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ALEX ANDERSSON

Después de dejar a Anna en su casa, decidí ir por comida a un Starbucks. Pues seguro mis padres no estarían en casa, papá estaría tratando algún caso de divorcio y mi mamá en el hospital cuidando a algún paciente. Me sentaba bien salir a dar un paseo, pero regresar a mi casa y encontrarla desolada no era para nada agradable. Luego de un día largo y lleno de discusiones con la dramática de Anna había acabado exhausto, y debía descansar. Entrando a mi casa decidí comer mi comida en el salón frente a la televisión, pensando en cómo seria tener hermanos. Mientras pensaba recordé que Lucas me había enviado el número de Anna, hoy las cosas con ella habían salido bien e hicimos una tregua.
Solo esperaba que fuera duradero, la compañía de Anna no me molestaba en absoluto de hecho mañana tenia pensado decirle que se sentara junto a mi en el salón de clases así evitaría a las fastidiosas chicas que intentan conquistarme.

Busqué mi teléfono, y comenze a buscar el número de Anna. Después de agregarla pasé varios minutos pensando si debía escribirle o no.

Ult. Vez hoy a las 5:05 p.m.

—Bueno, no tengo nada que perder solo es su número, le enviaré un mensaje y listo—No me atrevía ni a tocar el teclado.

Solté de golpe el teléfono arrojándolo hacia el sofá, frustrado puse mis manos sobre mi cara intentando descifrar porque me ponía tan nervioso enviarle un mensaje. La imagen de Anna quejándose al haber chocado contra mí frente a los baños apareció en mi mente e hizo que una sonrisa se formara.

—Esa chica es...es...tan tonta—Dije en un susurro.


Luego de pensarlo demasiado decidí que debía escribirle. Decidí agregarla como Anna la dramática.

Yo
Hey hola. 6:10 p.m

Anna la dramática.
Hola, ¿quien eres?. 6:15 p.m

Yo
He, soy yo Alex. 6:16 p.m

Anna la dramática
Ho Alex, no me digas, 6:17 p.m
Lucas te lo dió ¿cierto?

Yo
¿Como lo sabes?. 6:18 p.m

Anna la dramática 6:19p.m
Elena me lo ha dicho,
como sea según ellas
con eso harían que nos
juntemos más. ●_●.

Yo
Solo sigamos el plan ¿vale?. 6:19 p.m

Supuse que al principio Anna debió enfadarse al saber que tenía su número pero ahora con el plan me sería muy útil. Estaba feliz al verla en la práctica de hoy las demás chicas me tenían irritado y a pesar que Anna desde que me conoció se la ha pasado insultandome he llegado a acostumbrarme en tan solo unos días. Estaba en el salón esperando a mis padres, pero ya habían pasado más de 2 horas así que lo mejor era ir a dormir o de lo contrario no escucharía el despertador y llegaría tarde. Antes de dormir asomé por mi ventana para ver a la luna la cual estaba de hermosa como siempre y por alguna razón me recordaba a Anna.

—¿Tú crees que se ella?—Dije mirándola profundamente.

Ella solo con su resplandor me respondió. Pero como podria saberlo, solo la ví en mis sueños ¿eso es normal?. No lo creo, pero en los primeros días de clases Anna me miraba raro.
Decidí sacarme de esos pensamientos y miré a la luna, estaba rodeada de muchas estrellas y nubes que se iban desvaneciendo poco a poco. Dije buenas noches a la luna y me recosté en mi cama.

Literalmente Te Soñé. (Gratis). Donde viven las historias. Descúbrelo ahora