En un mundo que juró recorrer solo, Taehyung se envuelve en una encrucijada. Darle la espalda a sus creencias o salvarle la vida a ese mestizo.
Alguien mató a su entrañable amigo, alguien le arrancó una parte de su propia alma y ese alguien iba a re...
La Madre Luna estaba tan furiosa con los brujos que parecía que ni siquiera un efímero rayo de su blanca y cálida luz llegaba hasta Chanyeol y Beaekhyun, los líderes del aquelarre que estaba causando una revolución en las criaturas de la noche, estaban refugiados en un viejo almacén, con los chillidos de las ratas como música de fondo, el techo estaba fragmentado y por más que Chanyeol buscaba a la Madre Luna, ésta parecía darle la espalda, el alma ya vendida del brujo se estrujaba de dolor al mirar el estado de Baekhyun, tenía la cara desfigurada por la batalla reciente y tenía pedazos de carne arrancados, el olor de la piel corroída le daban náuseas, pero no podía separarse de su amado porque Baekhyun se aferraba a sus manos con las pocas fuerzas que le quedaban, un líquido amarillento y que olía a muerte se desprendía de los cortes de las manos de ambos, era una representación gráfica de su amor tóxico, la infección que invadía sus cuerpos también supuraba en sus corazones, ellos mantenían el control del aquelarre a base de miedo, amenazas y ejecuciones aleatorias, Chanyeol sabía que eso no infundía respeto ni lealtad en el aquelarre pero cegado como estaba por su amado, cedía a todo lo que su pareja exigía, aunque eso incluyera sobajar su autoridad ante el aquelarre y los demás brujos mayores solo lo tomaran como el títere de Baekhyun, mientras las horas pasaban y la acuosa luz del amanecer iba filtrándose por las grietas del techo, la ayuda para ellos por fin llegó, el líder del Principado les envió un transporte y un grupo de escoltas para llevarlos a un lugar seguro, con toda la delicadeza posible tomó el cuerpo maltrecho del líder de los brujos a pesar de sus propias heridas, Chanyeol se sintió en un momento poético cuando notó como sangre brotaba de sus heridas pero poco le importó soportar el dolor si con eso podía proteger a su amado, con suma delicadeza colocó a Baekhyun en el vehículo recostado en el asiento trasero, la cabeza del líder brujo apoyada en las piernas de Chanyeol, cada tanto el brujo más alto revisaba que la respiración de Baekhyun fuera regular, con dulzura despejó la frente del contrario para acariciar la suave y maltrecha piel, una lágrima traicionera recorrió el rostro del más alto, prometiendo en silencio que curaría a su amado aunque eso le costara años de vida o tal vez la vida que le restaba, y aunque estaba seguro que si la situación fuera contraria Baekhyun difícilmente movería un dedo por el, no le importó, él protegería a su pareja sin importar las consecuencias, lastimosamente para los seres hijos de la Madre Luna, Chanyeol tenía varios ases bajo sus mangas, lo cual lo hizo emitir la más tenue de las sonrisas mientras escuchaba la débil respiración de su amado brujo mientras el bosque a las orillas de la ciudad abría sus fauces para resguardarlos en completa oscuridad.
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El refugio de la Hermandad Bang Tan bullía en actividad, el personal iba y venía para atender a los guerreros quienes se estaban recuperando rápidamente de sus heridas de la batalla gracias a la pureza de su linaje, aunque sus corazones parecían seguir en una batalla personal y más difícil de vencer para cada uno de los guerreros, a excepción de Tae y Jungkook quienes eran una pareja que se consolidaba cada día más, los demás guerreros revolvían sus mentes y corazones hacia un campo de batalla mucho más agreste y lleno de trampas: el amor.
