JiMin no dudó cuando su mano se colocó sobre la cerradura de la puerta del baño. Mucho menos cuando las prendas que cubrían su cuerpo fueron cayendo al piso exponiendo poco a poco su desnudez.
No lo hizo, incluso cuando sintió el latir desesperado de su corazón contra su pecho.
Simplemente caminó hacia la ducha, de forma lenta pero elegante, y teniendo la determinación marcada en su rostro.
YoonGi estaba de espalda lavando su cabello cuando él entro para acompañarle. Simplemente esperó a que el mayor se diera la vuelta.
El pálido le observó de arriba abajo con sorpresa, pero en el preciso momento que quiso preguntarle qué estaba haciendo, JiMin le interrumpió besándole como si la vida misma, dependiera de aquella acción.
Las manos de YoonGi se aferraron a su cintura, atrayendo al menor hacia él, y provocando una ligera fricción en sus cuerpos que los hizo jadear a ambos.
No hubo tiempo para preguntas o palabras, todo era un borrón entre la necesidad y el deseo, cada uno concentrado en tocar, poseer, dominar y ser dominado.
Las manos de YoonGi masajearon los glúteos del más bajo mientras su boca se encargaba de devorar la contraria. JiMin ladeó el rostro buscando más de aquello, más de YoonGi y su cuerpo frotándose sin descaro alguno contra el suyo.
—Y-Yoon. —Jadeó mordiendo el labio inferior del pálido cuando éste lo pego contra los azulejos del baño. —YoonGi.—Susurró envuelto en la marea de placer que sintió cuando el mayor succionó la parte expuesta de su cuello y sus manos se vieron dirigidas a la sensibilidad de su miembro.
—¿Q-Quieres esto? —Preguntó YoonGi con la voz ronca. Drogado por la marea de emociones que batallaban en su pecho. JiMin asintió. —No me sirve así, bebé. —Susurró apresando el eje del menor entre sus manos, dando leves movimientos que hicieron al menor estremecerse. —Abre esa linda boquita que tienes, para hyung. —Susurró en el oido del menor. —Y dime lo que quieres. —Concluyó lamiendo el lóbulo de su oreja. JiMin se mordió los labios inconscientemente mientras veía fijamente al hombre frente a él.
—Quiero tu verga en mi culo follándome hasta que no recuerde más nada en el mundo que no sea a ti, dentro de mi, llenándome con tu semen. —Mencionó viéndolo fijamente antes de relamerse los labios.
YoonGi no necesitó de más para empezar a bombear el eje entre sus manos. JiMin se aferró a los hombros del pálido mientras su mirada oscurecida seguía uno a uno los movimientos del pálido.
De repente, había sentido su mundo temblar. La velocidad era bastante buena, pero nadie lo había preparado para la calidez de la boca del mayor rodeando su pene. JiMin soltó un estremecedor gemido cuando YoonGi chupo su eje como si de una paleta se tratase.
No hubo una preparación previa, el mayor simplemente se lo había metido a la boca en segundos, succionando con fuerza en la cabeza para luego empezar un ritmo de engullidas que hicieron a JiMin jadear el nombre de YoonGi en diferentes tonos de voz.
—M-Mas... —Jadeó llevando sus manos al negro cabello del mayor, pero sin impulsarlo a nada, solo aferrándose como si fuera el cable que lo mantuviera en tierra.
Lo que le garantizaba que aquello no era un jodido sueño.
Las manos del pálido masajeaban con fuerzas sus testículos mientras su boca cubría en su totalidad la mayor parte del eje del menor. Su lengua haciendo desastres entre la dura base en donde estaba enroscándose sin contemplación alguna.
Lo único que se escuchaba en la habitación era el choque entre los labios del pálido hacia el falo de JiMin, y los jadeos del último combinados con sus ruegos por mas.
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Nothing Compares » Yoonmin.
FanficA la corta edad de trece años, Jimin comprendió muchas cosas. La primera era que nunca podría complacer a todo el mundo, la segunda era que estaba totalmente seguro que le gustaban los hombres, y la tercera y no por ello, menos importante: Estaba e...