Media sangre de dragon

Cuarto día/Cambia dormida

Hipo
Desperté demaciado tarde, anoche no pude dormir por una pesadilla, soñé que Dalla humana estaba en una jaula intente ir a liberarla pero algo me ataco, era Dalla, pero estaba cubierta de escamas, parecía mas dragón que nunca, la que estaba en la jaula grito pidiéndole a la que me atacaba que se alejara, pero esta escupió fuego...justo antes de que las llamas me tocaran desperté.

Me levante a toda prisa para ir a ver a Dalla, dudo mucho que mi pesadilla se vuelva realidad, pero es mejor estar seguros.

-Ella cambio-dijo Astrid, quien había llegado antes quien yo.

Me acerque a la jaula, Astrid tenia razón, Dalla se veía normal, tenía sus alas y las escamas en su costado, pero solo eso, esperaba que se convirtiera en un dragón completamente.

-Como esta Dalla-pregunto mi padre llegando a la academia.

-Sigue dormida-respondí-se ve...normal.

-Sera mejor prepararnos para mañana-dijo, seguro que Dalla le dijo algo sobre el peligro que podría representar-sera un largo día.

Le seguí la corriente juntando algunas cosas que pudieran ser de utilidad si pasaba algo, aunque no lo creo, reforzamos muy buen la jaula y tenemos repuesto.

Decidí seguir con las lecciones de la academia, ya que Dalla no despertaría hasta esta noche podríamos estudiar a los dragones.

Regresamos todos juntos ya en la noche, fuimos a la academia donde encontramos a mi padre y a Bocón, estaban viendo la jaula donde estaba Dalla, me acerque a la puerta y me sorprendi mucho al ver un dragón negro con largas garras y....cola, debía ser Dalla, estaba recostada justo donde estaba ella y también estaban las vendas que ella se había puesto rasgadas en el piso.

-Es Dalla-preguntaron los gemelos al mismo tiempo-cambio un poco.

Yo diría que cambio mucho, debíamos esperar a la media noche para que despertara, envíe a Astrid y a los gemelos a dormir, debíamos vigilarla todo el tiempo, los demás haríamos el primer turno, mi padre decidió quedarse a apoyarnos, Bocón haría el turno de día junto con los demás. Trajimos cestas llenas de pescado y las metimos en la jaula antes de que despertara, Dalla empieza a moverse un poco, tal vez despierte.

El dragón abrió los ojos, eran verdes como los de Chimuelo, se levanto a toda prisa y nos miro uno a uno....

Dalla (dragón)
Es momento, es momento, levanta te rápido, quienes son estos, son...humanos, debo atacarlos, que es ese olor....huele a...anguila, que asco, odio la anguila...que hay en esa cesta...es pescado, rico, a comer.

Ya comí, es momento de escapar, no pueden encerrarme....pero odio la anguila..por que hay tantas anguilas....debo escapar, debo escapar. Un momento, ese chico se acerca a la puerta...se ve...conocido, yo no conozco a ningún chico castaño, o si...que es lo que quiere.

-Dalla-dijo ese chico metiendo la mano a la jaula-se que eres tu....no eres peligrosa.

Soy peligrosa, soy peligrosa, no te confíes, muerde su mano, pero un hombre grande de barba lo jalo lejos, no lo mordi. No puedo hacer nada, estoy encerrada debo escapar, me recoste en el centro de la jaula, no dejan de mirarme, solo hablan entre ellos, me levante y camine a la puerta, ese chico se acerca de nuevo, que quiere ahora, solo se sentó en el piso junto a la puerta a mirarme, lo mire a los ojos, por que me parece familiar...quien es el...como supo mi nombre.

-Hola-dijo ese chico-me llamo Hipo...por si no lo recuerdas.

No lo recuerdo...un momento...por que me preocupa no recordarlo....de donde lo conozco.... POR QUE ME PREOCUPO POR EL.

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Que les pareció la Dalla dragón, aun recuerda un poco a Hipo, que opinan de eso.

Mientras vuelvo a publicar, tengan cuidado de que los terrible terror no se roben su comida, realmente son traviesos. :-)