vingt

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—Estoy dejando crecer mi cabello para ponerle un tinte rubio, ¿qué piensas de ello?

Kai miró a su enamorado, quien arreglaba sus mechones de cabello mientras se miraba en el espejo del baño.

—Te verás genial. Puedes llevar un montón de rayitos de colores en el cabello y siempre te verías genial -el mayor rió, sonrojado y tomó la mano de Kai para halarlo en un abrazo. El menor suspiró, correspondiendole y apretando sus brazos alrededor del mayor— ¿Hoy tienes entrenamiento?

—Sip. Toda la semana tengo entrenamiento hasta las cinco y media, el entrenador incluso dijo que nos sacará de clases para entrenar por la mañana, y éste sábado entrenaremos desde las siete de la mañana hasta las dos de la tarde. Siento que moriré.

Kai le mostró un puchero, tomandolo de las mejillas para dejarle un beso en los labios.

—Te acompañaré cuando no tenga muchas tareas, ¿si?

Soobin asintió y volvió a besar los labios de Kai, justo cuando la puerta del baño se abría y por ella entraba Younghoon, con un aura oscura rodeandolo.

El chico les dió una mirada antes de pasar de ellos hasta encerrarse en el último cubículo del baño.

Cuando Soobin y Kai se separaron, dispuestos a salir del baño, el cuerpo de Chanhee apareció por la puerta, casi empujandolos para ir a cada uno de los cubículos en busca de su pareja.

Soobin y Kai le restaron importancia a ello, y salieron del baño, dispuestos a dirigirse con sus manos entrelazadas hacia el gimnasio, donde Soobin pasaría las próximas cinco horas entrenando.

Y si escucharon un poquito de la pelea que estaban teniendo Younghoon y Chanhee, ellos no tenían por qué mencionar algo al respecto.

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idiota • sookaiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora