Demons [Supernatural]

Nightmare I

—Dean, Jules—

—Presente— murmuró la menor tras abrir los ojos con cansancio

—¿Qué haces? Es media noche— preguntó Dean confundido al ver a su hermano ir por toda la habitación recogiendo sus cosas

—Debemos irnos—

—¿Qué ocurre?—

—Debemos irnos, ahora mismo—

🖤

—McReady, Detective McReady, placa número 158, tengo una señal 480 en progreso— comentó Sam al teléfono —Necesito al propietario de un sedán, placa de Michigan, Mary-Frank-seis-cero-tres-siete...sí, bien, pero de prisa—

—Sammy, tranquilo, sólo fue una pesadilla— dijo Dean

—Dímelo a mí—

—Lo digo en serio, una pesadilla normal, común, en la que sales desnudo, esa placa no existe, ya lo verás—

—Lo sentí diferente, Dean, real— aseguró Sam —Como cuando soñé con la casa y con Jessica—

—Soñaste con nuestra casa, con tu novia, ¿has visto antes a este tipo?— el menor negó —Exacto, ¿por qué tendrías premoniciones de un tipo cualquiera?—

—No lo sé—

—Yo tampoco...sí, aquí estoy— comentó regresando a la llamada, al recibir respuesta miró a Dean —Jin Miller, Saginaw, Michigan, ¿tiene una dirección?—

—No creo sea una pesadilla normal— susurró Julia a Dean, el chico la miró de reojo un poco preocupado

—Sí existe, ¿qué tan lejos estamos?— preguntó Sam

—¿De Saginaw?— el chico asintió —A un par de horas—

—Maneja más rápido—

SAGINAW, MICHIGAN

Al llegar a la dirección que Sam había conseguido se encontraron con una patrulla fuera de la casa y con unos paramédicos cubriendo un cuerpo con una manta.

—Lo siento— murmuró Julia tomando el hombro de Sam, el chico tomó su mano sobre su hombro y le dio un ligero apretón para los tres bajar y caminar hasta la multitud que estaba frente a la casa.

—¿Qué ocurrió?— preguntó Sam a uno señora

—Suicidio— contestó —No puedo creerlo—

—¿Lo conocía?— le preguntó Dean

—Lo veía cada domingo en St. Augustine, siempre me pareció...parecía normal, nunca sabes qué pasa detrás de una puerta cerrada—

—Supongo que no— murmuró la chica

—¿Cómo...?— murmuró Sam —¿Cómo dicen que pasó?—

—Lo encontraron en el garaje encerrado en su auto con el motor encendido— el menor negó

—¿Sabe a qué hora lo encontraron?—

—Sucedió hace una o dos horas— Sam miró mal a Dean —Su pobre familia, no puedo ni imaginar por lo que están pasando—

—Sam— lo llamó Julia cuando este se alejo de la multitud un poco molesto

—Estoy bien— masculló

—No lo estás— le dijo abrazándolo por un costado

—Llegamos lo más pronto posible— comentó Dean acercándose a ambos