Un viaje de trabajo, una chica extrovertida y una noche explosiva (por así decirlo)sin esperar lo que dejara y que marcara la vida de dos personas.
Ella es una chica de 23. Con el sueño de poder salir adelante y poder ayudar a su mama y ser una m...
Al terminar de hablar con mi madre decido ir a la habitación en la que se hospeda Marcos. al llegar le tocó la puerta pero no abren así que supongo que no está ahí adentro y decido ir en busca de Rosa para ir a la disco haber si lo encontraba por ahi talvez.
y cuando me dirijo al ascensor este se abre dejando a la vista a Marcos hablando por su móvil que al verme esboza una sonrisa y me da una mirada que me vuelve loca. camina hacia mí y antes de llegar a mi termina la llamada.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
―hola princesa.- me saluda dándome un casto beso en los labios.
―hola Marcos.- le respondo al igual el beso.
―Me andas buscando? porque dejame decirte que me has encontrado.-dijo el sonriendo y tomándola de la cintura para pegarme hacia el.
―vaya que eres adivino.- dije posando mis manos por su cuello.
―pues que tal si pasamos a la habitación?
―si, claro
―deseas algo de tomar.-preguntó él mientras entrabamos a la habitación.
-si, deseo tomarte a ti papasito.-pensó Mel mirándolo antes de responderle.―si, una copa vino estaría bien.-dijo Mel.
(jajaj si, una copa de vino, como si fuese algo normal en ti. como no.-dijo su subconsciente?
Al llegar al balcón Marcos me sentó en su regazo y conversamos sobre los gustos de ambos entre otras cosas mientras tomábamos de aquel vino. Hasta que marcos decidió que ya había sido suficiente charla y decidió darme un casto beso que yo seguí sin objeción y que se fue poniendo más intenso.
Marcos soltó mis labios y beso mi cuello mientras yo hacía movimientos sobre su notable erección, así sacando un gemido de mi parte y un gruñido de él ante la fuerte excitación. cuando el toma uno de mis senos dejo de hacer los movimientos de cadera para posar una de mis manos a su erección y empezar a masajearla por encima del pantalón.
Me levanto de su regazo y él me mira confundido hasta que me pongo de rodillas con mi mirada fija en sus ojos y desabrocho su pantalón y saco su pene y le doy un beso en la punta y empiezo a lamerlo desde su tronco hasta el glande, y empiezo a meterlo en mi boca dando succión y movimientos con mi lengua y él se estremece ante mi acción y eso me encanta eso me da la señal de que lo estoy haciendo muy bien a pesar de ser mi primera vez dando sexo oral.
―oh Mel!!!.-gime el.
Es ahí cuando lo sentí tensarse y el pene lo siento palpitante que a mi parecer se está por venir.
―Me voy a venir preciosa,!.
y se viene en mi boca y empiezo a tragarme su semen y saborearlo.
―mmmm... Marcos sabes tan rico.-dijo Mel retornando a los labios de él.
El entra nuevamente su miembro a sus pantalones y carga a mel para adentrarse a la habitación con ella en sus brazos con las piernas de ellas enredadas en su cintura. Mel desenreda sus piernas para quedar de de pies frente a Marcos y el empieza a besarle el cuello y a desvestirla a la misma vez. Al marcos terminar de desvestirla la levanto y la acomodo en la cama y empezó a besar los labios y descendiendo por su cuello dejando un chupete en el, siguiendo por los senos deteniéndose un momento allí para darle mas placer porque ya el sabe que ese es uno de sus puntos mas débil y siguió por su vientre hasta llegar al punto mas débil de una mujer...su vagina.
―ah.-gimió Mel.
―sabes tan rico Mel.-le dijo marcos con vos entrecortada.
Antes de Mel venirse Marcos se detuvo sacando un gruñido de parte de ella. El le sonrió y empezó a desvestirse despacio, haciendo a Mel desesperarse y el sonriendo malicioso.
―deja de jugar conmigo y follame ya, te necesito dentro de mí ahora pero ya.- dijo Mel desafiante.
―uff pero que carácter.-dijo posándose encima de ella.―es una orden?. pregunto alzando una de las cejas.
Ella no dijo nada solo lo tomo por la nuca y empezó a besarlo. Marcos por su parte empezó a penetrarla y seguida con sus movimientos de caderas dando profundas embestidas haciendo que Mel gritara entre gemidos su nombre que se escuchaba en toda la habitación y posiblemente fuera de ella también.
