El Cambio

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Anna Collins

Me dirigía al asiento donde siempre me sentaba con mis queridas compañeras de clases y amigas de locuras. La cafeteria estaba repleta de chicos, unos corriendo y otros caminando normal, era un tanto difícil caminar en un lugar donde hay tantas personas.

Mi cuerpo podía estar en la cafetería, tomando mi bandeja de comida china y caminando hacia donde mis amigas. Pero mi mente estaba situada en el "En el planeta de ideas para ayudar a mi amigo". Ojalá alguien me hubiese pellizcado.

Todo paso en cámara lenta, una chica no muy alta.

Bueeno era de mi misma estatura.

La chica no se percató de que yo iba caminando justo cuando ella pasó frente a mí, ella iba tan apresurada con su celular en una mano y su bandeja de comida en la otra. Ojalá se hubiese caído, pero la realidad fue que caí sobre ella con mi bandeja de comida en su cara. Y sus altos tacones pisaron mi pie.

¡Carajo duele!

Me quede en shok, era la chica con la que Alex ha estado estos días. Luego mire al hacia bajo y ¡mi comida estaba en el suelo, y yo tenía hambre!. Pero la chica, se levantó del suelo a duras penas con esos altos tacones y me miró, pero no con amor ni con una mirada de "disculpame". No, ella solo me miró mal de pies a cabeza y dijo esto

-¿Qué acaso no ves por dónde caminas?

¿QUÉ?

-Esa pregunta deberia hacértela yo a ti-me puse firme.

Ella se tocó el pecho fingiendo indignación.

-¿Yo?, niña inútil. Eres tan despistada.

-Niña tonta eras tú la que llevaba su teléfono en una mano y la bandeja en otra-alzé la voz.

-Ese tono de voz no va conmigo idiota-se acercó a mi-¿Crees que eres importante por ser hermana de Víctor. O por ser un poco cercana a Alex?.

No dije nada.

-Deja ya de hacerte ilusiones, el jamás podría fijarse en alguien como tú-me miro de pies a cabeza como si fuese la cosa más fea del planeta-Está harto de que todos sus amigos intenten emparejarlo contigo.

-No se de que hablas-fue lo único que pude decir.

Ella sonrió.

-Discúlpate- se alejó de mí, para que todos escucharán.

-No lo haré, disculpate tú-dije sin pensarlo.

Su sonrisa se esfumó, y me miró con odio.

-Que te discul.....

-Basta.

Él la sostuvo del brazo.

Ella lo miró.

Y yo los miré.

-Deja de hacer tanto escándalo por una bandeja de comida-su mirada se dirigió hacia mí.

Literalmente Te Soñé. (Gratis). Donde viven las historias. Descúbrelo ahora