Las cosas van un poco rápido

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Desde que me liberaron solo tuve media semana para descansar, Howard tomó la decisión de obligarme a retomar mis estudios

—¿Pero porque?—pregunte irritada

—no estarás en esta casa sin hacer nada el mundo cambia y necesitas educación para conseguir dinero

—¿Y si no quiero estudiar?

—no vivirás a costas de mi fortuna

—bien entonces no estudiaré—me levanté y Howard se interpuso en mi camino—quitate

—¿A dónde piensas ir sin dinero?

—ya veré no necesito que me mantengas puedo trabajar

—¡Por qué no pones de tu parte! Trató de que tú futuro sea brillante te doy todo tienes lo que otros quisieran tener

—si fuera cierto lo que dices mi seguridad,mi integridad jamás hubieran sido violadas.Quieres que siga con mi vida cómo si nada fingiendo que aquellos años no pasaron ¿Cómo puedes ser así de despiadado?

—falle pero fue una situación que se salió de mi control,te quiero mucho hija se que no merecías estar encerrada y te pido perdón—me abrazo,mis manos temblaron Howard quería hacer las pases—vamos necesito un abrazo de mi pequeña—lo abracé sin estar tan convencida—quiero pedirte perdón,se que no eh sido el padre que mereces

—¿Porqué actúas así?

—Maria me hizo entender—suspire—ella te agradará si le das la oportunidad, quiero que seamos una familia

—aún no siento que esté lista para regresar y tratar de ser normal

—tienes que continuar con tu vida—.

Lunes en la mañana:

María y mi padre me dejaron en la escuela por ser mi primer día, cuando entre no estaba muy nerviosa si no atenta en guardia.

Ya habían arreglado todo antes de mi liberación, tenía los libros, útiles y uniformes.

—Hola—se acercó una mujer jóven

—hola

—tu debes ser Evelyn Stark te enseñaré nuestro hermoso colegio—ambas comenzamos a caminar a la par—bienvenida al colegio Masón—.

Cómo era de esperarse era una escuela para la clase alta Neoyorquina y quién me daba el recorrido era Elisa

—como te darás cuenta todos son hijos  familiares o de personas importantes y poderosas  cómo tú pero próximamente empezarán un programa para becados,solo aquellos genios que tuvieron la desgracia de nacer pobres lograrán entrar

—bien ¿Y mi clase?—pregunte para evitar seguir escuchando la forma despectiva en la que hablaba

—estas en la clase I-1 ten tu horario,te llevaré al salón—dijo amable.

Me dejó en el salón la clase aún no iniciaba todos los que estaban presentes me miraron

—tu debes ser la nueva—hablo un chico pelirrojo—¿Quién es tu padre?—con solo escuchar su pregunta me dí cuenta que estos niños mimados serían muy buenos amigos míos o lo peor que puede pasarme en la vida

—Howard Stark—la mayoría de muchachos refaccionaron al escuchar su nombre no era de sorprenderse la reputación que tenía mi padre.

Un inventor que se volvió millonario y lo más destacable,lo hermosas que eran las mujeres con las que tenía amoríos

—tu padre es mi modelo a seguir—comento otro

—como sea ¿Tu nombre?—pregunto de nuevo el pelirrojo

—Evelyn ¿El tuyo?

—Jack Roideach—.

El día transcurrió en las clases y las chicas me aceptaron rápido en su círculo social.
Rápido me enteré que Jack era hijo de padres escosés,su familia tenía una enorme franquicia de una exitosa cervecería en Escosia y que no hace mucho llegaron con su cerveza a Estados Unidos.

Las clases son muy pero muy aburridas no sé si será el tono bajo de su voz y lo sofisticado que eran que después de rato se volvía aburrido escucharlos.

—¿señorita Stark la aburro?—me preguntó el maestro de matemáticas y solamente había bostezo,todos me miraron

—solo fue en bostezo—no le veía lo malo en eso

—aqui no importa lo poderoso que su padre sea

—por favor ahorrese el discurso y continúe con su clase para eso mí papá le paga a la escuela no para que me regañe por un simple e insignificante bostezo—el profesor se molestó dejo su libro en su escritorio y sacó una regla de un metro de madera.

El loco quería golpearme

—de pie Stark—me negué,todos me miraron como si estuviera haciendo la peor ofensa,se tomó la delicadeza de ir a mi lugar y sacarme a la fuerza de mi lugar y ponerme de pie—en está escuela ni tu padre,ni sus padres mandan—.

Alzó su mano para agarrar Impulso y la regla se los juro que fue callendo en cámara lenta,sin pensarlo dos veces logré detenerla sin fallar y firmé.

Y como si mí cuerpo fuera tomado por alguien más recuerdo mirar al profesor y parpadear y ver qué el estaba tumbado en el suelo con su nariz rota y mis compañeros mirando con asombro.

Fue muy confuso y muy rápido pronto llegó una secretaria que al ver al profesor lo auxilio.Primer día de clases y ya me había metido en problemas.

Hay parte dos de esta lo subire pronto,

El mejor papáDonde viven las historias. Descúbrelo ahora