Hunted III

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—Conozco a Sam, más que a nadie, él tiene más conciencia que yo, le dan remordimientos si no pago un dulce— comentó Dean ya desesperado —Y Lia, Lia no mataría sin razón, no es como nosotros—

—Tal vez tienes razón, pero un día serán monstruos—

—¿Cómo?— preguntó Ian —¿Cómo se volverán monstruos?—

—Quien sabe, pero lo hará—

—No, tú no sabes eso— gritó Dean

—Me sorprendes tú Dean— le dijo —Estás muy emotivo, hasta Ian parece tener mejor control a pesar de la herida en su hombro, oí que eras más profesional—

—Ya cállate— pidió Ian con cansancio

—Escuchen, digamos que andan en sus autos y se encuentran a Hitler en una estación, pero cuando era un simple joven y débil adolescente, pero saben en lo que se convertirán un día, lo matarían sin dudar ¿no?—

—No es lo mismo— negó el rubio

—Sí, sí es, no pueden verlo aún, es su destino— les dijo —Miren los compadezco, son sus hermanos y los quieren, tiene que ser doloroso para ustedes—

Entonces se levantó de su lugar tomando dos trozos de telas.

—Pero escuchen— comentó para colocar las telas en sus bocas como mordazas —No tienen remedio, pero John...si se enfrentara a esto, tendría las agallas para hacer lo correcto, ¿estás diciéndome Dean que no eres un hombre como él?—

🖤

—Me siento como Spiderman cada que me dan escalofríos o presentimientos— susurró Julia en cuanto sintió en su cuello cosquillas

—¿Estás sintiendo verdad?— la castaña asintió para los dos guardar completo silencio y caminar hasta el porche, al asomarse por un pequeño agujero lograron ver a sus hermanos amarrados a sillas con mordazas y a Gordon sentado en una esquina esperando; Julia también notó la mancha de sangre en el hombro de su hermano y apretó los labios.

Decidieron ir hacia atrás para atacar y al encontrar una puerta Julia tomó su clip de pelo para abrirla, los tres hombres dentro escucharon esto.

—¿Los escuchan?— preguntó Gordon —Aquí viene—

Los dos se miraron con terror cuando se escucho la explosión en el cuarto de atrás y gritaron a través de las telas, Gordon solo suspiró.

—Aún no, esperen y vean— pidió, cuando la segunda explosión sonó Ian sintió como sus ojos empezaban a picar mientras apretaba sus puños con fuerza, a su lado Dean había empezado a sollozar, el hombre se acercó a ellos.

—Lo siento— dijo para ir al cuarto de atrás con su rifle

Ambos castaños se escondieron y sonrieron al notar como Gordon vio el zapato de Sam en el piso, en cuanto les dio la espalda los dos le apuntaron con sus armas.

—Suelta el rifle— ordenó Sam

—No deberías quitarte el zapato aquí— dijo —Puede darte tétanos—

—Ponlo en el suelo— le dijo ahora Julia con rudeza, ambos hermanos se miraron esperanzados

—No me matarían, ¿o sí Sammy?, menos tu Lia, sus hermanos creen que son santos— dijo dejando el arma

—Yo no estaría tan seguro— masculló Sam

—Sí, es lo que yo dije— les dijo para girarse y quitarles el arma para empezar a golpearlos.

Ambos lograron esquivar un par de golpes, pero no todos provocando que atacar de vuelta se empezara a volver algo difícil. Cuando logró debilitarlos Gordon empujó a Julia contra una pared para después hacer lo mismo con Sam y acercarse hasta él con un cuchillo, no importándole Julia porque parecía desorientada.

Demons [Supernatural]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora