The Prince And The Hunter (WonHui)

𝐗𝐗𝐈. 𝐁𝐮𝐫𝐢𝐞𝐝 𝐢𝐧 𝐭𝐡𝐞 𝐒𝐧𝐨𝐰

Llegaron lo más rápido que sus piernas pudieron llevarlos de vuelta a la cabaña más grande de los mineros.

Al estar más cerca del borde que separaba su bosque y pueblo del Bosque Negro, ellos sintieron la conmoción de la explosión con más fuerza, pero no habían visto el humo o el fuego que se alzaba al cielo.

Hasta que salieron y ahí fue donde el príncipe y el cazador los encontraron.

Jihoon se ponía de puntas, apenas apreciando la columna de humo que Soonyoung vio enseguida y apuntó con su índice. Hansol corrió hacia los recién llegados mientras que Chan se subía a un árbol con la esperanza de ver mejor lo que sucedía del otro lado de su muro natural de protección.

—¿Qué pasó? ¿Saben algo? —preguntó el joven al ver a los hombres llegando.

Wonwoo y Junhui se detuvieron, con el sudor escurriendo de sus sienes a pesar del frío y con la respiración agitada porque se habían apurado ante la inminencia de que algo muy malo estaba pasando en Yabbay.

—¿Es su pueblo, verdad? —Hansol les preguntó y ambos asintieron, con gestos preocupados.

—¿Dónde está Josh-

Pero Jihoon no terminó su pregunta porque una ráfaga de viento azul sopló entre ellos que se cubrieron con los antebrazos.

Cuando la magia se disipó, Joshua y Seokmin aparecieron, con rostros demasiado serios y posturas graves.

—Jeonghan.

Fue lo único que dijo Joshua, caminando dentro de la cabaña con aire determinado.

El resto lo miró sin entender, para luego centrar su atención en Seokmin, que se quitó el sombrero y lanzó un suspiro pesado.

—Tenemos que ir al pueblo de Yabbay, Jeonghan se ha vuelto loco.

—¿Jeonghan hizo eso? —Jihoon apuntó a la columna de humo y fuego, con el ceño fruncido.

—Sí... —respondió Junhui, con una mano en el pecho y el rostro lleno de angustia. Estaba seguro de que eso era obra del rey tirano.

Wonwoo lo miró con preocupación, pero no pudo acercarse a tratar de darle apoyo o tranquilizarlo porque Joshua salió de la cabaña junto a alguien que no esperaba ver despierto tan rápido.

—¿Hao?

El cazador observó como su amigo caminaba detrás del mago. Tenía la cabeza agachada y aún se veía muy frágil, pero evidentemente mejor a cuando llegó. Se estaba recuperando muy rápido.

Al escuchar la voz profunda de su amigo, el hombre más joven alzó la mirada. Algo se había roto en él y Wonwoo fue consciente de eso porque conocía a Minghao muy bien.

¿Qué demonios le había hecho Jeonghan?

Se acercó y lo abrazó, sintiendo el cuerpo delgado casi sucumbir entre sus brazos. Miró por encima de su hombro hacia Joshua, con cierto reproche.

—¿Fuiste a despertarlo?

El gesto del mayor seguía estoico.

—Necesitamos toda la ayuda, y su magia es la que más se requiere en esta situación. Habrá muchos heridos.

Wonwoo frunció el ceño con gesto molesto.

—¿Joshua? ¿Puedes explicar qué está pasando? —Jihoon fue con el mago que sacó una bolsa con cenizas, para empezar a esparcirlas en el suelo en una figura circular.

—Entren todos en el círculo, iremos a Yabbay a evacuar a todos, Jeonghan perdió la cordura y la paciencia. Quiere destruir todo. Nos quiere hacer salir de la madriguera y eso haremos —explicó, terminando el círculo y sacudiendo sus manos.