𝑬𝒍 𝒅𝒊𝒍𝒆𝒎𝒂 𝒅𝒆𝒍 𝒔𝒆𝒙𝒐 • [ ᴋᴏᴏᴋᴛᴀᴇ ]

02. Encuentro

Las lágrimas abandonaban agresivamente sus ojos, trataba de enjugarlas con torpeza con las mangas de su camiseta pero era imposible detenerlas en ese momento. El dolor en su pecho era tan insoportable, tanto que sentía que de seguir así le daría algún tipo de infarto apenas hiciera un mínimo esfuerzo.

Luego de haber logrado calmar su llanto en los pasillos de la universidad lo único que pudo hacer fue abandonar la institución sin siquiera avisar de su salida a sus amigos (Jeonghan y JiSu), por lo que ahora se encontraba de vuelta en su departamento, abrazaba con fuerza la almohada de su cama mientras lloraba a mares entre esta. ¿Que más podía hacer? Se sentía como la mierda en ese mismo instante. Lo peor de todo era que no era la primera vez que pasaba por ello, sin embargo por alguna razón en esta ocasión el dolor era más fuerte.

Jimin lo había marcado mucho.

¿Pero cómo no hacerlo? Prácticamente se había enamorado de Park Jimin a los quince años (eso sin contar que se conocían desde los once), el amor que sentía por el era demasiado, y siempre lo había visto como el mejor chico del mundo, era completamente lógico que se sintiera de esta forma.

Tan miserable, tan poca cosa.

—Supongo que nunca seré suficiente para ti, ¿no es así?—murmuró para sí mismo mientras sollozaba y se aferraba con fuerza a su almohada.

¿Cómo superar su amor por Jimin?

Habiéndose conocido a la edad de once cortos años habían creado un lazo muy fuerte, siendo el rubio quien dio el primer paso a la hora de iniciar su amistad con el pelinegro. Taehyung recordaba vagamente que en ese tiempo era bastante arisco y tímido, por lo que siempre tuvo problemas para entablar una conversación, pero el no tenía la culpa, simplemente tenía miedo de cada una de las personas que se le acercaban.

No podía confiar en nadie más del mundo después de haber pasado por tanta mierda.

Siempre prefirió estar solo y mostrar poca empatía con quienes lo rodeaban para no ser lastimado, sin embargo Jimin se acercó pese a ello, le extendió su mano mientras le mostraba una cálida sonrisa y le preguntaba de forma tierna: ¿quieres ser mi amigo?

En ese momento Taehyung tuvo mucho miedo, pero poco a poco el rubio supo ganarse su confianza, alentandolo a hablar más, a jugar juntos en el parque o a hacer travesuras en la escuela, todo aquello en conjunto hizo que pronto se volvieran inseparables, que sin darse cuenta terminó por enamorarse de Park Jimin, cuando fue conciente de ello ya había cumplido los quince años.

Pudo darse cuenta en ese entonces de lo enamorado que estaba, que no era simple amistad lo que sentía por el rubio, que aquellos suspiros que abandonaban sus labios al verlo sonreír no eran simple casualidad. Le gustaba un hombre, le gustaba Park Jimin.

Pero nuevamente volvía a ser espectador de como el rubio se enamoraba de alguien más, como todos los años pasados, simplemente miraría desde la distancia a su mejor amigo profesarle amor a alguien ajeno a él.

¿Cuánto más tiempo tendría que seguir así? Lo sabía, sabía perfectamente que nada de eso era culpa de Jimin, a final de cuentas quien había decidido enamorarse era el.—Jodida mierda.—espetó mientras se acurrucaba entre las mantas desarregladas de su cama, abrazándose esta vez a si mismo en un afán de darse consuelo.