NOTA LA HISTORIA SEGUIRÁ CON "MIRADA BALSÁMICA - CONTINUACIÓN", PUES LA PRESENTE PASO LOS 200 APARTADOS (CANTIDAD MÁXIMA DE PARTES A PUBLICAR POR HISTORIA)
Tn, es una joven que se encuentra en el último año de medicina, por lo que iniciará sus práct...
Al dia siguiente, Satis y Anhur llevaron a Mia con Galena, quien le haría los chequeo médicos, concluyendo en...
Galena: Tiene amnesia retrograda, pero los demás procesos cognitivos se encuentran bien, lo que me preocupa es que aun no puedo identificar lo que causo tu amnesia (quedando pensativa).
Mia: Pero ¿cree que pueda recuperarla?
Galena: Claro, pero de todas maneras hay que esperar a los otros exámenes. Mientras tanto, puedes estar en el albergue o en la mansión.
Satis: ¿Qué te gustaría?, para nosotros no hay problema... (pero luego es interrumpida por su hermano)
Anhur: Considero que vivas en la mansión pues tu estado es de recuperación.
Mia: (Permaneciendo en silencio por unos segundos) En verdad, estoy muy agradecida con ustedes, no me conocen y hacen esto por mi, me gustaría retribuir lo que hacen por mi.
Satis: ¿Qué quieres decir?
Mia: Quiero poder ayudarlos en su albergue, claro que tomare la sugerencia de Anhur, de quedarme a dormir en la mansión.
Galena: Me parece buena idea, si mantienes tu mente ocupada interactuando con otras personas puede ser que puedas recordar tu pasado, pues si te quedarás en una habitación sin hacer nada, te centrarías en tratar de recordar y eso te tensionaría más, no siendo beneficioso para el tratamiento.
Anhur: Esta bien, si Galena aprueba ello, entonces vivirás en la mansión e iras a apoyar al albergue.
Los tres jóvenes agradecieron a Galena, y ya estando fuera del albergue Satis decide ir a la universidad, por lo que se despide. Quedando Anhur y Mia a solas.
Anhur: Bueno, te mostraré las instalaciones del albergue, para que te vayas familiarizando.
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Mia: Gracias, Anhur. (Después de unos segundos en silencio) Te puedo hacer una pregunta?
Anhur: Claro, ¿Cuál?
Mia: ¿Cómo me encontraste o mejor dicho cómo me rescataste?
Anhur: ¿Eh?
El joven Loannis no sabía como contestar pues no quería que la joven conociera la situación desagradable en que la expusieron ante él.
Mia: No recuerdo nada, solo que dos hombres me metieron a un cuarto oscuro y nada más, todo es oscuridad.
Anhur: Bueno..., lo único que te puedo decir es que estabas inconsciente. No trates de recordar cosas desagradables, ahora nos debemos concentrar en tu recuperación, ¿ok? (sonriéndole)
Mia: (Devolviendo la sonrisa) Esta bien.
En ese instante que estaban ingresando a un nuevo ambiente, dos pequeños se pusieron frente a ellos mirándolos atentamente.
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Anhur: Que sorpresa niños, ¿Cómo están?
Ambos niños: ¡¡Anhur!! (abrazándolo)
Niña: ¿Quién es?
Niño: ¿Es tu novia? (acercándose a Mía)
Anhur: (Sonrojándose) ¿Eh? No, es una amiga.
Niña: ¿Y porque te pones rojo?
Niño: Si, te has puesto rojo. Cuando Ziyad ve a Satis pone cara de tonto como la tuya.
Mia: (Riéndose) Jajaja, disculpen que me ria. Son muy simpáticos.
Anhur: No les hagas caso, y disculpa sus comentarios, ahora sé quien es la mala influencia (pensando en Ziyad). Te presento a los mellizos, ¿niños?, preséntense.
Niña: (Sacudiendo su pequeño vestido para mostrarse presentable) Mi nombre es Aure, tengo seis años.
Niño: (Mostrando una postura marcial) Mi nombre es Athan y también tengo seis años.
Mia: Mi nombre es Mía, un gusto en conocerlos (sonriendo amablemente).
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Los niños la quedaron contemplando, y sonrieron para luego entrar corriendo al salón donde estaban otros niños y adolescentes que estaban haciendo sus deberes académicos.
Mellizos: ¡¡OIGAN, ANHUR TRAJO A SU NOVIA Y ES MUY BONITAA!!
Anhur: ¡¡MOCOSOS DEL DEMONIO!!
En ese momento, aparece detrás de ellos Ziyad...
Ziyad: Aja, ¿no que no? (sonriendo picaramente). Anhur enséñame tus tácticas para que Satis me haga caso.
Anhur: ¿Y tu que haces aquí?
Ziyad: ¿Cómo que qué hago? Vine a jugar con los niños, les prometí jugar basket con ellos. Así que, con su permiso, voy con los mocosos, jejeje, y no te olvides que me debes las clases de conquista.
El joven Loannis se sentía tan avergonzado que ya ni se atrevía a hablar pues ya no sabia que decir, y al voltear a ver a la joven que lo acompañaba, se percata que ésta se había alejado pues fue a atender un niño que le pedía ayuda con su rompecabezas.
Anhur: (Pensando para si) Uf, espero no haya escuchado las barbaridades de Ziyad.
Después de un par de minutos, empieza a sonreír plácidamente pues el panorama que contemplaba era hermoso y cautivante para él.
