La mano de Dorian se apretó con fuerza a la de Daphne, una muestra constante y silenciosa de su presencia allí.
Él estaba allí, a su lado, y la protegería hasta su último aliento, incluso si ella decidía salir por la puerta a sus espaldas y no volver a ingresar al lugar.Margarita fue la primera en avanzar hacia ella, con una brillante sonrisa amable surcando sus labios.
—¡Bienvenida, niña!—dijo la anciana, con aquel cálido y afable tono de voz que hacía que la hermosa mujer sintiera ganas de abrazarla.
Sin embargo, antes de darse cuenta, este último pensamiento se había vuelto realidad, mientras rodeaba el cuello de la mujer y la estrechaba con fuerza contra ella.
—Te extrañé—susurró Daphne contra el cabello canoso de la anciana—. En especial tus comidas.
—Ya verás, niña—comenzó a decir Margarita mientras se alejaba tenuemente de ella y pellizcaba una de sus mejillas de manera cariñosa—; los próximos días te deléitate con tantas delicias que no cabras por la entrada principal.
La hermosa mujer de cabello nocturno sonrió, mientras observaba la habitación repleta de globos con estridentes y vibrantes colores, capaces de darle vida incluso a aquel lugar con aura elegante y sofisticada.
—Dorian solo trajo globos de cumpleaños infantiles—comenzó a decir una voz masculina en tono ronco—, por lo que es probable que encuentres alguno con dibujos de caricaturas y esas cosas.
Daphne Moon buscó en la habitación al propietario de aquella voz, hasta encontrarlo, envuelto entre sombras con su mirada tormentosa sumida en ojeras e hinchada por las lágrimas ya ausentes.
Luca Lee avanzó un paso hacia ella, solo eso, quedándose quieto mientras la observaba de pies a cabeza, sorprendido de que aquello fuera real y no una alucinación.Por su parte, ella también lo observó con detenimiento.
Vestido en una remera de Dorian, la cual le quedaba pequeña, y un short de baño que parecía demasiado viejo, Luca tenía más parecido con un fantasma que con el hermoso, fuerte y brillante hombre que ella llegó a conocer una vez.Aún así, no era la palidez de su piel o la delgadez de su rostro lo que estrujaba el corazón de ella.
No, ese premio se lo llevaba su mirada gris, colmada de una tristeza desmesurada.—Estás aquí—susurró él con la voz rota.
No hizo una pregunta, tampoco lo dijo como si se tratase de alguna clase de triunfo.
Solo fue una especie de confirmación, una que tanto necesitaba saber.Aquello acabó por destrozar el alma de la mujer de mirada nocturna, quien apretó sus labios con fuerza al mismo tiempo que se alejaba de Dorian y Margarita, para lanzarse hacia Luca, a quien envolvió con un fuerte abrazo sin previo aviso.
—Tu también estás aquí, Luca—susurro Daphne en su oído sin soltarlo—. Vuelve a la vida.
Sin poder evitarlo, el chico de los piercings apretó a Daphne con una fuerza destructora y comenzó a llorar.
Aún así, el no lo notó hasta que las lágrimas calientes se deslizaron con pereza por sus mejillas angulosas, demasiado angulosas.Como si todo el dolor y sufrimiento de ambos finalmente pudiera abrirse paso a través de ellos, ambos comenzaron a llorar sin importarles que todos allí los observarán sin reparo alguno.
Exorcizando toda la pena que se alojaba en su interior, ambos se aferraron con fuerza, el uno al otro, recordándose en silencio que ambos seguían allí, que eran guerreros.Luchadores.
Sobrevivientes.
Luego de que el último de los espasmos involuntarios del cuerpo de Luca se acabó, ambos se separaron, solo para observarse con sonrisas tristes.
—¿Hay algo para comer o solo nos observaremos los rostros?—bromeó Daphne mientras secaba sus lágrimas.
