- Marta, Tengo un problema. - Dijo Laura mientras se desplomaba en el sofá. Marta la siguió, se sentó a su lado y le preguntó por su gran dilema.
- Pues mira, - Empezó Laura incorporándose. - Al volver de mis vacaciones en la montaña tenía clarísimo que estaba enamorada de Victor. Cuando terminó la fiesta mayor creía que Frider sería mi amor verdadero. Pero al conocer a Iván ...-
- Te has enamorado de él. - Dijo Marta terminando la frase de Laura.
- Sí. ¡No se que hacer! No te imaginas lo confusa que estoy.-
- Mira, Maya me dijo; si te enamoras de un chico locamente, pero luego te enamoras del otro, significa que el primero no es tu amor, porqué si lo fuera no te hubieras enamorado del segundo. Así que yo creo que tienes que esperar a que se acaben estas tres semanas y luego ya veremos lo que pasa. - Lo que le dijo Marta era algo muy coherente viniendo de ella.
Jordan había invitado a Marta y a Laura a su casa para ver una película esa misma tarde. Marta, había aceptado sin ni siquiera haberle consultado a su amiga. Así que, después de comer, Iván y Jordan las pasaron a buscar, y fueron andando a casa de esos dos chicos, ya que estaban en la misma urbanización.
- Esta es la casa de nuestro abuelo. - Dijo Jordan abriendo la puerta que daba al jardín. Era muy grande, el césped estaba muy bien cuidado y la piscina estaba limpia y cristalina
- ¿Quereis un helado antes de ver la peli? - A Marta le pareció buena idea, así que contestó por las dos. Se sentaron en una enorme cocina, y Jordan trajo los helados que habían pedido. Jordan y Marta mantuvieron una conversación muy intensa mientras que Iván y Laura estaban en silencio, pero entre ellos habían miradas, unas miradas con las que no hacían falta palabras.
Después de comerse esos fríos helados, pusieron la película y se sentaron en el sofá. Un sofá pequeño, que hacía que Laura estuviera apretujada junto a Iván. Pero eso, a él, no le importaba porque podía sentir su respiración, su perfume y podía verla de cerca. La película que había escogido era de miedo, y Laura sabía que durante las películas de miedo era el mejor momento para enrollarse con un chico, Insidius le servia para poder esconderse detrás del cojín junto a Iván. Al principio de la peli, Jordan había pasado su brazo izquierdo por encima de los hombros de Marta, y ella apoyó su cabeza encima de su pecho. Estaban a la mitad de la película, cuando Laura escondió su cabeza detrás del cojín para no pasar miedo, y en ese momento lo vió. Vió a su amiga besando los labios de Jordan, era su primer beso y eso hacía que Laura estuviera contenta al ver a su amiga cumplir por fin su sueño. Todo ese tiempo, y al fin lo había logrado. Pero luego pensó en las palabras de Iván, en que Jordan trataba a las personas con mala fe. Giró la cabeza para dejarles intimidad, y al hacerlo se encontró con el rostro de Iván, concentrado en la película. Y en ese momento lo supo, supo que estaba enamorada de él. No podía parar de pensar en todo lo que le rondaba por la cabeza. ¿Si ahora está enamorada de Iván, qué pasa con Victor? ¿Y que se supone que tiene que hacer con Frider? Al hacerse esa pregunta recordó que la noche en que habían llegado a casa de su abuela Frider le había mandado un mensaje. Pero entonces deseó haber conocido antes a Iván, deseó que ese primer beso se lo hubiera dado él. Asomó la cabeza por encima del cojín y continuó viendo la película. Cuando al fin se acabó, ya era de noche, y Laura había podido ver a Marta mas de una vez enrollandose con Jordan, y aunque le molestaba no podía evitar sentirse feliz por su amiga.
Salieron al jardín y se sentaron en una mesa que había cerca de la piscina. Una mesa de madera, rústica y bonita, la piscina tenía las luces encendidas y estaba perfectamente limpia. Sin duda los abuelos de Iván y Jordan sabían cómo cuidar un jardín. Marta se quitó los zapatos y se sentó en el borde de la piscina, Jordan la siguió y Laura no quería quedarse a solas con Iván, no sabía porqué, pero ella intentaba no quedarse a solas con él para no perderse en sus ojos. Así que imitó el gesto de Marta y se sentó en el borde de la piscina y sumergió los pies en esa agua cristalina. Pero marcharse no le había servido para nada, porque notó como Iván se sentaba muy cerca de ella. Él también se quitó los zapatos y sumergió los pies. Debajo del agua el pié derecho de ella rozó con el pié izquierdo de él. Los dos subieron la mirada y se encontraron. Iván posó su mano izquierda suavemente encima de la mano que ella tenía apoyada en el suelo, los dedos de esos dos adolescentes se encontraron dulcemente. Laura no podía apartar la mirada de esos ojos que le habían hipnotizado. Al sentir el roce de su piel se le aceleró el corazón. Estaban tan cerca el uno del otro que Laura tenía miedo de que Iván oyera los latidos de su corazón. El silencio inundaba ese espacio que les envolvía.
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Hope
Подростковая литератураLaura, una simple chica de 14 años, orgullosa de ser friki, descubre que el mundo no es ten fácil como ella se imaginava. Ella intenta plantearse la vida con buena cara. Conocerá su verdadero amor, pero también el rechazo. Conocerá la verdadera ami...