HERSHE (Seulrene - Español)

23. Verdad

¿Alguna vez has sentido que mueres de ganas por saber algo, pero temes que la respuesta sea lo contrario de lo que quieres escuchar?

Irene sintió como si una bala la golpeara y le cavara un agujero en el pecho. Sus peores temores se habían hecho realidad.

-La amaba, Irene. Y todavía la amo.

Irene miró fijamente a Joy mientras las palabras resonaban continuamente en su cabeza.

¿Qué pasaría con ella ahora si Joy quiere a Seulgi de vuelta? ¿Tiene derecho a decir que no?

-Ella es mi primer amor,- continuó Joy, con los ojos en el suelo. - Pero ella fue una tonta por no reconocerlo.

Irene tardó unos segundos más antes de siquiera pensar qué decir.

-¿Fue esa... fue esa la razón por la que te fuiste...?

-Umjumm... En parte, sí.- Joy asintió. -No veía esperanza en lo nuestro. Ni siquiera creía que ella sintiera lo mismo por mí. Así que, cuando la oportunidad de la carrera de mis sueños llamó a mi puerta, la tomé de inmediato, sin dudarlo.

-Pero... pero ella te amaba...- A Irene le costó decir esas palabras.

-Puede que lo hiciera, pero yo no estaba segura de ello.- Joy se encogió de hombros. - Se preocupaba por mí, sí, pero sé que nunca fue como lo que yo sentí por ella. Y cuando tú entraste en escena, vi la prueba de que tenía razón.

Irene se sorprendió al escuchar eso. -¿Qué quieres decir?

Joy sonrió. -Seulgi nunca me miró como te mira a ti, Irene.

Irene se quedó helada. Se pregunta cómo puede ser que Joy pueda percibir esas cosas cuando solo están fingiendo.

-Lo que me recuerda que debo disculparme por mi comportamiento contigo,- dijo Joy. -Sé que te he ofendido. Lo siento mucho.- Miró hacia otro lado. -Mi orgullo no pudo aceptar el hecho de que Seulgi se haya atrevido a estar contigo cuando se conocieron solo hace unos meses. Yo estuve con ella durante cuatro años y nunca lo hizo por mí.

Irene volvio a sentir que la culpa se apoderaba de su interior, sabiendo que ella y Seulgi solo están fingiendo.

-Te ama, Irene. Puedo verlo en ella,- dijo Joy. -Y, me creas o no, estoy enamorada de Sungjae. Simplemente que hay una parte de mí que aún quería lograr algo con Seulgi.

Irene se sintió nerviosa ante esto.

-Quería hablar con ella, por eso las invité a venir,- admitió Joy. -Debería haberlo hecho antes, pero no pude encontrar el tiempo.- Tomó una respiración profunda. -Pero ya que estamos aquí ahora, hablando de esto; me gustaría pedirte permiso, Irene.

Irene está más nerviosa que nunca.

-Sungjae tendrá una sesión de fotos mañana por la mañana hasta el mediodía,- continuó Joy. -Pienso que es el momento perfecto para que Seulgi y yo hablemos. Únicamente si tú lo permites.

Irene respiró hondo.

-No te preocupes. No intentaré nada para arrebatártela.- Joy se rio. -Seulgi te ama. Pero puedo ver que está tan angustiada como yo. Creo que ya es hora de que arreglemos las cosas por nosotras mismas.

Irene miró a Seulgi. Sabe que no tiene derecho a impedir esta conversación. De hecho, esta es la razón principal por la que vinieron.

-De acuerdo. Las dejaré solas mañana.

Joy dejó escapar una cálida sonrisa. Se acercó a Irene y se inclinó para abrazarla.

-Gracias, Irene. Gracias.