Hacía un tiempo radiante, el sol entraba por todas las ventanas de esa casita que tenía la família de Laura en la montaña. Era una casa básica, de solo una planta, con tres habitaciones. Dos de ellas con camas de matrimonio, otra, con 7 colchones que era la habitación de los niños. También tenía una cocina muy básica pero muy bonita, enganchada a la pared en medio del salón había una grande y preciosa chimenea.
Después de dos horas haciendo deberes, por fin podían ir al pantano que había cerca de allí. Durante esa semana la prima de Laura, Julia, se iba a quedar allí con toda su família.
Laura esperaba que ese fuese uno de los mejores días de sus vacaciones, pero a su madre se le ocurrió invitar a Victor y a Marco. Ya había tenido suficiente como para volver a verlos y finjir que no pasó nada. Pero tuvo que aguantar su rabia y disimular.
Como todos no cabían en el Jeep Rwangler de su madre, Laura y Julia fueron al pantano en el coche de los tios de Laura. Victor, Pol, y Marco fueron en el coche de Laura.
Durante el viaje las dos primas se lo pasaron genial. No paraban de hacer tonterías con Pablo, el hermano pequeño de Julia.
Al llegar al pantano los tres chicos decidieron ir a una mini isla que había en medio del pantano, mientras que las dos chicas se quedaron nadando cerca de la orilla. Al volver, los chicos, se pusieron a saltar al agua desde una roca muy alta. Mientras las chicas estaban tomando el sol. Los tios de Laura se fueron antes del pantano, así que no les quedaba más remedio que subir los cinco dentro del coche. Pero antes de llegar a casa les esperaba una larga carretera llena de curvas.
En el coche cuando victor se sentó al lado de Laura, esta enrojeció, pero pudo disimular bien poniendo por excusa que tenía mucho calor. A su izquierda tenía a Marco y al lado de Marco estaba Pol. Julia iba delante, de copiloto, y al ver la cara de su prima intentó ocultar su risa pero no la pudo contener. La pobre Laura lo estaba pasando mal y se le notaba en la cara.
De repente los dos chicos de su izquierda se abalanzaron encima de Laura y Vitor, una curva les había investido y esos dos brutos habían aprovechado para aplastar a la pobre Laura contra Victor. Pero luego vino otra curva en sentido contrario así que Victor y Laura tomaron la revancha y se abalanzaron sobre los dos hermanos pequeños. Julia, para animar el ambiente puso la radio al máximo volumen, y justo en ese momento empezó a sonar la canción del momento, la de moda, la preferida de Laura. "Problem"
Laura se emocionó y empezó a cantar, los demás la siguieron e improvisaron un baile que apenas podían bailar de lo apretujados que estaban dentro de coche. Laura se lo estaba pasando de maravilla nunca pensó que se lo pasaría tan bien al lado de Victor. Eso que le estaba pasando era mágico, él a su lado riendo, cantando, bailando, era lo mejor que le podría pasar. Pero ese viaje llegó a su fin.Al llegar a casa, Julia quiso darse una ducha y Laura aprovechó para escribir esa sensación tan mágica que le había pasado ese magnífico día de verano. Así que se tumbó en su cama, cogió el diário del mismo sitio donde lo había dejado la noche anterior y empezó a escribir.
" Sin duda esta ha sido la mejor tarde de mi vida. La tarde en que me he dado cuenta de que me he enamorado aún más de Victor. Desearía poder probar sus labios, poder abrazarlo como si estuviera arriesgando la vida. Desearía perderme en sus ojos marrones, y despeinar ese pelo castaño, poder cogerle de la mano sin que sea solo un juego. Pero no puedo. Me tengo que valer sólo por mi imaginación. Pero yo no necesito una persona que me acompañe pero que no me quiera. Solo necesito alguien que me pueda dar mi primer beso sin pensarselo dos veces, alguien que me quiera, tal y como soy."
Cuando Laura terminó de escribir esa frase Julia entró por la puerta con el pijama ya puesto. Laura, con mucha rapidez, consiguió guardar su diario antes de que su prima lo viese. Se sentaron en la cama de Laura y empezaron a hablar de lo que había pasado ese dia.
- Laura, te voy a hacer una pregunta muy importante, y quiero que seas sincera: ¿Te gusta Victor?
Laura se quedó en blanco. ¿Como lo había conseguido averiguar?
- ¿Porqué me lo dices?
- ¡Chica se te nota desde lejos!
- ¿Si? ¿Mucho?
- Pues la verdad es que si.
- ¿En serio? Jolin pues no se que hacer. Lo he intentado todo para olvidarle, pero no lo consigo.
- Tu tranquila que a mí también me pasó. Al final se te acaba pasando.
- Ya, pero esque llevo tres años enamorada de él. Es una tortura.
- Buah. ¡Tres años! Eso es mucho.
- Lo se. Pero cada vez que lo veo es como un subidón de adrenalina, no puedo controlar la respiración, las pulsaciones se me disparan, y no paro de mirarle.
- Pues creo que para empezar a olvidar tenemos que dejar de hablar de él.
Se había hecho de noche y después de cenar se fue directamente a dormir, quería descansar y reponer fuerzas. Pero no fué así. Ya tenía los ojos cerrados. Estaba apunto de dormirse. Pero su móvil sonó. Era la 1 de la mañana, no eran horas de enviar un mensaje. Pero Laura estaba intrigada, ¿Quién podía ser?
- Me lo he pasado muy bien hoy. Me gustaría repetir.
Al principio no podía creerlo, pensaba que era un sueño. Era imposible que Victor le hubiese mandado ese mensaje. Su corazón se aceleró, y no pudo contener un grito ahogado, que hizo que Julia se despertara. Esta, medio dormida, se sentó al lado de Laura y por muy dormida que estuviese no podía creer lo que estaban viendo sus ojos.
- ¿Esto qué significa?- preguntó Laura desconcertada.
- No lo se. ¿Te lo acaba de enviar ahora?
- Si. ¿Que hago?
- Es un comentario simple, no tenemos por qué alarmarnos...
- ¡Ah! ¡Está en línea!
- ¡Corre apaga el móvil que sinó verá que estás en línea!
- Vale, ya esta. ¿Y ahora qué?
- Vale, vamos a relajarnos, creo que lo que tenemos que hacer es dormir y mañana ya hablaremos del tema.
- ¡Como quieres que me relaje! Es el primer mensaje mínimamente bonito que me ha escrito. No podre dormir. ¿Qué puedo hacer?
- Bueno yo ya te he dicho lo que puedes hacer así que yo, me voy a dormir. Buenas noches.
- Oh, Julia, venga ya.
- Estoy cansada.- Después de pronunciar esas palabras se tapó con la manta de su cama y se durmió profundamente. Laura no quería molestar así que cerró los ojos e intentó dormir. Ella también estaba muy cansada y consiguió dormirse muy profundamente.
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Hope
Teen FictionLaura, una simple chica de 14 años, orgullosa de ser friki, descubre que el mundo no es ten fácil como ella se imaginava. Ella intenta plantearse la vida con buena cara. Conocerá su verdadero amor, pero también el rechazo. Conocerá la verdadera ami...