Hope

Capítulo 16

Iván agarró con fuerza la cintura de Laura, sus cuerpos se quedaron pegados, y sin esperar la reacción de la chica, inclinó con fuerza su cuerpo hacia la piscina, haciendo que Laura se hundiera junto a él en esa agua transparente. Por un instante, Iván abrió los ojos, y pudo contemplar la melena de Laura ondeando bajo el agua, su ropa mojada ceñida a su cuerpo como si no la dejara respirar. Ella aún no había salido del agua pero no tardó en impulsarse con el suelo para salir a la superfície. Cuando consiguió por fin coger aire, lo primero que hizo fué salpicar a Iván, pero él era de reflejos rápidos y se sumergió en el agua, agarró el pié de Laura y la hundió otra vez en el agua. De ese modo, Laura quedó a la altura del rostro de Iván, y sin perder ni un segundo del aire que tenía, Iván se abalanzó sobre los labios de Laura. Ella tenía los ojos cerrados, no veía nada de lo que pasaba a su alrededor, y mucho menos se esperaba  sentir esos labios carnosos besando los suyos. Pero no se negó, se dejó llevar por ese momento, aunque no duró mucho porque los dos tuvieron que subir a la superfíce para poder recuperar el aire que habían dejado atrás.

- ¡En qué estabas pensando!- Gritó Laura, mientras salpicaba a Iván. - No tengo ropa de recambio. Mala persona. - Gritó. Pero Iván pudo distinguir una sonrisa dibujada en la cara de Laura. Ella se acercó a Marta y le pidió que la ayudara a salir del agua. Marta extendió sus brazos para ayudarla a salir, pero Laura tiró de los brazos de su amiga sin piedad haciéndola hundir en el agua. Se pasaron una hora bañándose en la piscina, pero al salir, Laura se dió cuenta de que si volvían así a casa cogerían un resfriado. Así que le pidió a Iván y a Jordan que les dejaran a ella y a Martra una camiseta o una sudadera para poderse marchar. Los chicos entraron en casa mientras ellas se secaban con una toalla

- ¿A qué venía ese beso debajo del agua? - Preguntó Marta mientras le daba un golpecito a Laura con el codo. Inmediatamente las mejillas de Laura se pusieron rojas, no lo podía evitar, definitivamente le gustaba ese chico. Antes de que Laura pudiera responder, los dos chicos salieron de la casa con una sudadera cada uno. Iván se acercó a Laura le quitó la toalla suavemente de encima los hombros y le entregó su sudadera.

- Nos tenemos que quitar la camiseta si no queremos mojaros las sudaderas. - Dijo Marta pasando su dedo índice por el cuello de Jordan. - Daos  la vuelta que nos cambiamos.- Ordenó Marta muy seriamente. Los dos chicos se miraron desconcertados. Y sin decir nada obedecieron, se dieron la vuelta al mismo tiempo que ellas también se daban la vuelta. Laura lanzó una mirada desconcertada a Marta pero ella asintió con la cabeza para que Laura no se preocupara. Aunque el gesto que Marta le había hecho no la había calmado. Laura hizo lo mismo que su amiga y se quitó la camiseta. Iván no pudo resistir la tentación de girarse, y al volverse pudo contemplar la  espalda de Laura prácticamente desnuda. Le entraron ganas de acercarse a ella, rodear la cintura desnuda de Laura con sus brazos y darle un beso en el cuello. Pero Laura se puso la sudadera, y en ese momento Iván se dió la vuelta para disimular. Después de ponerse las sudaderas, los chicos las acompañaron a la puerta,  Laura se despidió de Jordan con un beso en cada mejilla, y a su lado le esperaba Iván. No sabía como reaccionar, estaba confusa. Se acercó a Iván con el fin de darle dos besos, uno en cada mejilla, como había hecho con Jordan, pero Iván no la dejó. Se acercó a ella y le dió un pico en los labios, pero Laura se quedó con ganas de más, así que sin dejar que Iván se separarse de ella lo rodeó con sus brazos por encima de los hombros de él y le dió un beso apasionado. Después de eso, se apartó de él sin dejar de mirar esos ojos tan perfectos y sin decir nada salió por la puerta.  

- Marta, ahora lo se. Me gusta Iván.- Dijo Laura mientras saboreaba el olor de la sudadera que le había dejado Iván.

- Pues sabes que, me parece que yo también me estoy enamorando de Jordan. -  Dijo Marta acercándose a Laura.

- ¡Marta! - Exclamó Laura al recordar el primer rollo de Marta. - ¿Como ha sido la experiencia de besar por primera vez a un chico?- Preguntó dándole un pequeño golpecito con el hombro.

- Laura, ha sido mágico. Ha sido como flotar en un mar de nubes que no se hunden. - Al oír esas palabras, Laura se sintió totalmente identificada con lo que Marta decía.

- Pues ese beso en la piscina ha sido la experiencia más perfecta que nunca nadie se ha podido imaginar. - Dijo Laura reviviendo el momento.  

Su teléfono sonó. Era un mensaje de Iván preguntando si al día siguiente podrían volver a quedar. Laura se puso muy contenta al ver que eso no era solo un lío de un solo día. Y sin pensarlo le dijo que sí. Todo lo que le había pasado durante esa noche tenía que escribirlo, y el sitio perfecto era su diario.

Al volver a casa tenían que secarse el pelo, tenían que cambiarse de ropa para que es esperaba la cena. La abuela de Laura había preparado pollo al horno, y hacía un olor extraordinario. Las dos chicas subieron al piso de arriba, ayudaron a poner la mesa, y se sentaron a comer.  

- ¿Dónde habéis estado esta tarde? - Preguntó el padre de Laura. Las dos chicas tenían que improvisar una respuesta rápida.

- Le he enseñado a Marta al urbanización y hemos ido al bosque que hay en "La curva del viento." - Dijo Laura poniéndose un trozo de pollo en la boca.

- ¡Ah! ¿Y te ha gustado Marta?- Insistió.

- Oh sí era super bonito. - Respondió Marta intentando disimular lo mejor que pudo.

Después de la cena, las dos chicas fueron directas a la cama. Pusieron una película en el ordenador y cuando se acabó, se pusieron a dormir. Cuando Laura se aseguró de que Marta ya estaba dormida, cogió su diario de debajo del cojín y se puso a escribir.

"En tan solo una semana he tenido la explosión de sentimientos más grande del mundo. Estaba enamorada de Victor, que solo me aportaba desgracia, Marco se enamoró de mi, Frider me dió mi primer beso, y Iván es la persona que creo que me dará el amor que me merezco. Creo que mi corazón ahora pertenece a Iván. El chico que hoy me ha dado un beso inesperado. "