Todo es -ir.

3. Tarde o temprano tenía que pasar.

Me senté en la primera mesa que había libre, esperé poco tiempo y vino el camarero.

-Hola, ¿chica nueva en el pueblo?

-¿Perdona?

-Quiero decir que no te había visto nunca por aquí, y he visto que venías del local que llevan tiempo arreglando. Así que he pensado que eras nueva.

Madre mia, lo de pasar inadvertida no será fácil... tan solo habían pasado 6horas des de que había llegado.

-Más o menos, chica nueva de 8h a 15h. Solo trabajo aquí.

-Así que, cuentame. ¿Una gestoría, agencia de viajes, tienda?

-¿Perdona? No lo entiendo.

-Que, ¿De qué es el negocio? El local digo, han estado un tiempo trabajando allí.

Y ahora que digo, en Lleida nunca me había pasado. No es que esconda mi trabajo, pero tampoco lo voy pregonando a los cuatro vientos, todo a su tiempo, el boca a boca hará el resto.

-Oficinas, una delegación de una empresa de Barcelona. Tratamos diversos ámbitos de trabajo en relación con lo social.

-Vale, vale, ya entiendo.

No había entendido nada, ya podía decir misa, su cara era un poema. Pobre hombre, en parte me daba pena.

- ¿Podría pedirle un bocadillo?

-Si, si claro, perdona.

-Bien, uno de tortilla francesa y un agua con gas. Gracias.

Aproveche el tiempo mirando el correo electrónico. Ya me habían pasado las ubicaciones para el día siguiente, miré el google maps y ví que no quedaba muy lejos de allí, así que después de comer me daría por allí una vuelta, tampoco tenía nada mejor que hacer al llegar a casa... y el curso de crimonología no empezaría hasta el 16 de Septiembre y estabamos a día 1... y respecto a quién me espera en casa, seré breve, nadie. Hace más de un año que dejamos la relación de 10 años con mi pareja. Y des de entonces disfrutando de la solteria, los planes de amigas y amigos.

Terminé de comer, pedí un café para llevar y me fuí a conocer mi nuevo puesto de trabajo. Me perdí queriendo por las calles, fuí al parque dónde mañana haría la primera supervisión, era una zona bastante apartada del pueblo, no me preocupaba en exceso ya que ya lo había hecho antes. Y en caso que surgiera algún problema, tenía el protocolo memorizado.

Cuando estaba ya volviendo al coche, me pareció ver pasar a Marc y Alex con las bicis. Pero sin más, yo a lo mio.

Conduje una hora y llegué a casa. Entre unas cosas y otras ya eran las 19h de la tarde. Estaba super cansada, así que me tumbé en el sofá, cogí un libro y de vez en cuando miraba la televisión o las redes sociales. Y en uno de esos momentos, ví que Marc había publicado una fotografía de una salida en bicicleta, pues sí, sí que eran ellos los que yo ví.

Hice la cena, y a dormir que al día siguiente tocaba madrugar... más que si tuviera el trabajo en Lleida, eso era uno de los contras. Veremos como me iria en invierno, ya que no me gustaba conducir con niebla... tal vez me planteé a largo plazo alquilar alguna habitación en Cervera para los meses de invierno. Ya veremos.

Lo primero que hice cuando llegué, fue ir a tomar otro café, el primero en casa, el segundo allí... volví al mismo bar que estuve el dia de antes. Estaba el mismo camarero de ayer.

-Vaya que madrugadora la chica nueva.

-Si, no me gusta llegar tarde a trabajar. ¿Me pones un café con hielo,porfavor?.

-¿Para tomar aquí o para llevar?

-Lo tomaré aquí, pero en la terraza si puede ser.

-Ves allí, que ahora te lo traigo.

- Genial, gracias.

Mientras esperaba, miré en redes la actualidad. Contesté algún whatsapp de la noche anterior, y publiqué una foto en historias de instagram con la ubicación. Era bastante activa en redes, siempre con un pseudonimo para proteger mi privacidad, a pesar de tener el instagram público.

- Aquí tienes el café...¿como te llamas?

-Gracias, soy Luna. ¿Tú?

- Joan.

-Muy bien Joan, nos vamos viendo.

Me tomé el café, me fume un cigarro y me fuí a la ofi. Era pequeña y acogedora. Tenía una mesa, mi ordenador portatil, que ahora sería de mesa, un pequeño office con una nevera pequeña, un microondas y cafetera. Y un baño. Ni sala de reuniones, ni dispositivo de emergencia... nada que ver con la oficina de Lleida.

A las 11h salí para hacer la supervisión, podría ir en coche pero como estaba bien aparcado decidí ir andando, así aprovecharía para hacer algunas llamadas de trabajo.

Nada me hacía pensar que iba directa a la primera batalla.