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DEREK HALE

"— ¿Que se supone que significa lo que acaba de pasar?

Pregunté tratando de no desviar la mirada y verla fijamente.

— ¿A qué te refieres con exactitud?

Pregunto levantándose para desatar mis piernas.

— A nosotros, ¿Que pasará ahora?

Ella no respondió al instante primero termino de desatar mis piernas y luego se encamino a dónde los cintos que aún estaban en mis manos.

— Tu te metas a bañar..."

Me abrace a mi mismo mientras sentía que algo dentro de mi dolía tan profundo, la falta de aire y la necesidad de borrar lo ocurrido me estaba matando.

"si quieres que esto se vuelva a repetir está bien, por mi te ayudo siempre que quieras"

— Y-yo no, yo no q-que...ría.

Los sollozos por fin se me escparon y el dolor en mi pecho aumentaba.

"¿A qué te refieres con exactitud?"

— Estúpido, estúpido, debiste detenerla, debiste hacerla parar.

El sabor a sal me llegó a los labios y solo pude abrazarme más, no quería volver a salir de aquí, no la quería cercas.

"le dirás lo que te calienta"

— Que mi cuerpo haya reaccionado no significa que me gustó.

"me ocuparé de una charla pendiente"

— Solo me uti-ilizaste, t-te querías distraer conmigo, c-con...migo, me uti-uti...

"no te entregues a él si no te sientes listo"

— No estaba listo y me entregué a ti, de una u otra forma me entregué a ti.

Continúe llorando, no podía creer lo que hice, lo que permití que ella me hiciera.

Cuando acordé tenía unos brazos a mi alrededor y el agua de la ducha ya no estaba aunque si me daba en la espalda.

— ¿Derek?, ¿Derek?

No quería ver quién era, no podía identificar bien la voz por los sollozos que aún salían de mi sin poder contenerlos.

— Derek por favor, mírame, has algo, por favor, ¿Que tienes?

"listo", "te sientes listo", "no te entregues", "Malia, Allison y yo", "con exactitud", "siempre que quieras"

— ¿Derek?

Sentí como los brazos me dejaron de rodar y luego una toalla fue colocará en mi espalda y otra al frente, los brazos me volvieron a rodear y mi cuerpo fue levantado de apoco, no estaba listo para saber quién era el que me viera en este estado y francamente ya no me importaba.

Cuando sentí que me dejaría en la cama me aferre a él haciendo que el fuera quien se sentó en la cama y yo me mantenía en sus brazos siendo mi peso apoyado en sus piernas.

— ¡Derek ya llegué!

Levanté por fin la vista y pude ver esos ojos chocolatosos que me miraban con preocupación pura.

— ¿Scott?

Él me acaricio el cabello y siguió viéndome con clara preocupación.

— ¿Derek... Tu qué haces aquí?

Me volteo un poco y vi a Peter que ya tenía sus ojos brillando en azul eléctrico.

— Recién llegué.

Dijo y pude notar que Peter fruncia el ceño por lo cual decidí esconder de nuevo mi cara en el pecho de Scott que volvió a acariciar mi cabello.

— Claro, ¿Y me dirás qué ese olor a miedo, vergüenza y arrepentimiento no lo causarte tu?, ¿Que quieres que piense si llego y mi sobrino está entre tus brazos y tapado solo con toallas?

Me pegue más al pecho de Scott tratando de calmar los sollozos que comenzaban a llegar repentinamente.

— Piensa lo que quieras, pero yo no le hice nada, cuando llegue la única esencia que detecte fue la de Lydia y el reciente olor a semen.

Intenté dejar de llorar y me separé un poco de él para ver su rostro y sus ojos brillaban en rojo.

— ¿Y ahora me dirás qué mi sobrino tuvo sexo con Lydia cundo es claro que Derek es asexual?, En dado caso Lydia lo obligó.

Scott frunció el ceño y bajo la mirada a dónde yo estaba.

— ¿Derek que pasó?

Negué y volví a esconder mi rostro en su pecho, no quería hablar de eso, me dolía todo y sentía a mi lobo herido, todo mi interior estaba destrozado y solo quería llorar, quería hacerlo en verdad.

— ¿Derek?

Negué ante la voz de Peter y no pude evitar recordar cuando Lydia metió esa cosa en mi, mi cuerpo reaccionó sin oponerse pero yo no quería ni ver lo que estaba pasando por lo cual cerraba los ojos con cada movimiento, no quería que siguiera y cuando pasó esa cosa por mi miembro sentí como si algo me impidiera moverme, me sentía aterrado de lo que ocurría, se que Lydia ignoro mis lágrimas, se que no le importaba cuántas veces le dijera que no, para ella cada gemido decía lo contrario y fui un cobarde al no detenerla, tal vez en parte estaba culpando a Scott por dejar que Lydia me hiciera lo que hizo pero él no tenía la culpa, si estaba aquí era por algo y yo lo había traición y me traiciones a mi mismo de paso.

— Llamaré a Ly...

— ¡No!, Por favor no, no, no.

Dije y comencé a llorar de nuevo, podía sentir mis ojos arder y como las lágrimas cada vez eran menos y el dolor de cabeza se comenzaba a apoderar, tanto llorar me estaba agotando y no sabía cómo parar de hacerlo.

— Está bien Derek, no la llamaremos.

"esto se vuelva a repetir"

La voz de Lydia volvió a resonar en mi cabeza y su mirada fija intentando leerme, comencé a sentir que el aire me faltaba.

— Está entrando en pánico.

Dijo Peter y de ahí en más solo recuerdo que desperté en la cama de la planta de abajo con ropa deportiva ya puesta y a mi lado estaba Scott viéndome con preocupación mientras que Peter me observaba con seriedad.

— ¿Nos dirás qué pasó?

Me senté en la cama y baje la mirada al suelo que ahora parecía lo más interesante.

— ¿Derek que es lo que Lydia y tú hicieron?

Mire a Scott suplicante para que no pidiera una respuesta a algo que no quería y ni estaba listo para contar, ¿Que le diría?, "Hey Scott, adivina qué, Lydia estuvo aquí, me amarró de manos y pies para luego con objetos que tomo de Erica e Isaac me comenzó hacer toda clase de cosas que me incomodaron y me hicieron sentir una mierda, pero adivina qué, llegué a tener mi primer orgasmo y mi virginidad se fue gracias a una liga y un envase de un producto de maquillaje", claro que no le diría eso.

Pero a juzgar por la cara que pusieron ambos no lo había pensado solamente.

— ¿Scott yo...?

Continuará...

20-04-22

CachorrosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora