Otra decision.

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Alex Andersson.

Luego de las clases, tenía pensado ir a mi casa y dormir un poco ya que este día era muy agotador, respecto al grupito de chicos y el de sus novias. Luego estaban otros deportistas que querían que me unirte a su equipo, pero no me llama mucho la atención.

—Hey, Alex salimos?. Así puedes conocer más el lugar.

A mis espaldas estaba Kevin quien esperaba una respuesta.

—He.. yo.

—Vamos amigo será divertido.

—Déjame pensarlo. De acuerdo?

—Vamos, acepta mi solicitud—insistiendo.

Decidí aceptar la propuesta de Kevin, además de dormir no tenía nada más que hacer y para ser honesto no quería estar en casa. Así que la mejor desicion era salir y tomar aire.

Kevin con los demás chicos y yo quedamos en vernos cerca del karaoke alrededor de las 8:00 de la noche. Así que cuando se había llegado la hora, cogí mis llaves y subí a mi auto. Lucas me había dado indicaciones sobre como llegar al karaoke, creí no llegar pero después de muchas vueltas lo hice. Estaba frente al karaoke. Pero los chicos aún no llegaban, miraba a todos lados a ver si podía distinguirlos entre tantas personas. Todo hubiera salido salido maravilla de no haber sido por un grupo de chicas, con maquillaje excesivo. Ropa demasiada reveladora y parecían desesperadas por encontrar un chico para pasar la noche.

—Hola guapo que haces por aquí solo?.
Su voz era irritante.

—Estoy esperando a unos amigos. Déjame en paz.

—Vamos lindo, no te resistirías a mí la pasaremos muy bien—Me estaba poniendo los nervios de punta.

—Te lo he dicho, déjame en paz.
 


De pronto la chica de cabello negro estaba tocando mis hombros con sus manos, las cuales tenían unas uñas demasiado largas y temía que si la volvía a rechazar atacaría con ellas. Así que estaba acorralado y sabía que no sería fácil escapar de ellas. Pero pude ver luz en la oscuridad Charlie venía hacia mi y traía una cara muy seria.

—Oigan chicas, el chico les ha dicho que no quiere nada.

—Hoo, mira Maria este es perfecto para tí.—La pelinegra chillaba emocionada mientras señalaba a Charlie.

La otra chica se abalanzó hacia Charlie al cual en un abrir de ojos estaba tocando sus hombros. Rayos el estaba peor que yo y su cara estaba pálida. Creí que era por la chica pero noté que si mirada era hacia otro lugar. Y es que al frente estaba la tal Elena que recién recordaba que era su novia. Charlie estaba en aprietos la chica parecía flash y en unos segundos estaba cerca de nosotros y de las irritantes chicas desesperadas.

—¡Oye odiota!. ¿Si tan desesperadas estas, porque no vas a un bar y das tu servicio?. Te quedaría bien. Deja ya en paz a mi novio o te arrepentirás.

La chica estaba atónica y parecía tener temor.

—¿Me estas amenazando niña tonta?.

—Si, y créeme cuando hago una amenaza la cumplo. Lárgate de aquí nadie quiere estar contigo!

Las chicas indignadas se alejaron unos metros y poco a poco fueron caminando lo más lejos posible de nosotros. Pude escuchar como Charlie pretendía decirle a Elena que tenía todo controlado pero lo que recibió fue un golpe en su cabeza mientras ello lo regañaba. Luego las demás chicas fueron cerca de sus novios mientras los abrazaban, no había notado a la pequeña silueta de Anna. Esa chica necesitaba creer unos centímetros más por alguna razón no quería quedar cerca de mi y lo notaba en su cara la cual me evitaba a toda costa.

Literalmente Te Soñé. (Gratis). Donde viven las historias. Descúbrelo ahora