Mareas Peligrosas [#2 Bilogía Peligrosas]

Capítulo 43

LEILA

- Cada vez que me separo de ti te pasa algo ¿Qué voy a hacer? lo mejor será que te ate a mí para que no te separes en ningún momento - escucho su susurro y me río - así qué está despierta la pequeña peleona

- ¿Qué haces aquí?

- Estás mal - susurra dándome un beso en la frente - estoy en dónde tengo que estar

- Te quiero - me acurruco a él - tengo frío

- Tienes fiebre déjame mirar la herida muñeca - se coloca de rodillas junto mi pierna y levanta el vendaje - joder - da un salto de la cama y me coge en brazos mientras me acurruco a él y me lleva a la habitación hospital

- No quiero calmantes

- Mírame - lo hago - yo estoy aquí contigo y aunque te ponga anestesia y te duermas no te va a pasar nada

Me quedo mirándolo por unos segundos y después asiento, me da un beso en los labios para después ponerme la anestesia que hace que me duerma en segundos

***

Mauro tocándome

Mauro besándome

- No - susurro - No, no, no - grito sentándome en la cama

- Muñeca - Dante sale del baño de nuestra habitación corriendo hacia la cama y se sienta abrazándome - todo está bien

- Mauro estaba - digo entre sollozos - me tocaba y me hablaba

- Tranquila muñeca estoy aquí contigo, hoy y siempre estaré para protegerte, él está muerto no te volverá a tocar - me da besos en la frente mientras me repite una y otra vez que me lo promete

Se acuesta conmigo y me abraza mientras me relajo apoyada en su pecho haciendo que me vuelva a quedar dormida

NOA

Leila está con Dante así qué me quedo en mi habitación estudiando, estoy en el escritorio haciendo unos ejercicios de la universidad cuándo aparece en la pantalla del ordenador una video llamada de Lui, sonrío aceptando la llamada y veo su sexi rostro del otro lado

- Hola italianito ¿Ya te has instalado? - sonrío

- Si amor, me voy a trabajar pero quería verte un segundo ¿Todo bien con Leila?

- Dante está con ella, hemos tenido que curarle la herida otra vez por qué se le estaba infectando pero ya está todo bien y ahora está durmiendo

- Me alegro que esté bien, Dante casi se vuelve loco

- Cómo todos, cuando llegamos y vimos todos los cadáveres nos asustamos muchísimo

- ¿Tú estás bien verdad amor?

- Sí, tranquilo - sonrío - estoy estudiando ¿me llamas a la noche? - hago un puchero

- Por supuesto - me guiña un ojo - te quiero amor hablamos luego

- Ten cuidado

- No me pongas esa carita - hace un puchero y me río - te aviso cuando termine - asiento y después de mandarle un beso cortamos la llamada y sigo estudiando

***

- Hola - me sobresalto asustada y giro mi cabeza hacia la puerta de la cocina - no quería asustarte

- No pasa nada - lo miro - antes no nos presentamos bien soy Noa

- La mujer del jefe - asiento ya que me imagino las amenazas de Lui - soy Treet

- Eres el encargado de todo - lo miro a los ojos - solo viniste a darnos ordenes ¿no?

- Es lo que hace tu hombre ¿no?

- Él es el jefe - lo reto - ¿tú? - lo miro de arriba abajo - naa no eres como él - alza una ceja y se ríe

- Me gustas, no te intimidas eres buena para el jefe

- ¿Gracias? - sonrío de lado - olvidé pedir tu permiso para estar con el jefe

- No me retes

- No me des órdenes

- Ese es mi trabajo

- ¿Felicidades? Nadie me manda, ni tu, ni tu jefe

- A ver si es verdad

Me río y niego con la cabeza, me cae bien, nos quedamos hablando un poco más hasta que lo llaman al teléfono y se va de la cocina después de despedirse de mí con un asentimiento de cabeza.

Echo café en el termo y vuelvo a la habitación, escucho voces en la sala pero no voy para que no me distraigan después ya bajo a cenar con ellos tengo que hacer un trabajo y no quiero perder tiempo.

***

Estamos todos cenando juntos en el comedor

- Mañana iréis con el doble seguridad a la universidad

- No nos quieren a nosotros quieren a Leila lo más normal es ponerle protección a ella no a nosotros - digo mirando a Treet

- He dicho - gruñe - el doble a la universidad

Ruedo los ojos y cuándo me suena el teléfono sonrío levantándome de la mesa y subiendo las escaleras a la vez que contesto

- Hola amor ¿has comido ya?

- Si, estábamos en el comedor - me tiro en la cama

- Te llamo para darte las buenas noches pero me tengo que ir ya

- Está bien - miro su cara memorizando cada gesto cómo hago siempre por si no lo puedo volver a ver - Buenas noches mi amor - le mando un beso

- Buenas noches - me guiña un ojo y colgamos después de mandarnos algunos besos mientras nos miramos y sonreímos

Cuelgo la llamada y suspiro con el móvil abrazado en el pecho mirando el techo

- Lo extraño