Al día siguiente por la mañana, Idalid fue la primera en levantarse de la cama, para poder salir de la casa de Stephen sin que él se diera cuenta. Pero su intento no funcionó del todo, pues él despertó en el proceso en el cual ella buscaba sus cosas. Él la observó desde el marco de la puerta de su cuarto, mientras ella recogía sus pertenencias.
Él sabía que el ambiente sería extraño entre ellos, aunque no sabía en que proporción lo sería. Le quedaba claro que, aunque hubieran dormido en la misma cama la noche anterior, ella seguía teniendo una relación y debía regresar en unos días a Canadá, por lo que comenzar una relación no era opción.
Stephen - ¿Pensabas irte sin despedirte de mí? Preguntó al acercarse a ella y abrazarla levemente
Idalid - No es eso, es solo que debo regresar a mi casa. No quería despertarte. Dijo al alejarse de él
Stephen - Si me das unos minutos, puedo llevarte a tu casa. Ayer te dije que lo haría.
Idalid - No es necesario, puedo irme sola.
Stephen - Está bien, pero al menos podemos desayunar algo o tomar un poco de café.
Idalid - Puedes desayunar tú, yo no tengo hambre. Dijo en tono cortante
Stephen - Idalid, estoy haciendo un gran esfuerzo para no hablar del beso de ayer. Pero, es difícil para mi ignorar que te estas comportando diferente.
Idalid - ¿Quieres hablar sobre eso? Preguntó de forma directa
Stephen - Si, claro que quiero. Es algo que me importa.
Idalid - Está bien, hablemos sobre eso. No es que no haya disfrutado el beso, pero es imposible no pensar en Liam, es claro que voy a terminar con él, pero no se merece eso.
Stephen - No digo que lo merezca, pero no es que te hayas metido con un extraño, estuvimos juntos ayer porque los dos queríamos.
Idalid - Eso lo sé, no voy a negar eso. Yo lo quería tanto como tú.
Stephen - Bueno, no puedo asegurar que me vaya a apartar de ti. Pero te voy a dar tu espacio, hasta que regreses a Canadá y hables con Liam.
Idalid - Si, es lo más adecuado. Creo que es mejor que hable con él y pase los meses que me faltan en Canadá, cuando regresé a LA podremos hablar de nosotros.
Stephen - Está bien, me parece bien. Regresa y arregla lo que tengas que arreglar. Estaré esperando a que pasen los meses que te faltan y después hablaremos de nosotros. Dijo al tomarla de la mano y caminar a la cocina para desayunar algo antes de llevarla a casa.
El par de días que le faltaban a Idalid para regresar a Canadá, los pasó junto a su familia, Sydel y Stephen, no hablaron sobre una posible relación entre ellos, decidieron respetar la relación de Idalid con Liam y después tener un momento para hablar sobre ellos, dejando el tema de lado y solo disfrutar de los pocos días juntos que les quedaban.
Cuando Idalid llegó a Canadá, se dedicó a arreglar su situación con Liam, una relación que a pesar de que fuera muy reciente, le debía dar el respeto que la misma merecía y con eso en mente, pensó en invitar a Liam en su casa para poder comer juntos y hablar con él sobre lo sucedido con Stephen.
Para eso, lo citó en su casa para que pudieran hablar con mayor privacidad, al llegar Liam a su casa y estar sentado en el sofá de la sala, Idalid comenzó a hablar sobre su decisión de regresar a LA, decisión que Liam ya había pensado y asimilado. Después de comentarle su decisión sobre irse, le contó sobre lo sucedido con Stephen en la fiesta del campeonato. Liam al principio se molesto con ella, pero pasados los minutos comenzó a tranquilizarse y aceptar la situación.
Situación en la que sabía que Stephen e Idalid tenían una relación que él no iba a tener nunca con ella, conocía un poco de la relación entre ellos y por lo poco que los había visto interactuar, no le quedaban dudas de que los dos se atraían y se querían. Por lo que, junto a Idalid decidieron terminar su corta relación, no sin antes desearse lo mejor y terminar como buenos compañeros de trabajo y tal vez, como amigos.
Una vez transcurridos los meses que le faltaban en Canadá, ella regresó a LA, siendo recibida por Sydel que era la única que sabía que iba a regresar con una semana de anticipación. Un dato que no le había contado a Stephen pues, aunque hablaban varias veces por semana, quería darle una sorpresa y esa sorpresa era aparecer en uno de los ensayos de boda de Sydel. Ella regresó antes, para ayudar a Sydel en los últimos preparativos de su boda, boda que se llevaría a cabo en un par de semanas. Por lo que, era muy importante terminar con los últimos detalles.
En el día en el cual se llevaría a cabo el penúltimo ensayo, sería el día en el cual Idalid sorprendiera a Stephen. Ella junto a Sydel planearon decirles a los invitados que se iba a demorar más tiempo en llegar y que los ensayos se llevarían a cabo sin ella. Por lo que, desde ese día por la mañana, Stephen había aparecido en el lugar con un semblante bastante decaído y sin mucha energía, pero al ser llamadas las damas de honor y entre ellas escuchar el nombre de Idalid, hizo que decidiera no voltear en la dirección en la cual ellas aparecerían, pues no estaría Idalid. Pero se llevó una gran sorpresa, al escuchar su risa, lo que hizo que mirará a esa dirección y poder verla caminar junto a las demás damas. Lo que fue suficiente para correr hacía esa dirección y abrazarla con todas sus fuerzas.
Desde el día en el que ambos se encontraron en el ensayo, pasaban sus ratos libres juntos, Stephen e Idalid comenzaron a tener citas oficiales, en las que generalmente hacían lo mismo que hacían cuando eran amigos y antes de separarse. Pero ahora era diferente, porque sabían de los sentimientos del otro y como eran correspondidos.
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El día de la boda había llegado y con este, algunas parejas comenzaban a idealizar estar en esa posición en algún momento y una de esas parejas era Stephen e Idalid, que al estar sentados uno a lado del otro observando y escuchando los votos de la pareja ya casada, hablaban sobre estar en alguna ocasión en un momento así, sea o no de forma tradicional. Desde el momento en que comenzó el Dj a reproducir la música, para que todos comenzaran a bailar, ninguno de los dos parecía querer sentarse y descansar, pero tuvieron que hacerlo, pues los dos estaban exhaustos de bailar y cantar tanto.
Stephen - Entonces, puedo decir que como eres mi pareja en la boda. ¿Ya tengo una oportunidad contigo? Preguntó al besar el cuello de Idalid
Idalid - Si, se puede decir que sí. Creo que ya podemos intentarlo de la manera correcta.
Stephen - Lo sé, pero debo estar seguro. Aparte, me gusta escuchar que ahora si ya podemos intentar tener algo.
Idalid - A mí también me gusta escucharlo y decirlo. Dijo al besarlo cortamente
Stephen - Te va a encantar más escuchar y decir otra cosa. Dijo al incrementar la velocidad e intensidad del beso.
Idalid - Puedes tratar de probarlo, tienes toda mi autorización
Stephen - En ese caso, creo que podemos ausentarnos por un buen rato. Dijo al tomar de la mano a Idalid y caminar hacía una habitación del hotel en el cual se llevaba a cabo la boda.
Después de esa noche juntos en la boda de Sydel, los dos intentaron comenzar una relación, iniciando por conocerse de forma diferente a la amistad que los dos habían tenido desde hace años.
FIN
Les agradezco a todos por haber leído cada capítulo de la historia. Espero en algún futuro poder escribir otra y que le den mucho apoyo. 💜 😊
