Lemmon Grelliam

"Sugar"

En Londres, había una muy famosa empresa de cosméticos y otros productos de cuidado personal, era dirigida por una muy hermosa mujer, alta, blanca, peliroja, ojos verdes, madre soltera, era muy admirada dentro del mundo de los negocios, había salido adelante por si sola pese a su duro pasado, ahora era una mujer feliz y realizada, dándole la mejor vida a su única hija.

Hace poco tiempo, en aquella empresa se solicitaba a alguien para ocupar el cargo de secretaria o secretario de la señorita Sutcliff y su asistente Alan Humprhies, necesitaban a alguien exageradamente bien preparado.
En la sala de espera habían varias personas, Alan estaba a cargo de las entrevistas.
El chico salió de su oficina acompañado de otra mujer, suspiró indignado y llamó a la siguiente persona.

- William T. Spears, puede seguir -

De inmediato un joven pelinegro entró a la oficina, se veía serio y muy seguro de si mismo.
Después de la entrevista, Alan parecía satisfecho con las respuestas de Spears, a pesar de que tenía 27 años y recién había salido de la universidad, tenía metas muy claras, lo cual era importante para su cargo por el momento, incluso podría llegar a ser el nuevo asistente de Sutcliff, pero Humprhies no permitirá eso por ahora.

.....

Alan entraba a la oficina de la jefa con los aspirantes seleccionados, después de las entrevistas.

La pelirroja tomó las carpetas y sonrió levemente.

- Vaya, la mayoría son hombres, que curioso - rió, examinando cada parte de las hojas de vida - ¿Sebastian Michaelis? Mh.. - frunció el seño.

- ¿Sucede algo con el? - el castaño miró a la mujer confundido.

- El trabajaba para la competencia, no lo dejaré pisar mis tiendas jamás - de inmediato tiró la carpeta a la basura.

- Lo lamento, no sabía eso - suspiró - Hay otro chico, de apellido Spears, se ve que sería un buen trabajador -

- Eso veo - Grell leía la hoja de vida de William - Se graduó con honores.. también ha hecho varias practicas - la pelirroja miró la foto - Es lindo y joven.. sabes, llámalo, quedara contratado, firmara su contrato el lunes y empezará a trabajar el mismo día -

- De acuerdo - Alan sonrió y tomó las carpetas.

- Por cierto, ese día traeré a mi niña, el tendrá que cuidarla, será su primera prueba - Bufó.

- Así será señorita Sutcliff - sonrió el castaño, retirándose de la oficina.

.....

William entraba emocionado a su nuevo empleo, traía todas las cosas necesarias para causar una buena impresión, honestamente, sabía muy poco sobre Sutcliff, solo sabía que era una mujer elegante y bastante exitosa, por lo que deducia que también era muy estricta.
El joven pelinegro entró al edificio, siendo recibido por Alan de inmediato, el cual lo llevó a su mesa, en frente de la oficina personal de Grell.

- La señorita Sutcliff llegara en cualquier momento, por ahora acomoda tu lugar de trabajo, te diré que hacer cuando ella esté aquí - el castaño se retiró.

- Gracias.. - Will miró su escritorio, sonrió y comenzó a ordenar todo.

Pasados unos treinta minutos, los otros empleados empezaron a saludar a quien venía caminando por el pasillo, Alan salió corriendo de su oficina al escuchar todo, cosa que alertó a William.