Capitulo 22

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Helena, entro al baño ocultándose atrás de la puerta. Es un escondite bastante estúpido pero con la fe de por medio todo se puede, pero eso no evita que sienta miedo, Helena recordó en sus 17, cuando escondía sus novios detrás de sus padres, ¿Será que este es el karma?, a ver ocultado muchas veces a sus ex novios dentro de su casa y ver a los ojos a sus padres y negar que uno de ellos estaba dentro de su recamara.

[...]

Henry soltó un suspiro rezando a todos los dioses, con el pulso nervioso abrió la puerta encontrándose con su ama madre totalmente enojada, la vena de su frente resaltaba. Sin decir ninguna palabra entro a la habitación empujandolo en su hombro.

–Quiero que me explique ¿que haces aquí?– cuestionó sería

Henry trato de no apartar la mirada, sabía que su madre se daría cuenta sin mucho esfuerzo

–Estoy...tratando de sobrevivir solo– trago saliva mirando a su madre

–¿Con una mujer?– cuestionó sarcástica

Henry sintió desmayarse de los nervios, escucho los latidos del corazón en sus oídos y su respiración volviendose más pesada

–Porsupuesto que no– nego frunciendo el ceño

– No me mientas Williams– hablo con un tono bastante enojado– Sabes que no puedes engañarme, puedes hacer lo que tú quieras en tu vida, no me voy a meter.– soltó un suspiro guardando la calma– Pero no voy a permitir que gaste mi dinero que no sea en tu educación

– pero, no estoy gastando tu dinero– hablo en tono bajo tratando se no hacer enojar más a su madre

– Entonces ¡¿que es esto?!– señalo a su alrededor

–Recuerdas  a Richard Harper

– si, si, si, ¿Él que tiene que ver en todo esto?– sin bajar su tono duro cuestionó

– Me debía un favor y decidí cobrarlo, su padre es dueño de este hotel y él le hablo de mi, dijo que podía pasar el tiempo que quería aquí– miró a su madre con preocupación

Marianne soltó un suspiro, acaricio su frente tratando de entender a su hijo. Ya no es un niño, es un joven mayor que tiene derecho de tomar sus decisiones como a él se le de la gana pero como madre aún tiene el deber de guiar a su hijo para que no cometa errores que en un futuro estará tan arrepentido. En una parte de ella está tranquila, sabe que educó a su hijo para un hombre de bien.

– Sabes que te amo, eres mi hijo, no vine aquí para llevarte de vuelta a casa pero me preocupa que no llegues a dormir, tu padre ya había contratado un detective

–¿Que?– frunció el ceño

– ya sabes cómo es de paranoico– hizo un gesto irritante

– Pero fue a él que le pedí permiso para salir, creí que él sabía a dónde estaría

– Pues fíjate que no somos evidentes para saber que estás con tu noviecita– volteo a ver a la puerta del baño– Y espero algún día conocerla o al menos que de la cara

– Mamá no hay nadie en el baño

–¿Ah no?– volteó hacia Henry con una ceja levantada, decidida camino directo hacia la puerta del baño

– Mamá, no,no,no hay nadie– trato de llamar su atención

Marianne hizo caso omiso. Abrió la puerta del baño dejando que la puerta chocará con la pared. Frunció el ceño al no ver a nadie, aunque la luz estaba apagada, se podía apreciar el lugar por la luz del sol. Volvió a ver a su hijo.

𝑴𝒊 𝒂𝒍𝒖𝒎𝒏𝒐:[𝙷𝚎𝚗𝚛𝚢 𝙲𝚊𝚟𝚒𝚕𝚕]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora