The Toy

Capítulo 2

Bonnie

—Bien, ahora que ya ambos se conocieron podemos pasar a que te explique cómo funcionan las cosas, sígueme—

La pelirroja le depositó un beso en la cabeza al muñeco y lo tomó en brazos empezando a caminar hacia afuera de la habitación, yo le seguí detrás mientras miraba algo asustado a aquel tétrico muñeco.

—Como leíste en el anuncio que publiqué en Internet, yo saldré de viaje, por lo que te quedarás aquí con Bon, asi que para confirmar, ¿estás bien con eso? —

Lo pensé unos microsegundos, todavía tenía oportunidad de irme de aquí, pero no tenía a dónde ir, no quería regresar a mi casa, no con Owynn esperándome. Mis opciones era cuidar a un simple muñeco o regresar a casa y enfrenar al loquito de mi ex.

—Si, por supuesto. — acepté. Me quedaría a cuidar a Bon, sólo era un muñeco, probablemente la señorita esté algo dañada de la cabeza, mientras le siga la corriente todo saldrá bien y muy tranquilo.

—En ese caso, espero que las cosas funcionen... ya hemos recibido muchas propuestas de niñeras, pero mi Bon las a rechazado a todas, ¿sabías? —

Tragué nerviosa al escuchar eso.

—Aunque claro, es la primera vez que se presenta un niñero tan joven y lindo como tú—

Sonreí ante eso, para estar algo loca era una mujer bastante dulce. La madame Smith entró a su propia habitación tomando sus maletas de viaje, parece que se irá hoy mismo.

—Debes despertarlo a las 7 en punto de la mañana y lo vestirás, su ropa limpia está en su armario—

—Ah... yo... debo...— ¿había escuchado bien? ¿despertar y vestir a un muñeco?

—Despertarlo y vestirlo, joven Valentine—

—Ah... si, entiendo...—

—Es muy muy importante que lo despiertes a esa hora.— Me indicó en un tono estricto, puso a Bon en la cama. —Demuéstrame cómo lo despertarás—

—Ehm...— caminé algo temeroso hacia el muñeco sobre la cama. —Bon~ Es hora de despertar...~— pronuncié en un suave y muy bajo susurro.

—No sé tú, pero yo con eso no me despierto...— me respondió la madame.

—Ah... este...— me animé a tomar en brazos al muñeco de una forma sumamente suave y delicada —Es hora de despertar, Bon~— dije un poco más alto, pero no lo suficiente, me perturbaba aquel muñeco.

—Ahg, no es un bebé. — Me reclamó la pelirroja cruzándose de brazos. —No tengas miedo de lastimarlo—

—Oh, si...— lo volví a acostar en la cama —Lo siento yo- —

—Ya aprenderás a despertarlo con la práctica. No olvides tampoco darle su beso de buenas noches. — Tomó sus maletas y al muñeco en brazos dirigiéndose ahora a la biblioteca que tenía en otra habitación. Lo puso en una silla mientras seguía explicándome cosas. —Bon tiene 3 horas de clases 5 días a la semana, solemos iniciar con un poco de poesía, cualquiera de los libros que están aquí te servirán. Asegúrate de sentarte junto al él y si es necesario toma su mano para que no se distraiga de la lectura.— inmediatamente después de que Toddy mencionó eso, el muñeco se ladeó en la silla, quedando acostado en la misma.

—(FUE COINCIDENCIA, FUE COINCIDENCIA, FUE COINCIDENCIA) — casi me cago del susto.

—¡Bon! ¿Qué te he dicho? Tienes que sentarte derecho. — lo volvió a acomodar de forma correcta en aquella silla. —Se un buen niño, por favor— le pronunció dulcemente, me conmovió lo cariñosa que era con él, aunque fuera un muñeco, algún trauma debe tener para comportarse así con un trozo de plástico.