Era de mañana y ______ aún se encontraba tendida en su cama, aún descansando.
Pues no pasó mucho, sus sueños fueron interrumpidos por su padre.-Buenos días-
Saludo con entusiasmo.
-Hija mía, despierta, tengo noticias--Buenos días pa-
-¿Qué sucede?- Pregunto mientras se levanta a de la cama.-La familia Madrigal nos a invitado a cenar hoy, te quieren conocer, al parecer Camilo les hablo de ti y ahora ellos también quieren conocerte- Explico, esperando que su hija no sé lo tomará a mal.
Por tanto, la chica abrió los ojos de par en par, la idea de tener que convivir con tanta gente al mismo tiempo la aterraba.
-Pero y si no les agradó o no se que decir o pasa algo- Fue interrumpida.
-Hey, calma no pasará nada malo, lo harás bien, lo sé-
La chica se tranquilizó.
El señor Eduardo se encaminó al negocio dejando sola a su hija en casa.
Se vistió y arreglo para nuevamente salir a seguir explorando el pueblo.
Esta vez pondría atención por dónde caminaba para no perderse otra vez.Por el momento no le sucedió nada relevante, así que esta vez logro regresar a la repostería.
-Padre ya regresé- Se anunció la joven.
-En un momento salgo hija, no tardó- Respondió el padre que se encontraba en la cocina.
Pacientemente espero a su padre en la entrada para encaminarse de regreso a casa.
Una vez estando en casa su padre se ducho y vistió para la ocasión, en cuanto terminó se dirigieron a la casita Madrigal, dónde ya los esperaban.
Fueron recibidos por la señora Alma.-Hola, sean bienvenidos a la casa Madrigal- Saludo la mujer, dándoles paso a las visitas.
-Hola señora Alma, que gusto verla-
-El gusto es mío Eduardo, hay muchas cosas de las que tenemos que hablar, pero primero, hablame sobre tu hija-
Respondió dirigiendo la mirada a aquella joven.-Hola, mucho gusto, soy ______- Está vez no cometió el error de decir su apellido, no sabía si sería buena idea decir que era adoptada. Quería que su padre fuera quien decidiera eso, ya que no quería causarle de alguna manera, problemas.
-Por favor pasen, la familia los espera en el comedor- Invitó la mujer.
Ambos pasaron directamente a dónde les habían indicado. Detrás suyo iba la señora Alma.
-Buenas noches a todos- Saludo el señor Eduardo mientras entraba a la habitación.
A su lado se encontraba ______ quien con un poco de dificultad saludo.
-Hola, buenas noches- Saludo en un tono bajo.
Toda la familia saludó con entusiasmo invitando a ambos a tomar asiento.
-______ que bueno que viniste, ven te aparte un lugar a lado mío- Anuncio el Madrigal mientras se ponía de pie para mover la silla que se encontraba a su lado para que su amiga tomara asiento.
______ atravesó parte de aquella habitación nerviosa, no quería hacer el ridículo en su primera con alguien que no era solo su papá.
Por otro lado, el señor Eduardo se sentó del otro lado de la mesa junto con la señora Alma.
-Muchas gracias por el lugar Camilo- Agradeció la joven.
Aquel muchacho solo asintió regalandole una sonrisa a su amiga.
ESTÁS LEYENDO
Enséñame a vivir
RomanceSera capas de aprender a vivir una joven que a pasado su vida encerrada por casi 10 años? ¿El amor realmente será suficiente para vivir felices?