Severus Snape tenia en claro que no siempre iba a ser querido como un día su madre le dijo, pero eso nunca le llegó a molestar las actitudes que tenían hacia el, en cambio le agradaba con el tiempo se dio cuenta que la soledad eran mejor que los ami...
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Lo único que se podía oír en la pequeña fiesta de casino eran las apuestas, varios se habían retirado de ellas pero no abandonaron la fiesta.
Severus sonrió al ver el papel frente a el, lo que tenían planeado iba mejor de lo que esperaba.
Aunque Lily no colaboro mucho, los resultados se estaban haciendo presentes y con ello las miradas de los amigos de Severus. Pronto llegaría el momento que estaban esperando.
-Hola, Sevy no había tenido tiempo de saludarte como se debe.-Severus escucho una voz detrás de él y volteo rápidamente visualizando mejor a Tatiana.
-Hola Tatiana, ¿disfrutas de la fiesta?
-Es muy entretenido jugar y ver como otros pierden, además los bocadillos están exquisitos.
-Sabía que los bocadillos te gustarían, cuando Narcissa los trajo esta mañana a la hora de probarlos me recordaron a tus gustos de alguna manera.-Confesó el Snape apartando la mirada y enfocarla en un punto fijo.
Tatiana solo sintió un leve calor en sus mejillas que la hizo sentir nerviosa.-Pues no te equivocaste, esta mañana nos escapamos del colegio para ir a comprar los vestidos y trajes con los chicos y a la hora de entrar a la joyería vi una pieza muy hermosa.
Severus poso de nuevo su mirada en Tatiana.
-Y sinceramente estaba dudando comprarla, pero sabía que yo no me la pondría casi nunca no es tanto mi estilo que digamos... Así que decidí comprarla pero para ti.-Dijo Tatiana entregándole una caja de terciopelo negro de un tamaño mediado.
-No era necesario Tatiana, yo no te compre nada ahora me siento mal.
-Mi regalo no es con la intención de hacerte sentir mal Sevy, yo tampoco tenía planeado comprarlo pero en verdad es hermoso y me recordó de un modo a ti ¿por qué no la miras para que me des tu opinión?
Severus le hizo caso a la indicación de Tatiana, al ver la pieza frente a el su boca se abrió ligeramente por la sorpresa.
-Hay no te gustó, si quieres la puedo cambiar por alguna de tu agrado.-Dijo Tatiana apretando la mirada nerviosa y avergonzada.
-No, no es eso Tati, es muy hermoso más de lo que se lo que se ve, solo no sé qué decir.-Tatiana se sonrojo al nuevo apodo que le puso el Snape.
-Un gracias es suficiente, de verdad no es necesario un discurso y cosas de ese tipo.-Murmuró la Rosier mirando con ilusión al Snape, que seguía mirando la joya.
-Es que esto merece más que un gracias, Tati es una hermosa pieza y muy especial tal parece.
-¿Cómo que especial? No entiendo.
-Miras estas marcas, Dan indicios que es la única de su clase y el joyero o joyero que la fabricó esmero mucho en ella, me pregunto por no la habían comprado antes, si es hermosa.
