62. En mi pueblo.

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Narra Marc:

-Amor, vamos, despierta.

-Mmmm...

-Si, ya sé. Te cuesta mucho despertarte, te pone de mal humor, pero tenemos que volver a casa.

-Estoy desorientada...

-Quee?? No porfavor, no porfavor, otra vez no... sabía que no era bueno que no hicieras más reposo.

-Quee??

-Queee?? Luna??

-Aii Marc, tranquilo, desorientada que no sé ni que día es de la semana, ni que hora...

-Joder, pensaba que habías tenido una recaída del traumatismo...

-Como te gusta el drama, jajajajaja.

-Va, vamos a recoger todo esto entre los dos.

-Valeee, pero que sepas que no entiendo como te puedes levantar con tanta energia de buena mañana.

-Es una cuestión de actitud, y por lo que te conozco la tuya empieza hacer efecto sobre las 10h de la mañana, pero siento decirte que hoy no tenemos tanto tiempo, así que ves espavilando.

-Joder, siempre dando órdenes, no soporto cuando eres tan intenso.

-Es lo que hay, mis luces  y mis sombras.

-Ni que lo digas. Susurré.

-Que has dicho?

-Nada, nada. Que me pido hacer la cama, así que a ti te toca hacer las maletas.

-Ya, eso me ha parecido escuchar. Las maletas ya están hechas, que por cierto lo he hecho mientras dormías así te dejaba descansar un poco más. Ves arreglarte, y yo mientras haré la cama.

-Hecho, te quiero.

Pasó por mi lado, me dió un beso y se metió en el baño. Yo mientras tanto terminé de ordenar la casa, cargar las maletas en el coche, mientras la esperaba quisé mirar las redes sociales pero recordé la conversación con Luna y no entré en los comentarios de nuestra foto. Que más me daba lo que la gente pensara mientras ella estuviera conmigo como en ese momento. Al poco salió con el pijama en la mano.

-Has ido tan rápido que no me has dejado guardar ni el pijama.

-Dejalo en el maletero, cuando lleguemos a casa ya lo sacaremos.

-Genial. Vamos?

-Quieres conducir?

-No me apetece conducir tan pronto por la mañana, ya si eso a mitad camino nos cambiamos.

-Ya veo, vas a dormir, no?

-Lo intentaré.

-Vaya copiloto me he buscado. Si alguna vez me decido hacer el DAKAR, recuerdame que no te lleve conmigo.

-jajajajaja, buah allí te puedo asegurar que no me dormiría ni queriendo. Va arranca y para en recepción que devolveré las llaves.

Así lo hice. Ella bajo del coche, y cuando la ví volver no iba sola.

-Mmmm... Marc... mira te presento a Lola, ella es la dueña del camping.

-Ahh hola, encantado.

-Aii, perdona que te moleste pero esque estos días me había parecido que eras tú, pero cuando se lo dije a mi marido me dijo que me había vuelto loca, que que iba hacer un deportista de elite como tu en un sitio como este. Y ahora te he vuelto a ver en el coche, y le he preguntado a Luna si era cierto lo que estaba viendo.

Todo es -ir.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora