La Mejor Amiga de Mamá (Jenlisa)

Capítulo 10

—Ni que fuera mi esposa. —le voltee los ojos y entre al baño ignorándola absolutamente.

Me bañé, necesitaba relajarme. Tarde una hora bajo el agua y luego salí envuelta en una toalla en el cuerpo y otra en la cabeza.

Jennie seguía en la habitación. Estaba acostada con los ojos cerrados y las manos juntas en la barriga, o tal vez se había quedado dormida.

Me acerqué a ella y besé sus mejillas, su frente, su barbilla, su nariz y finalmente dejé un corto e inocente beso en sus labios.

Jennie abrió los ojos de golpe y yo me separé rápidamente.

—¿Qué hacías? —me miró con los ojos entrecerrados.

—Nada. —le sonreí inocente.

—Como sea. —bostezó. —Jisoo me dejo encargada que te dijera que tenemos que estar hoy a las siete en el Teatro Trail, tu hermana tiene una presentación muy importante y quiere que estés presente, yo voy a llevarte.

—¿Me dejas cambiarme? —señalé la puerta.

—Como si no te hubiera visto desnuda antes. —rodeó los ojos.

—Bien, aténgase a las consecuencias. —sonreí.

Jennie frunció el seño.

Me quité la toalla y empecé a deslizarme por la habitación "buscando cosas" de vez en cuando la miraba de reojo y veía como observaba mi cuerpo desnudo algo nerviosa.

Cuando me dio frio tomé la crema para el cuerpo y empecé a esparcirla descaradamente frente a Jennie.

Ella tragó saliva.

—Dicen tus padres que te vistas elegante porque después tienen una cena importante con uno de sus socios, y es alguien muy importante y que no conoces.

—¿Quién? —la miré ceñuda.

Según yo conocía a todos los socios de mi padre.

Jennie se encogió de hombros.

—No lo sé, solo sé que viene de Texas.

Asentí y busqué algo en mi closet que fuera más o menos elegante, pero sin perder mi estilo.

Me puse un vestido con cuello estilo camisa y unos tacones a conjunto. Sequé mi cabello y lo peine, me maquillé y me hice los últimos detalles y Jennie seguía ahí.

—Estoy lista.

—Vamos.

La miré, traía un vestido negro que hacia lucir su hermosas curvas, unos tacones plateados, su cabello estaba lacio y un maquillaje suave.

Tomé mi bolsa del mismo color que mis tacones y salimos de la habitación.

—Aun no entiendo porque se quedó todo el tiempo que me estuve arreglando.

Jennie me miró.

—Por si te escapabas.

—Idiota. —susurré.

—Te oí. —dijo mientras entraba a su habitación.

Salió de ella con su bolsa de color negro en manos. Debo admitir que así se veía perfecta.

Salimos de la casa, el chófer nos llevó hasta el teatro donde ya había actuado anteriormente mi hermana.

El chófer nos abrió la puerta, afuera había muchos autos y gente entrando también.

—A Janny le va alegrar que estés aquí. —rodeo mi cintura con su brazo.

Me sorprendí un poco por su acción, pero no dije nada y juntas entramos. Papá y Mamá estaban sentados en primera fila justo enfrente del escenario. Al lado de ellos había dos puestos vacíos.