Capítulo 31.

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La oji-roja al escuchar ese nombre se quedo quieta en su lugar pero luego con desinterés miro por encima de su hombro a la protagonista de los murmullos. La recordaba perfectamente, fue la prometida de su hermano y también usaba esa excusa para molestarla a ella.

Era ella....ella fue por ella qué la relación entre su hermano y ella fuera casi inexistente, si de por sí era complicada la relación entre ambos, ella fue la responsable de que la poca hermandad qué quedaba se convirtiera en cenizas.

Todo había comenzado gracias a una pelea donde Violette intento correr a varias mucamas qué solían servirles solamente a la princesa Rossba, esta al enterarse fue a buscar explicaciones qué llegaron a golpes y por supuesto que su hermano, protegió a su prometida y despidió a sus sirvientas exclusivas dejando solamente a dos y a Celine. Desde entonces ella y Claude se volvieron más distantes al grado de solo saludarse cuando se veían.

La muchacha tenia la piel morena con unas pocas pecas esparcidas por su nariz, su pelo amarrado en dos coletas detrás de su nuca era de color violeta oscuro, ojos caídos color bermellón.

Tenia un cuerpo no tan desarrollado pero eso no quitaba su elegancia, llevaba un vestido de tonalidades rosa y joyería que hacia juego con la vestimenta.

- Lady Violette me alegra verla, aun me pregunto porque no ah llegado a la hora acordada- comento con algo de enojo.

- lo siento mucho Lady Estela pero tuve unos pequeños problemas con el carruaje- se disculpo con una sonrisa tímida.

- esta bien, dejame presentarte ante otras señoritas que vinieron- Lady Estela dijo ofreciéndole seguirla.

Después de un rato ya todas se habían presentado aunque con la princesa Isabelle fue difícil pues la joven había pasado de largo ignorándola por completo lo que provoco un desliz junto a un ambiente tenso.

- princesa, ¿gusta algo mas de té?- pregunto Estela tratando de alivianar el ambiente.

- me gustaría algo de jugo por favor Lady Estela- Rossba pidió con una sonrisa alegre- si no es mucha la molestia.

- claro que no, todo para que usted y el joven Claude estén a gusto- Estela levanto una campanilla para que viniera un sirviente.

Todas notaron que Violette endureció su mirada cuando junto a Claude y la princesa en la misma oración, con disimulo la peli-violeta miro con odio a la princesa nadie nunca le quitaría a Claude de eso ella se encargaba.

- la princesa debe ser muy cercana al joven Claude- Violette hablo de la nada- tanto que quizás es raro.

Rossbartlett solo soltó una pequeña risa que oculto detrás de su mano, las demás también estaban aguantando la risa, Violette no entendía que ocurría pero con fuerza se levanto de su asiento mirando furiosa a la bella princesa quien impenetrable seguía bebiendo té.

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Claude estaba luchando contra uno de sus amigos mientras que hablaban, estaba concentrado quizás pensaba en como impresionar a su hermana. Entonces noto a Estela la hermana de uno de sus amigos se notaba asustada cuando se acerco a ellos.

- ¡HERMANO HAY PROBLEMAS!- grito Estela asustada acercándose al mayor- ¡Violette se ah vuelto completamente loca!.

- hermana tranquila, dime que ah ocurrido- hablo el hermano calmado, seguramente no seria nada.

Claude dejo su espada de lado para secarse el sudor de la frente con el borde de su manga, miro a donde estaría su hermana y noto que una chica estaba discutiendo con ella, ambas estaban de pie.

¡Renací Para Vengarme De Esa Perr*! . [REEDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora