Siempre, siempre

CAPÍTULO 14

Hola, solo quería  aclarar que en mi historia todos los reinos son estables y Asgard tiene buena relación con todos ellos. La apariencia de los personajes perteneciente a cualquiera de los reinos mencionados es humanoide. En el caso de gigantes serían de apariencia humana, pero más grandes, los jotun no serían azules, etc, aunque ustedes pueden imaginarlos como quieran, sólo aclaro eso :)

Also, también lamento mucho la tardanza, mi compu se dañó y se me ha dificultado mucho escribir cómodamente :c aún así agradezco mucho sus comentarios y que sigan leyendo, espero les guste el capítulo 💕

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Habían pasado tres meses desde que Loki había salido de Asgard con Balder y Sigyn. Luego de una noche apasionada con una hermosa dama de piel morena, Loki despertaba solo en su cama una vez más, como siempre. Había descubierto rápidamente que no le gustaba dormir con sus amantes después del sexo; no que hubiese tenido muchos hasta ese entonces, solamente dos, pero el primero fue suficiente para demostrarle lo mucho que apreciaba tener la cama para él solo. Y si algo le enseñó esa segunda amante es que Loki, definitivamente, no servía para tener sexo casual.

No juzgaba la promiscuidad, y definitivamente no juzgaba a Thor por ser capaz de encontrar placer en cualquiera que se le hiciera atractivo, pero Loki era diferente a él en tantos aspectos que no resultaba sorprendente que, incluso en eso, también difirieran sus preferencias. Loki probó una segunda vez con esa chica que se le hizo atractiva y, aunque físicamente la pasó bien, no encontró satisfacción en intimar con alguien que a final de cuentas no le importaba. Loki necesitaba mucho más para disfrutar por completo el sexo, incluso para dormir juntos luego de éste; ese peso desnudo y sudado a su lado, queriendo abrazarlo el resto de la noche, lo hacía sentir asfixiado, y eso lo tomó bastante por sorpresa. Dormir entre los brazos de Thor era una de sus partes favoritas, así que le impactó bastante su incomodidad cuando su primer amante quiso hacer lo mismo y, dos minutos después, Loki se sintió en la incómoda obligación de pedirle que se fuera. No quería ser cruel, pero no podría dormir así, y sabía que la mañana sería incluso más incómoda. Por lo menos la segunda vez, ya consciente de su preferencia, dejó las cosas bien claras desde el inicio, y cuando todo acabó, la joven se fue luego de un breve beso de despedida.

Loki no estaba interesado en conseguir más amantes, pero apreciaba lo que esas experiencias le aportaron, y todo lo que pudo aprender de sí mismo experimentando el sexo lejos de Thor.

El primer amante... sí, Loki lo admitía, había sido un placer culposo. Una semana luego de comenzar su viaje, mientras hacían una parada en una taberna, Loki se fijó en este hombre que no había parado de mirarlo toda la noche. Era grande, rubio y apuesto, y la mirada penetrante de esos ojos azules lo hacían estremecer de pies a cabeza por obvias razones: le recordaba a Thor. La taberna tenía habitaciones en el segundo piso, y sin pensarlo mucho Loki le propuso a su primo y a su amiga dormir ahí esa noche, a lo que ellos accedieron, ya que la estaban pasando tan bien. Loki se empinó dos copas de vino en un segundo, y acto seguido fue hacia donde estaba el hombre atractivo cuyo nombre Loki olvidó al día siguiente.

Ese hombre sabía muy bien lo que hacía, Loki lo admitía, pero el sentimiento no estaba ahí, y Loki se preguntaba si había sido un error escoger a alguien remotamente similar a su hermano en su primer encuentro de sexo casual. Aún así, en varios momentos durante la noche se permitió perderse en la fantasía, y aunque el tacto, la voz y los olores eran diferentes, no le impidió alcanzar el orgasmo dos veces. El chico no paraba de susurrar halagos dulces en su oído en contraste con sus embestidas fuertes, y Loki disfrutó eso, aunque no lo suficiente como para repetir con él, o cualquier otro desconocido, más adelante.