Capítulo 18

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AEROPUERTO DE PARÍS-CHARLES DE GAULLE, FRANCIA 4:00am

Son las 4 de la madrugada cuando llegamos a nuestro destino. Desde la ventanilla del avión el paisaje es hermoso. La enorme torre Eiffel esta increíble y el cielo lleno de neblina, las calles apenas tienen unas cuantas personas y autos ya que es muy temprano.

Jennie duerme a mi lado, pero yo no he podido pegar un ojo en toda la noche, la emoción puede conmigo.

Una de las chicas aeromozas pide que abrochemos nuestros cinturones por lo que todos despiertan, el aterrizaje fue rápido no tardo mucho como creí, al bajar del avión fuimos a la zona donde se recogen las maletas, luego pasamos a una gran sala en la que se forman una gran cola para enseñar el pasaporte para confirman que eres tú, y por el control de maletas y aduanas.

Después de haber hecho todo eso salimos ambas por la puerta principal del aeropuerto con los dedos entrelazados, ni me di cuenta que afuera ya estaba claro, hasta que ya íbamos las dos en un taxi hacia el hotel.

La ciudad es increíble, ver tantos franceses caminando por las hermosas calles, su estructura y estilo es emocionante.

El viaje en taxi se me hizo corto lo cual ya habíamos llegado al hermoso hotel 'Maison Souquet', bajamos del auto y el chófer nos ayudó con el equipaje, le pagamos y entramos, Jennie cada vez que podía me miraba y sonreía como adolescente enamorada, yo solo me sonrojaba como boba, pasamos por la recepción Jennie dio su nombre y le entregaron la llave de la habitación, dos señores querían ayudarnos con el equipaje, pero ambas dijimos 'No Gracias'.

Jennie y yo nos dirigimos hacia el elevador y no tardó mucho en llegar al lobby, Jennie en forma de reverencia me dio espacio para entrar al elevador, lo cual me causo mucha risa, luego ella entro y presiono el botón del piso 7.

—Que habitación nos tocó Jennie.

—La número 27, Lili.

—Lili?

—Que! no te gusta. —me mira estaño

—Si está lindo Nini. —le regalo una sonrisa

—Nini?

Cuando le iba a responder, el elevador se detuvo y abrió sus puertas en el piso 7, ambas salimos y nos dirigimos a buscar la habitación número 27, cuando la encontramos no tardamos mucho en abrir la puerta.

La habitación del lujoso hotel es hermosa. Tiene un estilo mediterráneo con paredes terracota y decorado del siglo XIII sin perder el toque moderno. Una chimenea de piedra da calor al increíble frío francés.

Lo mejor de todo es que la habitación es doble y con abrir una puerta puedo dar a la habitación de Jennie.

Particularmente hoy estoy cansada, viajar en avión no es lo mío, dejo las maletas en la primera habitación que es la mía, entro al baño me relajo con un baño de agua caliente, al salir busco en mi maleta y me pongo un pantalón negro con un suéter blanco y me tiro a la cama a ver una película en FOX (ahora Star Channel  ;-;-;) mientras espero la pizza que pedí hace unos minutos llegase.

La puerta suena, es el repartidor esta con un gran abrigo y una pizza grande en la mano. Le pago y le doy una buena propina. Vuelvo a mi habitación, me acuesto en la cama y empiezo a comer la pizza viendo Los Juegos Del Hambre.

Dejo la caja en la mesita de al lado y justo en ese momento Jennie entra y se acuesta a mi lado, lleva puesto un short blanco y una camisa de tiras roja, no tendrá frio con esa ropa.

—Los Juegos del Hambre. —dice.

Yo asiento.

La castaña toma el control y apaga la tele y la fulminó con la mirada de inmediato.

La Mejor Amiga de Mamá (Jenlisa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora