Capítulo 16

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Al llegar a la casa no podía estarse tranquilo. Caminaba por su habitación como un león enjaulado. Si bien, por un momento pareció que lo reconoció, Itona no podía creerlo. ¿Qué significaba aquello? Se supone que habían borrado sus recuerdos ¿porque lo había reconocido? Se deja caer en la cama y enreda sus manos en su cabello. Últimamente había estado muy ansioso, atacó a Gakushuu solo porque estaba ansioso. Por suerte no llegó a oídos del Pulpo, si no seguro lo habría castigado. Escucha a su computadora encenderse y la puerta de su habitación abrirse al mismo tiempo.

Eran Ritsu e Irina.

— ¿Te encuentras bien, Itona?— le pregunta la profesora.

— Perfectamente — le responde cansado — Solo me estoy volviendo cada día más loco — se molesta.

Irina se acerca a él y lo abraza cosa que sorprende a Itona.

— ¿¡Se puede saber que estás haciendo!?— le dice Itona atrapado en el voluminoso pecho de la profesora.

— Es un abrazo. Tranquilo estarás bien — acaricia los cabellos de Itona para calmarlo cosa que extrañamente funciona — Bien, entonces ¿qué sucede?—

— Mmm Gaku... Asano me reconoció — le dice en un murmullo.

— Pues si. Estudian juntos, te reconocerá como alguien de la clase E — dice Irina tratando de calmarlo.

— No, no... Solo fue eso...— suspira — ¿Me puedes soltar? Esto se está volviendo desagradable—

— ¿Qué parte de esto es desagradable? ¿Cuándo volverás a tener la oportunidad de que te abrace en su pecho una mujer hermosa?— dijo Irina sin soltarlo aún.

— ¿Cuándo me ha sucedido algo así en primer lugar?— dijo Itona.

— ¡Mocoso malcriado!— dijo Irina ofendida soltándolo al fin — ¿Y bien? ¿Qué más pasó?— dijo cruzando los brazos sobre su pecho.

— Lo ataque...— explicó Itona — Me quedé porque quería una pieza de la máquina expendedora y pues... Apareció por mi espalda y... Y... Yo solo lo ataque y...— el joven de cabellos blancos tira de sus propios cabellos. En sus ojos lo noto, que lo reconoció pero ¿de verdad? ¿No habrá sido una ilusión creada por su mente? ¿No lo había superado aún? ¡Claro que no lo había superado aún! Por Dios, no bastaba con despedirse de sus momentos juntos... No bastaba para nada, aquellos momentos fueron especiales para el que su corazón no podía negarlos, quería estar con Gakushuu de nuevo pero el fue obligado a que sus recuerdos se borraran...
Aún así quería hablar con el, quería disculparse por todo... Por involucrarlo en su loca clase, por golpearlo y... Quería oír aquellas palabras que le susurró en el oído y quería responderle de la misma manera... Aunque fuera cursi y tonto.
«Te quiero... Y no te dejare ir tan fácilmente»

— Necesito hablar con el...— dijo Itona.

— ¡Si es así! Entonces le marcaré— dijo Ritsu.

— ¡Nooo!— gritaron Irina e Itona a la chica IA.

— S-Solo bromeaba...— dijo Ritsu pero fue obvio que detuvo la acción de llamar.

— Muy bien. Vamos por partes... — dijo Irina levantándose de la cama para cerrar la puerta.

— ¿Qué haces?— pregunta Itona al ver que cerraba la puerta.

— Cierro la puerta para que Karasuma no se entere o nos detendrá — explicó la profesora — Nosotros — señala a Itona, a Ritsu y ella misma — Entraremos en una nueva misión. Una misión secreta, solo de nosotros. Debemos atrapar a Gakushuu Asano —

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