REENCONTRÁNDOSE A SÍ MISMO

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Cocinando Al Amor
Capítulo 36

-Albert, quería estar sólo eran muchos sentimientos encontrados, sentía demasiada culpa, pensó qué él no sería suficiente, que quizás nunca sería un buen padre para sus hijos, sí es qué en algún momento decidiera tenerlos. Por eso y más les pidió a él Clan White y Ardlays, poder ir sólo a Perú a reencontrarse así mismo y buscar su propósito en la vida.

Su Padre, se negó rotundamente a aquella petición, pero el joven estaba resuelto e hizo caso omiso y se marchó.

Albert, cual joven aventurero, sólo llevó lo indispensable, y decidió irse a rite.

-Albert, le mando un mensaje a Candy diciéndole, que el se haría cargo de los asuntos de Perú, le pedía que se quedará  en México pues ella no podía ser de mucha ayuda.

Candy, se molestó en demasía al leer ese mensaje y decidió ir al país Sudaméricano, ka rubia arreglo unas cuantas cosas, y se dispuso a partir rumbo al Aeropuerto con Destino a  Perú. Marco desde su dispositivo móvil al portero avisándole de su llegada.

La rubia en un par de horas llegaba al Magnolia, y no encontró a Albert por ningún lado, se preocupó por el si bien se habían dicho que se gustaban hubo besos y muchas caricias, la realidad era que nunca hubo la palabra -¿Quieres ser mi novia?-, eso la entristeció.

Mientras tanto Albert, continuaba su camino, algunas veces caminando, otras a rite,  siempre viendo la realidad de un país, las caras tristes  de niños que se encontraban en semáforos pidiendo dinero, el podía sentir el dolor como suyo. Cuando pasó la frontera de Chiapas a Guatemala se enfrentaba con un país super colorido, con grandes tradiciones gente cuya alegría era mayor a su tristeza, cuántas veces le prometió a Neil hacer un viaje juntos que les cambiará su vida, quizás no estaba Neil ahí, pero estaba él para hacerlo por los dos,  en el viaje a Centroamérica no todo fue malo, lo asaltaron tuvo que aprender a valerse por si mismo, tenía su arma de fuego que tenía cerca cuando dormía a la intemperie en alguna plaza pública.

Conoció jóvenes que solo pedían una oportunidad de mejorar su situación económica, y al cruzar platica con el rubio, les cambiaba el chip, cuantas veces deseo que su hermano viera que no todos los jóvenes eran afortunados, conoció una hermoso El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica, El Salvador, se dio cuenta que la gente no era mala, se hacía mala. Conoció la belleza de Panamá y ka alegría y el Encanto de de Colombia,  con sus Árepas,  Ecuador y llegó a Perú mucho más flaco, irreconocible, y sí  ahí la vío  en el umbral de aquel departamento, ella no estaba mejor que él.

Candy, para no preocupar a la familia, decía que Albert estaba con ella, ella hacía todo el trabajo de lis dos y logró avanzar  en varias cuestiones.

Cuando lo vío corrió a abrazarlo no le importó su olor a sudor, la suciedad, el estaba vivo y estaba bien, él rubio la abrazó llorando, por fin encontraba su lugar.

Continuará

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