Duele Quererte Así

Capítulo 17

– Javier si eso llegase a ser cierto–  Esteban se acercó a él mencionado y tomo sus manos, un acto que no le agradó mucho a Eduardo, sin embargo no pensaba hacer una escena, ni tampoco tenía porque reclamarle– Lucas se encargaría de callar a las personas que sepan esa verdad, es por eso que no puedes decirle nada por ahora Eduardo– Gira su cabeza hacia donde se encuentra el mayor, quien asiente y gira la vista– Necesito que creemos un plan para que el crea que ustedes ya no se hablan, eso hará que el se mantenga confiado– se aleja de Javier, quien parece estar en shock por esa posible verdad, es que el jamás pensó que no era un Rojas, ¿como pensarlo?, Si él tuvo una familia es imposible.

– No hará falta fingir Esteban– Javier camina hacia Eduardo y se coloca frente a el– Porque es una realidad, no pienso dirigirle la palabra a Eduardo– este se tensa y frunce el ceño– En lo que sí estoy de acuerdo es que hay desenmascarlo, Lucas tiene que pagar por todo el daño que nos ha hecho, el no ganará está guerra– habla con voz demandante y un destello de irá en su mirada.

– Javier– Eduardo por tercera vez ha dicho alguna palabra– No puedes dejarme de hablar, no es justo ahora que posiblemente tu y yo no seamos hermanos, podemos ser felices de nuevo, mi bonito yo...– trata de tomarle las manos , pero este las aleja y niega con la cabeza.

– No me importa si ya no somos hermanos Eduardo– se encoge de hombros y da un paso hacia atrás– Me has lastimado lo suficiente, has lastimado mi corazón, has destrozado mi alma una y otra vez, ¿para que seguir en esto?– pregunta mientras niega con la cabeza,Eduarda da un paso hacia Javier, se sentía mal, no quería reconocer que tenía toda la razón, el tenía razón en estar así con el– Es mejor darnos un punto y aparte para siempre Eduardo, antes que nos hagamos más daño o antes que nos volvamos locos, esto no es sano–  unas cuantas lágrimas resbalan por la mejilla de Javier, le está doliendo esto, estaba poniendo un stop a todo lo que sentía por el mayor, ya estaba agotado de todo.

–Javier, Eduardo tiene razón– comenta Esteban quien los veía desde hace minutos– Ustedes deben de luchar por su amor, ambos se aman demásiado. Es injusto que cuando exista una posibilidad de volver a estar juntos , ahora quien los quiera separar seas tu– Eduardo estaba confundido, no sabía cómo sentirse con respecto a Esteban, sabía que lo odiaba pero tal vez no tanto.– Yo creo que ustedes tienen mucho de que hablar, ambos necesitan aclarar muchas cosas, yo creo que es mejor que yo me vaya por ahora– Se le acerca a Javier y coloca su mano en su hombro– No dejes ir lo que la vida te ha vuelto a dar, amigo escúchame– Javier asiente y le hace seña para que continue– No dejes que el odio hacia mi primo te ciegue, porque en la mayoría de las cosas que el ha hecho, Eduardo también ha sido una víctima– y es ahí donde Javier entra en razón, por un segundo se sintió tan dolido que no pensó que Eduardo también era una víctima más.– Nos vemos mañana en el Hotel Secret Love, los estaré esperando para comenzar con el plan contra Lucas – se despidió con un asentimiento y salió de la habitación dejando a Eduardo y Javier solos.

Ambos respiraron profundo, analizando la situación, todo era de pronto tan extraño, tan diferente. Javier tomó asiento en la cama tu con una seña le indico a Eduardo que le imitará el acto.

– Javier se que he sido un estupido, un idiota, un imbecil, que no te merezco por ser tan bruto y celoso–  Eduardo habla mientras que se le acerca un poco más a la menor, con los ojos cristalizados este asiente– Se que permití que Lucas se metiera en nuestras vidas, eso es algo de lo cual me arrepiento tanto, me arrepiento de no haberte aceptado el irnos juntos hace años cuando me lo dijiste, es que demonios aunque fieras mi hermano nunca pude sacarte de mis pensamientos, de mi piel, de mi estúpido y tonto corazón, el solo late por ti, el solo te quiere a ti, he tratado de luchar contra mis sentimientos y no he podido, no he logrado olvidarte, mientras más lo intento más me doy cuenta que estás tan clavado en mi.– tomó sus manos y las llevo a su pecho, mientras que con la otra acariciaba su mejilla– No te pido que volvamos a estar juntos porque se que ya no lo quieres, pero...– No termino de hablar cuando sintió unos tibios labios sobre los suyos, que se movían lentamente sobre los suyos, ¿es que acaso el quería matarlo?...

Ambos seguían un ritmo pausado, lento disfrutando de aquel beso que ambos necesitaban, Javier enredo sus dedos en los rizos que se le formaban a Eduardo. Este por el otro lado se encargaba de acariciar su espalda, con movimientos delicados, como si estuviera tocando un cristal, por la falta de aire se separaron, ambos las mejillas rojas y una temperatura bastante caliente....