del alumnado para comenzar su segundo semestre en Hogwarts. Durante ese tiempo pasaron bastantes cosas, primero fue la convivencia entre Tom y Harry, hicieron un pequeño horario en lo que llegaban los demás, el pelinegro en la mañana iba a desayunar al Gran Comedor en compañía de Tom bajo la capa de invisibilidad.

Después del desayuno Harry desaparecía del radar quedándose en la Cámara de los Secretos teniendo clases con Tom. Ambos acordaron iniciar lo antes posible, por lo que iniciaron con terminar su enseñanza sobre cultura, tradiciones, costumbres y etiqueta sangre pura. El castaño pudo ver que sobre los tres primeros puntos fue fácil para el pelinegro aprenderlo, hasta se leyó todos los libros que le recomendó.

Enseñarle a Harry todo aquello le tomó 3 días, los otros 4 fueron para enseñarle sobre etiqueta, aliviado Tom vio que el caminar era natural, solo tuvo que enseñarle modales, el habla y comida, entre otras cosas que aprendió gracias a Abraxas. Sin mencionar la correcta interacción entre dos Lores, considerando sus títulos jamás se debería inclinar primero frente a alguien a excepción tal vez del Ministro, pero debería ser muy sutil.

Además de toda la etiqueta y aprender sobre las costumbres, rituales tradicionales y más vieron sobre Oclumancia, era imperativo que Harry aprendiera a ocluir, ya que le ayudaría a ocultar sus emociones y proteger su mente, a pesar de que era natural por su criatura, Tom quiso enseñarle de todas formas. También le ayudo a meditar para que fuera capaz de crear su pasaje mental, fue algo bastante fácil considerando que ya no tenía todos esos bloqueos.

Una vez que Tom se aseguró de que la mente de su pareja estuviera totalmente protegida, empezó a intentar Legeremancia con él para mostrarle la forma correcta de echar a alguien de su mente y como detectar una intrusión, gracias a las fuertes barreras mentales nadie podría siquiera rozar sus pensamientos superficiales. Sin embargo, acordaron que apenas sintiera la intensión de alguien de leer su mente enviara pensamientos lastimeros y solitarios, uno que otro sobre las materias.

Además de sus clases de Oclumancia esa semana aprendieron a convivir y ser abierto con el otro, Tom trabajaba mucho en eso para abrirse a su pequeño león, pero siendo precavido en no mostrar las tendencias que tuvo cuando joven. Eso y que también gracias a la meditación constante de ambos el castaño pudo organizar de mejor manera sus recuerdos y creando su propio pasaje mental mucho más fuerte que antes.

Y no olvidemos que no todo fue estudio y meditación, a pesar de lo reacio que estuvo Tom al principio aceptó jugar variados juegos de mesa Muggles que pidieron por búho a petición de Harry. Tom aprovechó esa oportunidad para enseñarle póker a su pequeño león. También jugaron ajedrez mágico, a Harry le interesaba el juego y quiso aprender más y gracias a su alma gemela se estaba volviendo experto en el tema.

Otra cosa que pasó en esa semana fue la interacción de Gema y Hedwig, al principio la nival se portó recelosa con la oscura por estar cerca de aquellos que considero sus dueños. Poco a poco ellas fueron conviviendo y considerando que ambas eran caprichosas se quedaron en la habitación y aprendieron a llevarse bien y a quererse. Al punto en que Gema adoptó a Hedwig como su hija, fue extraño al principio, pero todo terminó bien para alivio de la pareja de destinados.

Tom pasó mucho tiempo con Gema, hasta le compró su propio collar de color blanco con el escudo de la casa Max y ella lo portaba con orgullo sabiendo que ahora era el búho exclusivo del castaño que se sintió tan feliz cuando lo recibió días después de Navidad. Algo que le exhibió a Hedwig quien en su idioma la felicito por el collar, tener uno era un verdadero orgullo para aquellas que entregaban la correspondencia de los magos.