•『 ✶ Solo un poco encubierto ✶ 』•

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Después de aquel beso, Jisung dejo reposar su cabeza en el hombro de Minho, y se mantuvieron así, moviendo sus cuerpos al compas de la música por unos minutos.

Más tarde, cuando el menor no quiso bailar más, se fueron a sentar y allí continuaron con su sesión de besos, empalagandose con las sensaciones tan linda que generaba el momento.

Cuando sonaba alguna canción que le gustaba al menor, se levantaban de su asiento para ir a bailar hasta que Jisung volvía a cansarse y se sentaban. Así pasaron toda la noche, hasta que el último juego se desarrollo y la fiesta termino.

Aunque varias personas se quedaron a ayudar con la limpieza, y la casa se vacío recién unas dos horas después de lo que se suponía que terminaría la fiesta.

Jisung pidió ser cargado por su príncipe hasta la cama, y cuando el mayor quiso irse, el rizado agarró su brazo, pidiéndole que se quede a dormir con él. Claramente el mayor no se resistió y terminaron durmiendo juntos.

Ahora Jisung abría sus ojos levantamente, moviendo un poco su cabeza para ver al bonito chico que lo tenía entre sus brazos.

——Ya era hora de que te despiertes, princesa——. Murmuró Minho, sin abrir sus ojos.

——¿Estás despierto?

Minho estaba despierto desde temprano, por la mañana recibió una llamada de Namjoon que no le permitió volver a dormir. Debía estar atento.

——No, te esta hablando un espíritu.

——Que comediante——. Dijo sarcásticamente.

Minho soltó una suave risa, y comenzó acariciar el cabello del menor.

——Te ves muy lindo durmiendo

——Vos sos lindo todo el tiempo.

El mayor se puso de costado y con su mano libre agarró el rostro del menor, para acercarlo más a él y besarlo.

Sus labios y corazones danzando en la misma sintonía, el tacto de sus pieles causaban sensaciones tan bellas en sus cuerpos que ambos disfrutaban mucho. Todo es tan mágico.

Después de un rato, separaron sus labios, y se mantuvieron mirándose por unos segundos.

Minho sabía que era momento de hablar, de sacarte por completo la máscara y dejar de ocultar cosas. No quería perderlo, todo lo que le hacía sentir Jisung era tan lindo y con él se sentía en casa, por primera vez lograba sentirse tan cómodo y seguro con alguien, él no quería arruinarlo.

Jisung por su parte estaba en las nubes, se sentía tan bien y seguro con Minho a su lado. Él había revolucionado todo, lo hizo sentir diferente, no era como los antiguos chicos con los que había estado, Minho lo escuchaba, Minho lo mima, lo consiente, lo cuida, y sí, tenía en claro que cuidarlo era parte de su trabajo, pero también sabía que entre ellos no existía límites de trabajo, su relación había dejo de ser profesional hace mucho tiempo.

——¿Recuerdas ese día que fuimos al arcade?—— Preguntó Jisung, y el mayor murmuró un leve "mmh" en modo de afirmación—— ¿Recuerdas lo que te dije?—— Minho asintió——. Lo decia en serio.

——¿Qué decías en serio?

——Que me sentía atraído por vos.

——Yo pensé que lo decías para ponerme nervioso.

——Me estaba confensado de alguna forma——. Jisung escondió su rostro en el cuello de Minho——. Me sentí atraído por vos desde un principio, tu belleza es algo diferente, no entrabas en mi estándares de belleza o en lo que considero mi tipo, pero te me hacías muy lindo, y tenía mucha curiosidad por ello.

——¿Me estás diciendo que al princpio me consideraste feo?

——No dije eso. Solo que no me di cuenta de lo lindo que eras desde un principio, esa vez que cocinamos fue que me empezaste a causar curiosidad.

——O sea, ¿estuviste coqueteandome todo este tiempo y yo solo era él que pensaba que jugamos?

——Sí...

——Pero, eras igual con Felix y aquel pibe de la fiesta.

——No era igual.

——Jisung, no me quieras engañar, tenías el mismo comportamiento que tenías conmigo. ¿A caso ellos también te gustan?

——Solo soy cariñoso, pero solo a ti te doy besitos, daddy——. Verbalizo, para después dejar un corto beso en los labios del mayor.

Minho le sonrió. Había sido un idiota dejando que los celos lo cegen, Jisung no intenaba coquetearles, solo era así y ya.

——Tengo que decirte algo——. Habló con tono serio——. Pero necesito que me escuches y luego decidas que hacer.

——No me asustes, no me vayas a decir que sos un espía y que estuviste fingiendo todo este tiempo——. Comentó con un tono gracioso, pero Minho no se reía, él lo miraba asustado, como si hubiese descubierto su secreto.

De súbito, se escuchó un fuerte golpe que puso en alerta a Minho. Haciendo que se levanté rápidamente de la cama y mire por la ventana que era lo que sucedía.

——¡Jisung!——. Se escuchó, y el mayor ya sabía que  significaba eso.

——¿Es mi hermano?—— Susurró.

——Necesito que vengas conmigo y te prometo que luego te explicaré todo——. Dijo acercandole las zapatillas al menor, quien se las puso rápidamente.

——¡Jisung, abrí la puerta!

——¿Puedo confiar en ti?—— Cuestionó con miedo, sin saber bien que era todo lo que sucedía.

Minho asintió, estirando su mano hacía él.

——Nunca te haría daño——. Aseguró——. Te prometo que te explicaré todo.