Pero en ese instante, un destello dorado escurridizo atrajo su atención.
Elena, quién había logrado pasar inadvertida hasta el momento deslizándose entre los muebles como un fantasma, ahora parecía luchar por acercarse en silencio hacia la entrada principal.Daphne era lista, por lo que no demoró demasiado en notar su famélico intento por escapar.
»—Elena—dijo la mujer de mirada nocturna con firmeza, todas las emociones habían sido drenadas de su rostro. Por primera vez, energía la agente de "Besos de Medianoche" adormecida en su interior—¿Te vas sin saludar?
El rostro de la diosa de oro palidecio, mientras intentaba articular cualquier palabra posible.
—Si, creo que será lo mejor, Daphne… teniendo en cuenta todo—susurro Elena con un hilo de voz.
—¿Por "todo" te refieres a entregarme a un jodido psicópata violador asesino?—siseo ella, su tono semejante a un cuchillo sobre terciopelo.
—Lo lamento—comenzó a decir la mujer aterrada avanzando hacia ella—. Perdóname por favor.
Daphne Moon la observó, su mirada cortante escrutando su rostro y viendo más allá de lo que este mostraba.
Ella vio el dolor, el tormento y el sufrimiento de Elena; y aunque sabía que luego se arrepentiría, en ese momento quería que ella siguiera hundida en aquel pozo oscuro y vacío.—¿Eres tan hipócrita como para pedir perdón cuando tú no me perdonaste a mi por estar con Dorian? Un hombre al que habías dejado luego de aburrirte de él—comenzó a ronronear Daphne con lengua viperina—. ¿Sabes que, Elena? Te perdono.
Todos en la habitación observaron a la mujer de cabello nocturno como si ésta se hubiera enloquecido.
Sin embargo, las palabras de Daphne no habían culminado allí.»—Te perdono, porque sé que tú no lo harás, y ese arrepentimiento que te carcome por dentro, será mi mayor consuelo.
Las lágrimas de Elena comenzaron a fluir por su rostro, sin encontrar ningún consuelo posible más allá de observar el rostro frío como la muerte de Daphne.
»—Pero no te vas a ir, esta noche quiero festejar mi regreso a la vida, y tú estarás ahí como mi recordatorio de que sobreviví.
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Hola corazones de fuego ¿Cómo están? ¿Qué les pareció este nuevo capítulo?
Perdón, se que les prometí que la semana pasada subiría un nuevo capítulo (este puntualmente) por el que adeudaba, pero siendo honesta, mi semana no fue muy buena.
La pasé en el médico y no tengo buenas noticias, pero bueno, no hay que bajar los brazos, a seguir dándole para adelante.Soy una persona positiva, y creo que todo pasa por algo, y si uno toca fondo, la única opción que le queda es salir hasta arriba.
Así que a ser super positivos que las cosas van a encajar en su lugar... lo que me llevo a pensar.
¿No estaría bueno tener a Dorian, Daphne, Luca, Elena y todo el mundo de "Besos de Medianoche en físico?
Claro, una versión mejorada, más extensa y a un valor súper accesibles, tanto que cada uno pueda adquirirlo desde cualquier país sin tener que ahorrar demasiado.
Bueno, es solo una idea, un pensamiento que vino volando de la mano de alguien y que ahora, esa semilla, está germinando en mi mente. 🤭👀🖤
Bueno, no tengo ningún anuncio más que decirles, solo que los quiero mucho, gracias por su increíble apoyo, entusiasmo y comprensión.
Nos vemos pronto corazones de fuego ❤️🔥.
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Besos de Medianoche 3: Gravedad
RomansaLuego de que por designio la vida de Daphne y Dorian se entrelazaran, ellos debieron luchar contra el caos que se apoderó de sus vidas. Sin embargo ahora, luego de todo, deberán recoger juntos los pedazos rotos de una vida pasada para tratar de unir...