La vida de Angelina ha dado un giro dramático luego de enterarse de que fue víctima del engaño por parte de Caden Greenwood, que se ha casado con Miriam Hamilton, rompiendo con la promesa que le había hecho. Hundida en la decepción, Angelina pront...
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El ama de llave, fiel a la duquesa madre no perdió tiempo en contarle todo lo que había visto y escuchado en la terraza; la dama palideció al oír lo que su sirvienta le confesaba, el ama de llaves notó la palidez de la mujer y le ofreció agua, la duquesa madre lo rechazó; no obstante, aquel sentimiento de derrota se le pasó con rapidez, cuando otro de los empleados de confianza entró para informarle que le habían llegado dos misivas, el hombre hizo la reverencia y le entregó los dos sobres, Emilia los tomó y su sonrisa fue inmediata al verificar que ambas eran de Caden Greenwood.
La duquesa madre, tenía en su poder dos cartas: una donde Caden aceptaba reunirse con ella, pero con la única condición de que la otra misiva fuera entregada a Angelina; el doctor Greenwood le había colocado una poderosa arma en su mano, solo tenía que escoger bien el momento de hacérsela entregar, no sin antes ella leerla. Ya analizado el movimiento, Emilia dio instrucciones a sus dos sirvientes de confianza como actuar.
—Debí reunirme contigo desde un principio, y no haber perdido mi tiempo con esas dos inútiles, una insulsa y la otra una perra sin bozal —murmuró la duquesa madre. —Disfruta de tu breve triunfo ¡Trepadora!
Angelina.
Felicidad y miedo eran las mezclas que estaban dentro de Angelina, felicidad porque sería la esposa de Michael y miedo porque presentía que algo turbio se estaba gestando en la mente de sus enemigos, tanta calma era siempre el principio de la tempestad, cerró los ojos y no quiso pensar, Michael le prometió hablar con su madre, ella advertía que Clara tendría sus dudas y así fue. Cerró los ojos y recordó lo que su madre le había contado.
—Parece que estoy viviendo la misma historia, pero esta vez con un duque —expresó Clara cuando Michael le pedía su aprobación y bendición para casarse con su hija. William quiso intervenir, el duque lo detuvo.
—Me ofende que me compares con Caden Greenwood, parece que no me conocieras —dijo Michael con un poco de decepción.
—No te comparo, simplemente remarco el hecho de que ahora eres un duque, ciertamente, soy una mujer que proviene de una familia pobre, sin embargo, la vida me ha enseñado que los títulos pesan y no van de la mano con una dama que no venga de familias con títulos prominentes. Michael, conocí al adolescente que vivía en la cabaña, pero al duque no.
—No voy a mentirte, ser un duque trae consigo muchos beneficios, pero también restricciones y protocolo, entiendo que protejas a tu hija, y que las dudas te asalten debido a lo que sucedió con ese mal nacido de Caden.
—Mis dudas no es solo por lo que Caden le hizo a mi hija, que agradezco a Dios, no paso a términos más graves y comprometedores, mi miedo es por lo que te rodea —Clara exhalo profundamente, necesitaba mantenerse en calma y decirle todo en la cara a Michael. —No confió en la duquesa madre.
—Yo tampoco confié en ella Clara, aun así, te aseguro que no debes temer, yo estoy por encima de ella, y si para estar junto a Angelina debo renunciar a mis títulos entonces lo haré —sus palabras fueron decisivas, Clara vio en sus ojos que no mentía, Michael amaba realmente a Angelina.
