Capítulo 18

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Nos despertamos al día siguiente mucho más tarde que los días anteriores ya que no teníamos ningún plan. Ayudé a Brianna con el desayuno mientras hablábamos como dos señoras que no se han visto en años, y eso era todo para saber que el día sería calmado y agradable.

Derek estaba entretenido viendo un partido de fútbol y Niall recién se levantaba dándonos los buenos días con esa perfecta dentadura. No pasó tanto tiempo cuando comimos el rico desayuno y ya luego ponernos el traje de baño para pasar el día detrás de la casa.

Brianna colocó música para ambientar y cantaba cada una de las canciones. Ella estaba al igual que yo sentada en las sillas para tomar el sol, solo que la diferencia es que tenía su libro donde dibujaba algún boceto de un diseño y yo estaba boca abajo casi quedándome dormida.

El sol estaba en todo su esplendor, es por eso que Niall apareció con unas bebidas para refrescarnos. Ambas le agradecimos y él se sentó en la silla que estaba a un lado de mí, también tomando algo de sol.

Lucía tan bien con sus brazos hacia atrás, recargando su cabeza, y con sus lentes que durante este tiempo casi no se había quitado en ningún momento. Me sorprendía que no se haya marcado hasta ahora la silueta de los lentes, aunque quizás si lo detallara mucho más de cerca lo notaría.

Eso no iba a suceder, por supuesto.

Sentí que lo había mirado más de la cuenta, así que terminé mi bebida dejándola a un lado y dándome la vuelta hacia Brianna. Observarlo tanto no ayudaba, más después de todo aquello que solté anoche. No me arrepentía en lo absoluto de haberle contado aquello a Niall, pero sí me avergonzaba cierta parte de ello.

Eliminé cualquier pensamiento y solo cerré los ojos para continuar mi bronceado, que estaba bastante pronunciado ya, pero daba igual. Nunca me daba el lujo de tomar el sol en las afueras de Francia.

—¿Pueden ayudarme con esto? —expresó Derek al otro lado.

Abrí los ojos de nuevo, alzando mi vista. Brianna miraba a Derek con dulzura y una sonrisa en su rostro. Él estaba intentando prender la parrillera. 

Niall iba a ayudarlo, pero Brianna le hizo un gesto de que no se preocupara y seguido a eso, se levantó para ayudar a Derek. Genial, estaba sola con él de nuevo. Y sé que Brianna lo hizo a propósito.

Me acomodé para quedar sentada y mirar atenta a lo que hacían aquellos dos. Tomé de la botella de agua que tenía a un lado ya que sentía que mi cuerpo entero se deshidrataba.  

—¿Qué tal la resaca? —preguntó Niall, burlesco.

—Aunque parezca broma, no tengo resaca. Eso es todo un logro viniendo de mí —solté una risita—. Quizás tu café sí funcionó, después de todo.

Él me miró y sonrió mucho más.

—Siempre funciona, es mi truco bajo la manga.

Alcé una ceja y luego fruncí el ceño recordándome de algo.

—Jamás te he visto ebrio, ni siquiera en el borde de estarlo —mencioné con ciertos aires de confusión.

—Eso es porque eres un peligro andante cuando estás ebria y alguien tiene que hacerse responsable.

Me hice la ofendida.

—¡Sé cuidarme sola!

Niall soltó una pequeña risa.

—Ni siquiera te recordaré que anoche te caíste en el agua.

Puse los ojos en blanco divertida.

—Gracias, lo acabas de hacer —expresé sarcástica.

Perfect Strangers - Niall Horan.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora