Cambiaré el destino

Alianza

Kurama no sintió nada especial en el chakra de Sakura cuando esta entró por el sello. En su opinión, era un chakra bastante insignificante.

Desde las sombras, pudo ver salir la pequeña figura de una niña con cabello rosa, que fijó su vista en él en cuanto llegó.

El Kyubi miraba con odio a Sakura.

Ella solo se acercó un poco a la jaula y le sonrió en un intento por ser amigable.

—Hola, Kurama-San. Me presento, mi nombre es Sakura Haruno, y sólo quiero conversar un poco contigo.

Kurama se puso alerta en cuanto oyó la mención de su nombre.

¡¡¿como es que esa maldita mocosa sabia su nombre?!!

Los únicos que podían saberlo actualmente, eran los demás bijuus. Y  dudaba mucho que alguno de ellos siquiera lo mencionara.

Kurama oculto su sorpresa, como si para él fuera normal que una niña de pelo rosa lo llamara por su nombre de la nada.

—¿Qué es lo que quieres mocosa?—preguntó severo, sin apartar en ningún momento su mirada de ella.

Sakura también lo miró a los ojos fijamente, sin mostrar ningún signo de sentirse intimidada por el Kyubi.

—Quiero formar una alianza con usted, Kurama-San. Necesito de su ayuda para lo que quiero hacer. A cambio, yo le ayudaré a usted.

Kurama soltó una oscura carcajada. Pará él, estaba claro que esa mocosa sólo quería su poder. Los shinobi siempre querían poder.

Pero podía aprovechar la oportunidad y engañar a esa mocosa ingenua.

—A menos que seas capaz de romper este sello y sacarme de aquí, no hay nada que me interese—le dijo.

Sakura sonrió de lado. Ya se esperaba algo así.

—Naaa, Kurama-San, sí yo fuera usted, preferiria quedarme aquí un poco más.

Kurama empezó a gruñir de ira.

Aún así, Sakura continuó.

—En unos años, una organización shinobi, formada por criminales rango S llamada Akatsuki, empezará a capturar a los bijuus uno por uno, y si no tiene a Naruto como su jinchuriki, será más fácil para ellos capturarlo y volverlo a sellar.

Kurama entrecerro los ojos.
"Como supuse, esa mocosa sabe más de lo que dice"

—Me estas subestimando, mocosa—le dijo lúgubre, con la amenaza impregnada en cada una de sus palabras.

—No es así, yo conozco muy bien su poder, Kurama-San, pero también conozco el poder de Akatsuki. Dos de sus miembros son suficientes para capturar a un Bijuu—explicó—. Sus planes no son para tomarselos a la ligera, ellos ponen en peligro no sólo a Konoha, sino también a todo el mundo ninja, y también a los bijuus.

"¿Acaso... Intenta manipularme?"

Kurama se sentía insultado, ¡el único que podía manipular a alguien ahí era él!. Y a él ni siquiera le importaba lo que le pasara a los otros bijuus. De seguro a ella tampoco le importaban, solo no quería que una organización le robara un arma a su aldea.

—Tu Hokage debe ser muy incompetente si necesitas pedirme ayuda a mí para resolver los problemas de tu aldea—se burló, para luego reír maliciosamente.

Sakura trató de no perder la seriedad de sus palabras al continuar.

—Mi Hokage no debe saber el alcance de mis conocimientos. La información que yo poseo es muy valiosa y delicada—recuerdos de la guerra y de todos los sucesos que la llevaron hasta allí volvían a su mente. Sakura los ignoró—. Es por eso que necesito su ayuda, no puedo cometer errores.

—Aún no me has dicho que es lo que quieres hacer—hizo una pausa—, ni qué me darás a cambio.

Sakura consideró que lo mejor sería primero convencerlo y después contarle sus planes.

Así que pensó muy bien en lo que diría.

Ella tenía que lograr que el Kyubi no sólo la  ayudara sin traicionarla, sino también, que en el futuro no se aprovechara del odio de Naruto para intentar romper el sello.

Solo había una cosa que podría querer el Kyubi, pero también había una cosa, o mejor dicho una persona, a la que él odiaba más que a cualquiera.

—Yo lo ayudaré a no volver a caer en el control de los Uchiha—le ofreció.

Sakura tuvo que saltar hacia atrás para evitar las garras del kyubi, que se dirigieron en su dirección con la intención de destriparla apenas ella terminó de decir Uchiha.

—Y si todo sale como planeo—continuó—, encontraré la forma de liberarlo sin que Naruto corra peligro.

"Aunque dudo que quiera ser libre cuando todo esto acabe, Naruto se encargará de eso"

Kurama empezó a considerar la idea, pero no podía confiar en un Shinobi, especialmente en una que parecía saber más que el mismo Hokage.

—Kurama-San, el Uchiha que lo controlo, la noche en que murieron el cuarto Hokage y su esposa, es el líder de Akatsuki. Y uno de los objetivos de Akatsuki, es traer de vuelta a la vida a Uchiha Madara.

La sed de sangre en el ambiente aumentó en cuanto kurama escuchó ese nombre.

Sakura ni se inmutó. El odio del Kyubi no podía afectar a Naruto mientras este último no sintiera odio también.

—Tú...

—Le dije que la información que yo poseo es muy valiosa—lo interrumpió—. Se lo que Akatsuki planea, se las consecuencias que eso traerá, se cuantos morirán, y no dejaré que eso vuelva a suceder—dijo decidida—. Lo que quiero es detener a Akatsuki y todas las demás tragedias que ocurran en el futuro. Pero para que todo salga como deseo, necesito de su ayuda.

Kurama analizó detenidamente las palabras de Sakura. Para él, ya estaba más que claro que esa no era una mocosa normal desde el momento en que lo saludo con respeto y le sonrió como si nada. Otra cosa que encontraba rara, es que no dejara de hablar del futuro...

Sí había una forma de revivir a Madara, eso quería decir que los shinobis ya se habían metido con la muerte. ¿Acaso también se habían metido con el tiempo? Eso explicaría por qué la mocosa sabia tantas cosas. Como que una organización shinobi quería traer de vuelta a Madara.

Kurama recordaba las veces en la que su voluntad había sido deblegada por esos malditos ojos rojos.

Kurama recordaba muy bien a Madara. Y no había nada que odiara más que a él.

Prefería mil veces ser controlado por Naruto o por la mocosa a tener que volver a ver a ese Uchiha.

—Tks, te ayudaré a salvar a tu patética aldea, mocosa—dijo con fastidio.

—Muchas gracias, Kurama-San—dijo Sakura mientras se inclinaba respetuosamente.

—¿Qué es lo que quieres que haga? —dijo Kurama, ya cansado de todo, aunque muy en el fondo, le agradaba que un Shinobi lo tratara con respeto por primera vez en su vida.

—Quiero que cuide de Naruto en todo momento, y que lo ayude a entrenar.

—¿Eso es todo?—adiós a su plan de debilitar el sello.

—También quiero que me ayude a entrenar a mí. Tengo una técnica que me gustaría perfeccionar.

10/04/22

02:15 am

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Al fin pude actualizar, lamento la demora, ya empecé las con las clases semi presenciales y las tareas me dejaron sin tiempo e inspiración para escribir.

Pero ya me estoy arreglando con eso y a partir de ahora estaré actualizado un capítulo por semana.

Por ahora, espero que este capítulo haya sido de su agrado. ❤️