20 Años

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Realmente no me esperaba esto, era el día de mi cumpleaños, como siempre recibí miles de regalos pero estaba esperando especialmente el de mi adorado esposo, ese que terminaría de arreglar mi día. Tuve muchos tratos que firmar y reclamos que solucionar, pero no era algo complejo.

Terminé mi trabajo antes de lo esperado así que fui a la mesa para poder cenar con toda la familia como usualmente ya no lo podía hacer por mis obligaciones, al llegar todos (incluso Wen Chao y Jiang Cheng) estaban ahí, noté un pastel en la mitad de la mesa y sonreí con sinceridad, amaba esos regalos de parte de mi familia.

-A-Xian te preparamos esta pequeña sorpresa entre todos, sabemos que normalmente no tienes tiempo para estar con nosotros por los deberes de la secta así que pensamos que sería bueno una reunión no tan complicada.

-Gracias tío, está perfecto.

Lan Zhan se acercó a mí y me dio un corto beso en los labios sonriendo, amaba cuando esos delgados labios se curvan de esa manera tan simple pero que al mismo tiempo me podía dejar sin aliento, A-Li empezó a aplaudir gritando un "¡eso!" nosotros ya acostumbrados a sus típicas barras cada vez que nos veía besarnos solo suspiramos agitando la cabeza.

Me senté y obviamente Lan Zhan estaba a mi lado, antes de comer el pastel debíamos cenar por lo que la comida fue puesta en su lugar y dejando de lado las formalidades en la mesa hablamos hasta no poder más, el pastel por fin pudo ser partido en pedazos, era delicioso, un suave sabor a vainilla que empalaga todos mis sentidos.

No pasó mucho antes de que en medio de nuestra pequeña reunión Lan Zhan llamase la atención de todos, lo miramos esperando a que hable, sus mejillas se sonrojaron, se me hizo algo adorable, poco después respiró ondo y se paró de su lugar.

-Familia tengo un anuncio que hacer...

-¿Si A-Ji?-dijo mi madre esperando que continúe, todos estábamos esperándolo a decir verdad-

-Um... bueno hace mucho tiempo deben estar esperando esta noticia pero... estoy en cinta.

Mis ojos se abrieron y dejé caer el plato que tenía en manos pero a nadie más que a Lan Zhan pareció importarle, me levanté y caminé hacia él envolviendolo en mis brazos con cuidado, lágrimas escaparon de mis ojos sin saber qué decir solo aferrandome a esa linda noticia que cambió mi vida por completo, caí de rodillas mirando el aún plano vientre de mi Omega y me acerqué con cuidado dando un suave beso.

-¿Es enserio Lan Zhan...?

-Si... hice tres pruebas y todas son positivas...

Todos salieron del trance y empezaron a felicitarnos mientras yo aún no podía levantarme del piso, apoyé la frente en el piso sintiéndome derrotado, sonreí y me mantuve algunos minutos en silencio, todos esperaban mi reacción, cuando ya todas mis ideas estaban en orden me paré en mi lugar y haciendo una reverencia respiré tratando de deshacer el nudo en mi garganta.

-Desde que te conocí siempre has sido una luz en mi vida Lan Zhan, y ahora estoy más que seguro de ello al enterarme de este hermoso regalo, prometo amarte a ti y nuestro hijo hasta que mi vida acabe e incluso más porque son lo mejor que me ha pasado...

No pude más y empecé a llorar aún con la cabeza baja en mi reverencia, las manos de jade de Lan Zhan fueron las que terminaron con mi inclinación, me abrazó con cariño y supe que estaba seguro en esos delicados brazos, supe que a partir de ese momento mi vida sería diferente, y supe que nunca me arrepentiré de ello. Y como me lo esperaba; la noticia se esparció por todo Yunmeng en cuestión de segundos.

Lan Zhan estaba algo cansado por lo que nos fuimos a dormir después de despedirnos de las pocas personas a las que no les daba miedo como para tener hablar cerca mío. En nuestra habitación me cambié bajo la mirada de mi Omega que estaba en el tocador quitando los accesorios de su cabello trenzado.

Desprecio Y Obligación Donde viven las historias. Descúbrelo ahora