El día en que Stephen llegaría de visita a Canadá para poder estar con Idalid había llegado, pero también sería el día en el cual saldría con su compañero y muy reciente amigo Liam. Por lo que, desde ese día por la mañana ella se encontraba arreglándose y preparando los detalles para poder llegar a tiempo a su cita con Liam y poder terminarla a tiempo y de esa manera llegar por Stephen al aeropuerto. Pues, aunque él tenía toda la libertad de llegar a casa de Idalid, los dos acordaron en verse en el aeropuerto y después ir a cenar algo juntos.
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Cuando Idalid llegó al lugar en donde se vería con Liam, estaciono su carro para poder acceder al restaurante y poder tener un lindo almuerzo junto a su compañero Liam. Los dos se encontraban sentados uno frente al otro y mientras esperaban por su orden, comenzaron a platicar sobre ellos para conocerse más y crear un lazo más profundo entre ellos.
Liam – Creo que es lindo poder salir solo nosotros dos. ¿No crees?
Idalid – Si, eso creo. Aunque igual me gustó salir con el resto de nuestros compañeros.
Liam – Si, estuvo bien salir todos juntos también. Al parecer no te cuesta acoplarte a un nuevo lugar y grupo de amigos.
Idalid – No es tan complicado, aunque debo admitir que en ocasiones es algo complicado ya que extraño a mis amigos y mi casa en Los Angeles. Pero el tiempo pasará rápido.
Liam – Entiendo, sé que son 3 meses, pero creo que hay posibilidad de que te quedes más tiempo. ¿Verdad? Preguntó mirándola directamente a sus ojos.
Idalid – Si, podría quedarme más tiempo. Pero depende de mi desempeño y si es que así lo deseo. Por ahora no lo sé con seguridad.
Liam – Tienes un buen desempeño, lo he visto y creo que podría ser una buena oportunidad para conocer mejor el lugar y experimentar otros entornos de trabajo.
Idalid – Si, puede ser. Lo voy a pensar a profundidad, pero por ahora disfrutemos de esto. Dijo al ver que llegaba su orden de almuerzo.
Al terminar de almorzar, Liam sugirió que fueran a ByWard Market para seguir mostrándole las maravillas de Canadá a Idalid, algo a lo que ella no estaba tan segura de acceder, pero ya que se la estaba pasando bien con él no creyó que fuera un gran inconveniente en su tiempo para ver a Stephen.
Los dos llegaron al destino planeado, ya que era un lugar en donde se encontraban lugares en donde se vendían varios productos, se juntaba mucha gente y músicos callejeros, algo que le encantaba ver a Idalid y disfrutaba de experimentar. Ambos caminaban y hablaban sobre los lugares en donde se encontraban, disfrutaban de estar juntos y poder ver a la gente bailar y cantar. Mientras ambos hablaban y la pasaban bien juntos el día comenzaba a avanzar con velocidad o la suficiente como para obscurecer poco a poco, algo de lo que no se percataba Idalid ya que con la música presente Liam la invito a bailar en el lugar en donde se encontraban un par de parejas más.
Aunque Liam no sabía bailar tanto, no iba a desaprovechar la oportunidad de estar junto a Idalid en un momento así sobre todo porque, comenzaba a interesarle un poco más y las ganas de estar junto a ella aumentaban.
Liam – Perdona si llego a pisarte, no soy bueno en esto. Dijo al reír levemente
Idalid – No te preocupes, me asegurare de que no lo hagas. Bailas bastante bien para ser alguien que no sabe bailar. Dijo al sonreír
Liam – Estuve practicando para esta ocasión.
Idalid - ¿Enserio? Preguntó sorprendida – Estabas seguro de que iba aceptar ¿Verdad?
Liam – No, pero esperaba que aceptaras. Tenía esperanza de que fuera así. Dijo honestamente.
Idalid – Bueno, siendo ese el caso. Me alegra haber venido, la he pasado bastante bien en realidad.
Liam – Igual yo, me gustaría que se repitiera. Si estas de acuerdo con eso.
Idalid – Si, me encantaría. Dijo al imaginar la opción de salir con Liam de forma más seria.
Liam – Entonces disfrutemos de esto y después planearemos algo más. Dijo mientras se acercaba más a ella.
Idalid – Cuando volvamos a salir, investigaré y te llevaré a algún lugar de acá. O tal vez podamos visitar LA y entonces yo te mostraré un poco de lo que se puede visitar allá.
Liam – Eso me encantaría, si eres tú la que me acompaña y me lleva a esos lugares. Dijo al acercar su rostro poco a poco para besar a Idalid.
Idalid – Si, puedo hacerlo. Dijo antes de corresponder al beso de Liam
El beso entre ellos comenzó de una manera lenta para comenzar a incrementar, sin percatarse de que la música con la que ellos habían comenzado a bailar se había detenido. Al separarse después de varios minutos de besos, Liam abrazó con fuerza a Idalid para decirle que quería quedarse más tiempo así, comentario que regresó a la realidad a Idalid, una realidad en la que había prometido a Stephen que lo vería en el aeropuerto.
Cuando ella se dio cuenta de que el tiempo había pasado tan rápido que ya había anochecido y que era momento de ver a Stephen, revisando su celular y viendo en la pantalla varias llamadas de él y algunos mensajes en donde le avisaba que su avión ya había aterrizado y que la esperaría en un restaurante dentro del aeropuerto. Al ver ese mensaje de hace 1 hora, solo pensó en despedirse de Liam para manejar con la mayor velocidad posible con dirección al aeropuerto.
Algo con lo que no contaba era que, el carro de Liam tendría problemas para avanzar por lo que, ella se ofreció a llevarlo a casa, pero antes de eso debían ir al aeropuerto, no dando importancia a la reacción que pudiera tener su amigo.
Los dos llegaron al aeropuerto y buscaban con preocupación a Stephen pues, no se encontraba en el restaurante que antes había mencionado y tampoco parecía querer contestar a las llamadas de Idalid. Lo que sin duda la tenía bastante preocupada, Liam solo pensó en abrazarla mientras le decía que todo estaría bien y que seguramente se le había acabado la batería del celular, que sería mejor que siguieran buscando, dándole ánimos y sosteniendo su mano en lo que seguían con su búsqueda.
Búsqueda que funciono pues, minutos después se encontraron con un cansado y ligeramente molesto Stephen, que parecía querer maldecir a todos los cielos por tener que esperar tanto por Idalid y verla sosteniendo la mano de un hombre, que pudo ser motivo de su llegada tan tarde. Haciéndolo sentir molesto porque ella no le comentó que había comenzado a salir con alguien o que estaba con esa persona en el día en el cual ellos se verían y estarían juntos.
