Siempre tuve un algo difícil de descifrar con el tema de mirar los ojos de las personas al momento de conocerlas y más aún luego de escuchar eso de que "Los ojos son las ventanas del alma".
Cuando lx conocí, vi que sus ojos brillaban, que tenían un brillo muy diferente al que hasta ahora había encontrado en el corto trayecto de mi vida y sus ojos no sólo parecían estrellas, parecía tener una jodida galaxia en ellos, al mirarlos te dabas cuenta que podías leer diferentes historias, en ellos habían diferentes formas de ver la vida, sus ojos te mostraban el porqué su forma de ser era así, tan dulce, tan comprensivx, tan locx, tan deslumbrante pero a la vez tan rotx.
Sus ojos te mostraban que el hecho de que por dentro estés rotx, no significaba que no lograrías encontrar una forma nueva de brillar.
La única diferencia es que esa manera de hacerlo era jodidamente dolorosa pero al mismo tiempo hermosa, era de una manera "más real" porque te mostraba que hasta la cosa más rota puede tener un brillo único y diferente, pero que solo si te tomas el tiempo de apreciarlo bien, te das cuenta de lo especial que es.
Él/ella era como un Ave fénix, consumiéndose por su propio fuego y volviendo a nacer entre las cenizas más sabio, más fuerte y trayendo con él/ella la esperanza que tanto pensé que había dejado de existir en mi y aunque la esperanza según los griegos "era un castigo" al igual que la desdicha, el desamor y el sufrimiento, ella/él con su simple manera de ser me daba esperanzas porque me hacía creer que en algún momento yo podría llegar a conseguir ese brillo aunque sea de una manera distinta, me hacía sentir esperanzadx y además me hacía creer que en algún rinconcito de mí, está ese brillo que aún no consigo pero que siempre he anhelado.- Soff 🦋.