¥ALGUNAS ALMAS SE MUESTRAN¥

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Caden

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Caden.

Ira, impotencia, eran unos de los sentimientos que poseían a Caden Greenwood cuando descendía por las escaleras rumbo al sótano. Hizo la seña para que Hunter le abriera la pesada puerta, ya dentro cerró con seguro nuevamente y se le fue encima al hombre tomándolo por el cuello. Hunter cayó en sobresalto.

—¡Maldito imbécil cuál fue la orden que te di! —Hunter no entendía por qué Caden estaba tan enojado.

—Doctor... por favor, no entiendo... ¿Qué hice? —articuló con dificultad el hombre, Caden lo presionaba con fuerza. Luego lo soltó, Hunter pudo respirar.

—¡La orden fue concisa! Debías ser mis ojos ¡Tu deber es vigilarme cuando yo no pueda ni con mi propia alma! Por tu descuido, la maldita que me impusieron como esposa intimó conmigo.

—Amo le juro que al verlos besarse de esa manera pensé que usted también quería.

—¡Animal, como vas a suponer eso si te dije que no amo a esa mujer! ¡Estaba intoxicado con la absenta! Por eso te mostré todos los pasajes secretos de esta casa.

—Perdóneme amo,  soy una bestia por mi error, debí detenerla —Hunter se veía conmocionado y apenado.

—Ruégales a tus demonios personales, de que no haya consecuencias, porque te juro que no te daré más tu medicina y dejaré que la enfermedad termine de comerse tus pulmones.

—Ruégales a tus demonios personales, de que no haya consecuencias, porque te juro que no te daré más tu medicina y dejaré que la enfermedad termine de comerse tus pulmones

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—¡No amo, no... tenga piedad de mí! —seguidamente se arrodilló.

—¡Suéltame rata de laboratorio, hoy no vendrás conmigo! —Caden salió molesto de su laboratorio, subió rápidamente; necesitaba salir de aquella mansión.

Michael.

  La idea de confrontar a Caden Greenwood estaba muy sólido en la mente del duque de St. Moritz, Caden había traspasado la línea de su paciencia y no iba a aguantar una falta de respeto más. Angelina había prometido no ocultarle nada y se disculpó aceptando que Michael tenía la razón en molestarse, entendió que por querer evitar un mal rato o una preocupación al duque, lo que logró fue darle ventaja a la duquesa madre.

Angelina "Amar o Morir" LIBRO II  (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora