Con los tragos que Idalid había consumido en la reunión con sus compañeros de trabajo, sabía que no debía conducir porque de ese modo se arriesgaría mucho. Por lo que, opto por pedir un servicio de taxi que la llevará a su domicilio, se despidió de sus compañeros para dirigirse a la salida del lugar y así poder llamar al servicio de taxi.
Caminaba fuera del lugar de un lado a otro, tratando de localizar a un taxi, teniendo varios resultados fallidos de esas llamadas. Y en aplicaciones obteniendo precios y tiempos bastantes elevados. Lo que, hizo que pensara en alguna otra alternativa y en lo que lo pensaba, se escuchó la puerta del lugar abrirse, dejando ver a su compañero de trabajo Liam con el que desde un inicio tuvo buena relación y comunicación.
Liam - ¿Lograste comunicarte con algún sitio de taxis? Preguntó con interés.
Idalid - En realidad no, ninguno me contesta y en las aplicaciones los precios no es algo que pueda pagar ahora. Esperaré un poco más y volveré a intentar. Dijo con desanimo
Liam - Bueno, yo estuve pensando desde que mencionaste que ibas a regresar a casa en algo. Pero no sé si es que tu quisieras escucharlo. Preguntó nervioso
Idalid - Puedes decírmelo. ¿En qué pensabas?
Liam - Tengo mi carro estacionado a pocas cuadras de aquí, no tome nada de alcohol en toda la noche. Puedo llevarte a tu casa si es que quieres o acercarte a ella. Dijo mirando directamente a los ojos de Idalid
Idalid - Te lo agradecería mucho, de verdad me gusta esa idea. Dijo alegrada
Liam - Bueno, en ese caso. Caminemos a dónde está mi carro. ¿Te parece?
Idalid - Si, claro. Dijo al comenzar a caminar con dirección al carro de Liam
Estando los dos dentro del carro de Liam, él prendió su aire acondicionado para calentar un poco el carro, dándole su chamarra a Idalid para que se cubriera con ella y de esa forma disminuir su frío.
Idalid - Sé que ya te agradecí, pero gracias por ofrecerte a llevarme a casa
Liam - No es nada, no queda lejos de donde yo vivo.
Idalid - Te recompensaré tu gran acto de bondad.
Liam - No es necesario, quería hacerlo y ya que no tome nada, creí que podías acceder.
Idalid - Sí, es por esa razón que no estoy manejando ahora. No sería lo mejor y si me percate de que no tomaste nada de alcohol. ¿Es por algo en particular?
Liam - No, es solo que no quería hacerlo hoy y tampoco lo hago muy a menudo. Me gusta bailar y disfrutar más así.
Idalid - Eso es bueno, también me gusta más no tomar tanto, pero supongo que estaba muy alegre por el nuevo lugar y el nuevo trabajo.
Liam - ¿De dónde eres en realidad? Si puedo preguntar
Idalid - Si, soy de los angeles. Pero vine acá por una oferta laboral, por solo unos meses. ¿Tú de dónde eres?
Liam - Nací y crecí en Canadá, aunque he viajado a algunos lugares, pero todavía no a los angeles. Tal vez, vaya a visitar tu casa por allá.
Idalid - Si, eso estaría muy bien. Te va a encantar seguro, puedo llevarte a conocer varios lugares. Dijo alegre
Liam - Eso me gustaría mucho y también yo podría enseñarte cosas buenas de aquí. Seguro que te pueden gustar mucho. Dijo al estacionarse fuera de la casa de Idalid
Idalid - Si, seguro que sí. Canadá es muy lindo, por lo poco que conozco. Gracias por traerme a salvo a mi casa, nos vemos mañana en el trabajo, conduce con cuidado. Dijo al despedirse de Liam y darle un beso en la mejilla.
Cuando Idalid bajo del carro, Liam espero a que entrara a su casa y después se dirigió a su casa. Feliz de poder haber llevado a Idalid, pues desde que comenzaron a trabajar juntos, sintió una buena conexión con ella y quería seguir conociéndola poco a poco. Al estar a pocos metros de su casa, escucho el sonido de un celular indicando que alguien llamaba, él estaba confundido ya que, así no sonaba su celular, lo buscó superficialmente por el carro para darse cuenta que a Idalid se le había olvidado su celular en el asiento.
No le dio mucha importancia y decidió que lo mejor sería guardarlo y regresarlo mañana, pero había una persona que llamaba con mucha insistencia por lo que, pensó que sería mejor contestar e indicarle a la persona, que Idalid había olvidado el celular pero que estaba bien y que mañana se lo regresaría.
Stephen - ¿Hola? ¿Idalid eres tú? Preguntó preocupado ya que, no había obtenido ningún mensaje de que había llegado a casa bien.
Liam - Hola, no soy Idalid. Soy Liam, un compañero de trabajo.
Stephen - ¿Dónde está ella? Puedes comunicarme con ella, por favor.
Liam - Me encantaría, pero ella olvido su teléfono en mi carro. Mañana en el trabajo se lo voy a regresar.
Stephen - ¿ella está bien? Preguntó con preocupación
Liam - Si, está muy bien. Lo sé porque yo la lleve a su casa, sana y salva. Había tomado un poco y me ofrecí a llevarla. ¿Puedo preguntar, quién eres tú?
Stephen - Soy un amigo muy cercano de ella, estaba algo preocupado porque llegará bien a casa. Pero ya que me dices que la llevaste tú, confiaré en eso. Te agradezco por eso, mañana hablaré con ella. Dijo al colgar la llamada con Liam.
Cuando Stephen colgó la llamada, no sabía en realidad si se sentía molesto porque alguien más que no fue Idalid contestó su llamada o porque alguien más que no fue él la llevo a casa. Él no sabía cómo sentirse respecto a eso, se sentía molesto por no escucharla antes de dormir o porque alguien más la hubiera cuidado y llevado a casa como él lo había hecho durante años.
ESTÁS LEYENDO
Faithful -Stephen Curry-
FanfictionSer solo amigos, estar siempre a su lado pero no de la forma que yo deseaba, dejó de ser suficiente para mí.