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-¿ya está?-

Preguntó Mirabel atrás de la puerta del baño mientras yo esperaba que la prueba diera los resultados

-no se, no quiero ver-

-¿Es enserio?-

La puerta se abrió y Mirabel entro, yo le señale la prueba con un dedo, ella rodó los ojos y se acercó para ver.

-...-

-¿Que salió?, No me dejes con la duda-

-no se que significa-

Después de escuchar eso solté una pequeña risa, tome la caja de nuevo para revisar las instrucciones y mire la prueba sintiendo como se me paraba el corazón de la nada.

-positivo-

Mirabel y yo nos miramos atónitas, nos tomamos de las manos y comenzamos a dar brincos de la alegría por todo el baño.

Pare de saltar cuando sentí como se revolvía todo en el estómago,me puse una mano en la boca y Mirabel hizo una mueca de asco cuando volví a vomitar.

-si, voy por algo para que se te pase la vomitadera-

Yo le mostré un pulgar arriba y volvi a jalar la cadena mientras me paraba a lavarme de nuevo.

La puerta del baño se abrió de repente y casi me atragantó del susto.

-¡T/n, ¿estás bien?!-

Me termine de lavar la boca, voltee a mirar a Luisa mientras ella se acercaba y comenzó a hacerme preguntas sobre como estaba y que si me había pasado algo

-Dolores me dijo que tenías algo y que viniera, ¿Te lastimaste con algo?, ¿Te duele algo?, ¿Alguien te dijo algo?, ¿Te pegaron?-

Yo le mostré la prueba y sonreí cuando se quedó en silencio mientras me miraba y luego al objeto en mis manos intercambiando la mirada sin poder creerlo, asentí con los ojos llorosos cuando señaló mi barriga.

-es positivo-

Y como si esas únicas dos palabras fueran lo único que necesitaba escuchar me abrazo y me besó sollozando, diciéndome al oído cuánto me amaba y lo feliz que estaba por tener la oportunidad de ser madre, de tenerme, todo fue tan lindo que me puse a llorar también.

Conquistando A Luisa MadrigalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora