2° Destinos predilectos

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Nikolai.

Un dia antes del rescate

Faltan un par de horas para que el maldito evento empiece, mi madre ya ha hablado y nos ha hecho saber que esta a poco tiempo de aterrizar en la pista privada que tenemos aquí en Italia. 

El ambiente tenso entre Adrix y nosotros me tiene hastiado así que tome su auto y salí de la finca, estoy seguro de que va a pegar el grito en el cielo cuando se de cuenta de lo que hice pero realmente me da igual. Lo único que necesito por ahora es despejar mi mente y alejar la maldita sensación de que algo nos va a joder que tanto me atormenta desde hace horas, enciendo el estéreo del auto y conecto mi teléfono para poder reproducir Legend, la música me calma y conducir un auto como este hace que mis extremidades puedan relajarse. Golpeo el volante con mis dedos al ritmo de la canción y piso el acelerador a fondo, Los autos y las tortuosas sesiones de dolor son lo mio. 

Las calles de Italia a esta hora siempre están al tope, pero siendo honesto no me importa, puedo andar en donde sea, como sea sin tener que preocuparme por las consecuencias... a menos que este la maldita cola de autos estancados y tapando la pasada.

- Odio Italia - bramo. Reconozco la calle en la que estoy, cerca de aquí queda el hotel. - Odio a los italianos - resoplo y apago el auto para después salir a caminar un poco. Me aseguro de que llevo mi arma en el bolso interior de mi gabardina negra y le pongo seguro al auto. <<Lo ultimo que necesito es que Adrix me reproche que por mi culpa le robaron su precioso auto>>. Me coloco mis anteojos negros y avanzo hacia la acera, meto mis manos en los bolsillos de mi gabardina y continúo caminando por las calles de esta ciudad, de vez en cuando les sonrío con galantería a las Italianas que me observan sin disimular. <<Odio a los italianos pero nunca dije nada de las italianas>>.

Después de unas cuantas calles, un mercado aparece a mi vista <<No recuerdo cuando fue la última vez que estuve en algo como esto, creo que cuando era niño y eso solo porque amenazaba a la cocinera con decirle a mi padre que la enviara con los verdugos>>, desvío el camino hacia la izquierda y me adentro en el pequeño mercado italiano, hay puestos de frutas y verduras, personas vendiendo artesanías, <<No es tan desagradable >>, sigo caminando y de vez en cuando me detengo en los puestos que llaman mi atención.

- Nikolai Volkov - la voz de una mujer me toma desprevenido mientras observo un puesto de joyería. Me giro y me topo a una mujer de aspecto gitano, tiene el cabello cobrizo y unos ojos verdes que te atrapan - Te estaba esperando - dice y frunzo el ceño confundido

- ¿Tu eres....

- Maya - responde con una sonrisa - Ven aquí- me pide y señala su puesto en donde tiene cristales, hiervas, y una pequeña mesa con dos bancos- Toma asiento

- ¿Como sabes mi nombre? - le pregunto con desconfianza y me llevo la mano al arma que tengo en el bolsillo de mi gabardina. Me padre nos crió para siempre estar alertas.

- Yo lo sé todo - asegura - Me alegra que ya conocieran a Allison - dice acaparando mi atención. Me acerco a ella y tomo asiento frente a ella.

- ¿Como conoces a la Zvezda? - la interrogo

- Estuvo aquí hace un tiempo - explica- y tu presencia aquí me confirma que su destino está marchando tal cual lo tiene escrito...

- ¿De que hablas? ¿Que destino?

- Allison nació para gobernar - dice <<Eso ya lo se>> desde que la vi supe que estaba hecha de acero para ser parte de esta vida, nada ni nadie podrá quebrantarla ella tiene un espíritu tan brillante que no cualquiera podrá apagarlo. - Toma esto - me tiende un sobre negro y lo miro con cautela- Has que llegue a manos de Allison

Placeres Del Infierno (Spin Off)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora